Jesús prometió que si “…[buscamos] primeramente el reino de Dios”, se nos dará todo lo demás que necesitemos (Mateo 6:33).
Eso fue lo que le sucedió a Carlos Wizard Martins, un Santo de los Últimos Días, empresario multimillonario, creador de una franquicia de escuelas de idiomas y filántropo originario de Brasil.
En una entrevista para Deseret News, Martins compartió el secreto de cómo se convirtió en uno de los hombres multimillonarios del mundo con sus inversiones y la venta de su franquicia a 719,6 millones de dólares, según Forbes.
Convertirse a la Iglesia de Jesucristo
Carlos Wizard Martins es un empresario multimillonario y Santo de los Últimos Días. Imagen: Canva
Cuando Martins tenía 12 años, sus padres se preocuparon por el declive moral de la sociedad. Él expresó:
“Mis padres sentían un vacío dentro de ellos.
Pensaban que la sociedad estaba perdiendo la noción de lo que era correcto e incorrecto, con principios, valores, ética fuera de lugar y una falta de respeto mutuo.
Impulsados por este pensamiento, comenzaron a buscar una religión que les ayudara a criar a sus siete hijos pequeños y mantener unida a la familia.
Fue en ese momento que los misioneros tocaron a nuestra puerta”.
Cuando tenía 12 años, su familia se convirtió a la Iglesia y su vida cambió. Imagen: Canva
Esta experiencia cambió la vida de Martins.
Su familia se unió a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y él comenzó a aprender inglés gracias a los misioneros.
Asimismo, los élderes lo alentaron a estudiar en Brigham Young University (BYU) cuando llegara el momento.
Debido a los ingresos de sus padres, este sueño parecía poco probable. Sin embargo, esa idea permaneció en él.
Una decisión que cambió su vida
Gracias a los misioneros, Martins aprendió inglés y tuvo el deseo de estudiar en BYU. Imagen: Fabiano Accorsi
Cuando cumplió 19 años, Martins sirvió en una misión de tiempo completo en Portugal. Después de regresar a casa, se casó y consiguió un empleo en el que le pagaban el sueldo mínimo.
Fue en ese momento que la pareja tomó una decisión de la que nunca se arrepentirían.
“Decidimos buscar la prosperidad con la ayuda de Dios.
Le prometimos al Señor que seríamos 100% fieles con el pago de un diezmo íntegro y que seríamos generosos con las ofrendas de la Iglesia.
Al comenzar nuestra vida de recién casados, aún no sabíamos qué hacer para salir de la pobreza en la que nos encontrábamos…
No teníamos un mapa, ni una brújula, ni una hoja de ruta, ni estándares ni pistas.
Solo teníamos el deseo y la confianza de que el Señor nos bendeciría según nuestros esfuerzos”.
Graduarse de BYU y enseñar inglés
Después de graduarse de BYU, Martins se casó y consiguió un empleo donde le pagaban el sueldo mínimo. Imagen: Canva
Una de las primeras bendiciones llegó cuando Martins fue aceptado en BYU.
Tenía 26 años, una esposa y gemelos. Recibió su título y regresó a Brasil.
A los 30, se convirtió en ejecutivo de una empresa multinacional y planeó hacer su línea de carrera ahí.
Entonces, uno de sus compañeros de trabajo le preguntó si podía enseñarle inglés.
“Acepté y comencé a darle clases en la sala de mi casa en las noches cuando salíamos del trabajo. Después de este primer alumno, vino otro y luego otro y otro. Con el paso del tiempo, el número de estudiantes aumentó“.
Pronto, enseñar inglés le generó más ganancia que su salario en la empresa para la que trabajaba.
Martins renunció a su trabajo e invirtió sus ahorros en una escuela de enseñanza de idiomas a la que llamó “Wizard”.
“Wizard” se convirtió en la escuela de aprendizaje de inglés con más rápido crecimiento en Brasil.
Fundar su franquicia de escuelas de inglés
Martins comenzó a enseñarle inglés a un compañero de trabajo y pronto comenzó a tener más alumnos. Posteriormente, fundó una franquicia de idiomas que fue un éxito. Foto: Matheus Meireles
De tener un alumno en su sala, Martins hizo crecer la empresa a 3 000 escuelas en 10 países con 50 000 empleados y más de 1 millón de estudiantes por año.
No satisfecho con su éxito, Martins también ha trabajado para ayudar a otros a tener éxito. Ayudó a más de 100 personas en Brasil a convertirse en millonarios a través de su negocio de franquicias.
Esta experiencia lo llevó a escribir un libro, “Awaken the Millionaire Within” (Despierta el millonario que hay en ti), al que llama su “filosofía personal del éxito”.
Durante los años construyendo su exitosa empresa, Martins sirvió como obispo, presidente de estaca y presidente de misión. Asimismo, busca continuamente compartir el evangelio con los demás.
Compartir conocimientos e impulsar a otros a alcanzar el éxito
Martins no solo es un empresario exitoso, sino también una persona generosa que comparte su conocimiento para que otros también puedan alcanzar el éxito. Imagen: Canva
“Es un misionero extraordinario en sus tratos comerciales y todo lo demás que hace. Simplemente, no tiene miedo de compartir el evangelio con alguien en cualquier momento.
La forma en que predica es tan natural que casi pasa desapercibida. Pero, no hay nadie que no sepa que Carlos Martins es un miembro fiel de la Iglesia”, dijo Mark Palmer, intermediario de LDS Philantropies.
Los principios del evangelio han guiado a Martins en todos los aspectos de su vida y las lecciones que su padre le enseñó lo han ayudado en su carrera profesional.
Martins continúa compartiendo estos dos aspectos de su éxito para ayudar a otros a alcanzar su máximo potencial.
“Creo que toda persona exitosa lleva dentro de sí un sentimiento de que está cumpliendo una misión, ya que cualquier victoria pierde su sentido si no la usamos para propósitos aún mayores”, expresó Martins.
Fuente: Deseret News
