“Dios se preocupa por sus carreras”, declaró el presidente de BYU–Pathway Worldwide, Brian K. Ashton, en el devocional al iniciar un nuevo semestre el 30 de abril.
“Sus trabajos les permitirá apoyar a sus familias, educar a sus hijos y servir a los hijos de Dios en la Iglesia, sus comunidades y sus naciones. Como resultado, Dios los ayudará en sus profesiones si son humildes, se esfuerzan por hacer Su voluntad y buscan Su ayuda”.
El presidente Ashton junto a su esposa, la hermana Melinda Ashton, testificaron que a través de la humildad, la oración, la acción y el don del Espíritu Santo, los Santos de los Últimos Días pueden recibir revelación para guiar sus profesiones.
La revelación personal en sus carreras profesionales
La hermana Ashton dijo a los estudiantes que “casi todos tendrán experiencias en su profesión que requieran revelación personal específica. En muchos casos, las respuestas que reciban bendecirán no solo a ustedes y a sus familias, sino también a muchos otros”.
El presidente Ashton compartió que en su carrera como empresario, se enfrentó a una crisis y no sabía cómo iba a pagar la nómina. A pesar de sus esfuerzos, no encontró ninguna solución.
“Finalmente, en el último momento, volví a orar y se me dio el nombre de una persona a la que ir a ver”, relató el presidente Ashton. Fui guiado por el Espíritu en esa conversación, lo que me llevó a la solución que necesitaba”.
Debido al don del Espíritu Santo, dijo la hermana Ashton, y “a medida que se esfuerzan por guardar los mandamientos y honrar sus convenios, pueden tener la seguridad de que el Espíritu los guiará incluso cuando no lo reconozcan”.
Esta ayuda está disponible para los hijos de Dios, ya que “Él desea ser parte de su vida y ayudarlos en su camino”.
Ayuda para hacer lo que Dios quiere que hagas
Refiriéndose a una idea del presidente Spencer W. Kimball, el 12º presidente de la Iglesia, los Ashton compartieron cuatro acciones que los estudiantes pueden tomar para impactar al mundo a través de sus misiones en la vida dadas por Dios. Estas son:
- Obtener una educación de clase mundial.
- Purificarse a través de la Expiación de Jesucristo.
- Comprender el plan de salvación de Dios.
- Aprender a recibir revelación tanto en cosas espirituales como temporales.
“A lo largo de nuestras vidas, Dios nos guiará y nos ayudará a avanzar por un camino que nos permitirá cumplir la obra que Dios tiene para nosotros”, dijo la hermana Ashton.
Esto no significa que todo saldrá según lo planeado o que no habrá dificultades en la vida. Sin embargo, “significa que seremos guiados para hacer las cosas que importan”.
Después de tomar decisiones reflexivas e intencionales, la hermana Ashton mira hacia atrás para reconocer la guía de Dios en su toma de decisiones.
Mirando hacia atrás, reconoce “que Dios me estaba ayudando aunque yo no lo reconociera”. Dijo que para aquellos con el don del Espíritu Santo, esta guía viene a menudo en su vida diaria y en sus carreras.
En su primera conferencia general como presidente de la Iglesia, el presidente Russell M. Nelson ofreció un patrón para recibir revelación personal: Encuentra un lugar tranquilo, ora con humildad y honestidad, luego escucha.
El presidente Ashton alentó a los estudiantes a hacer lo mismo este semestre, diciendo:
“Prometemos que mientras cumplan sus convenios y busquen aplicar este patrón para recibir revelación en su vida, tendrán la ayuda que necesitan para cumplir lo que Dios quiere que hagan”.
Fuente: newsroom.churchofjesuschrist.org