De pruebas más duras a una fe más profunda.
Sethrina Odonko y su esposo Arnold, miembros activos de la Iglesia en Ghana, vivieron una experiencia que transformó su manera de ver el evangelio. Cuando su hijo nació con un problema grave en el corazón, sus días se llenaron de visitas a hospitales y farmacias. Durante tres meses, buscaron un medicamento muy difícil de conseguir, mientras su bebé luchaba por su vida en una unidad de emergencia en Accra.
En medio de ese dolor, Sethrina hizo algo que nunca antes había hecho: leyó el Libro de Mormón completo. Aunque siempre había sido activa en la Iglesia, nunca había sentido una conversión tan personal como la que vivió en ese momento. A través de su lectura, encontró consuelo, fuerza y un sentido claro del amor de Dios. Dijo que sintió cómo el poder del Libro de Mormón empezó a llenar su vida y ayudarla a seguir adelante.
Hoy su hijo tiene 25 años y vive una vida saludable

Y aquella madre que pensaba que su rol era estar detrás, apoyando, fue llamada junto a su esposo a servir como líderes de misión en Jamaica. Con el tiempo, comprendieron que el Señor veía en ellos algo que ellos mismos aún no reconocían. Como lo expresó ella con humildad, “Dios me miraba desde atrás y me empujaba con ternura hacia adelante”.
El poder que transforma desde adentro
Esta historia nos recuerda que el Libro de Mormón nos acerca a Cristo y transforma nuestra relación con el Padre Celestial. Como enseñó el presidente Russell M. Nelson:
“Cuando pienso en el Libro de Mormón, pienso en la palabra poder. Las verdades del Libro de Mormón tienen el poder para sanar, reconfortar, restaurar, fortalecer, consolar y animar nuestra alma.”
Leerlo no elimina los desafíos, pero nos da la fortaleza para enfrentarlos con fe.

¿Y nosotros? Podemos aprender de su ejemplo.
Tal vez no estemos pasando por una situación tan crítica como la suya, pero todos tenemos momentos en los que necesitamos sentir a Dios más cerca. Y una manera muy efectiva de lograrlo es abrir el Libro de Mormón, empezar desde el principio y dejar que su mensaje vaya moldeando nuestra vida día a día.
Fuente: LDS Living
Video relacionado



