Cuando era un joven en edad misional, sabía que tendría que salir a una misión de tiempo completo pero al igual que muchos jóvenes me pregunté: ¿Por qué debo salir a una misión?. Esta es una pregunta que puede surgir y que debemos responder.
Después de haber retornado con honor de una misión, comparto 4 poderosas razones que te permitirán fortalecer tu decisión de salir a una misión.
Salir a una misión trae esperanza al mundo
Nuestra generación espera dejar huella y marcar la diferencia en este mundo que sufre cada día con enfermedades, atentados y desastres los cuales no podemos controlar. Pero al seguir el ejemplo de nuestro Salvador podemos, mediante el servicio misional, traer esperanza a miles de personas las cuales luchan día a día para encontrar la paz que están buscando; “por cosas pequeñas y sencillas se realizan grandes cosas…” (Alma 37:6 – Libro de mormón). Salir a una misión es una de ellas.
Salir a una misión fortalece familias
Las familias que enseñarán serán fortalecidas por su ejemplo de fe. Ellos se preguntarán ¿Dejaron a su familia, trabajo y estudios para ayudarme a mí y a mi familia? La respuesta es: ¡Sí! Y “¡Cuán grande será vuestro gozo…!” (Doctrina y Convenios: 18:15)
Nuestras familias en casa también estarán bien, ya que el plan de felicidad es el mismo para todas las personas, y este inicia por medio de la fe.
Salir a una misión es un viaje de felicidad
Un viaje que te permitirá escribir recuerdos únicos que fortalecerán tu fe. Es en los momentos más difíciles en misión donde sentí mucho más el amor de mi Salvador, por mí y por las personas que me rodeaban. No cambiaría las sonrisas compartidas, ni las lágrimas derramadas por nada este mundo. Salir a una misión es un viaje de descubrimiento; de servicio, sacrificio y amor por Dios y nuestros semejantes
Salir a una misión es decirle a Dios que lo amo
Cada día que pasa me siento más agradecido por el amor y la misericordia de mi Padre Celestial. Gracias a la misión aprendí que no soy perfecto, pero soy un Hijo de Dios que puede seguir a un Dios perfecto el cual no se equivoca y espera encontrarse conmigo después de esta vida y con las personas que enseñé. Una razón más para, salir a una misión.
Existen muchas más razones por las que deberíamos salir a una misión de tiempo completo. Así que invito a compartirlas con los jóvenes en edad misional.