En 2020, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días recordó a nivel mundial el bicentenario de la Primera Visión de José Smith. Y aunque la Primera Visión tiene un gran significado, nada hubiera cambiado si las interacciones de José con los mensajeros celestiales hubieran cesado en aquel momento.
El sacerdocio tenía que ser restaurado para que la salvación de los hijos de Dios siguiera adelante. Era necesario tener la autoridad de Dios para actuar en Su nombre sobre la tierra.
En las ediciones de las revistas New Era y Liahona de junio de ese mismo año, los élderes Quentin L. Cook y Gary E. Stevenson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, compartieron lo ansiosos que estaban por recordarle a los Santos de los Últimos Días la importancia de la restauración del sacerdocio.
José Smith bautizando. Artista: Del Parson
Los mensajes que compartieron siguen siendo relevantes en la actualidad, sobre todo en el aniversario Nº 193 de la restauración del sacerdocio Aarónico. El élder Cook escribió en New Era:
“Debido a que se restauraron el Sacerdocio Aarónico y sus llaves, las personas —ustedes y yo— pueden venir a Jesucristo, hacer convenios con Él, recibir las ordenanzas de purificación y ser aptos para recibir el Espíritu Santo como un compañero constante e instrumento para ministrar con poder”.
La restauración del Sacerdocio Aarónico comenzó cuando José Smith y Oliver Cowdery se encontraban realizando la traducción del Libro de Mormón.
Encontraron en el libro pasajes que hablaban sobre el bautismo y la autoridad para realizar dicha ordenanza. Eso les llevó a preguntarse cómo podían ellos tener esa misma autoridad para realizar esas ordenanzas.
“Upon You My Fellow Servants” por Linda Curley Christensen y Michael Malm
El 15 de mayo de 1829, José y Oliver se arrodillaron en un lugar apartado del bosque para preguntarle al Señor qué debían hacer.
En respuesta a su oración, Juan el Bautista se apareció a José Smith y Oliver Cowdery. Puso sus manos sobre sus cabezas y les confirió el Sacerdocio Aarónico.
Juan el Bautista también les indicó que debían bautizarse unos a otros, lo que hicieron más tarde ese día a lo largo de las orillas del río Susquehanna.
Curiosamente, debido a la persecución que recibieron por sus creencias, José y Oliver tuvieron que mantener en secreto su bautismo en el río.
El élder Stevenson escribió en la revista Liahona:
“El río servía como vía principal para el comercio y el transporte durante las inundaciones de primavera, con un flujo constante de embarcaciones. Es posible que José y Oliver esperaran hasta después del anochecer o aprovecharan el agua más profunda y encontraran un lugar más apartado en la llanura aluvial”.
En la actualidad, el bautismo y la restauración del Sacerdocio Aarónico son todo menos un secreto. La restauración del evangelio es un proceso que todavía se lleva a cabo y los élderes Cook y Stevenson invitan a todos a ser parte de él.
Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
El élder Stevenson expresó:
“Ruego que cada uno de nosotros esté dispuesto a participar en la restauración continua del Evangelio, abrazando y practicando con entusiasmo lo que se ha revelado a los profetas modernos. Ejemplos de ello incluyen vivir la ley más alta y santa de ministrar a nuestros hermanos y hermanas”.
Por su parte, el élder Cook nos recuerda que vivimos en una época especial:
“¡Ser un hombre o mujer joven en la Iglesia restaurada del Señor durante esta época es algo realmente emocionante! Tienen un rol importante que desempeñar en una época significativa de la Iglesia y de la historia del mundo”.
Celebrar las bendiciones a las que tenemos acceso gracias al sacerdocio nos hace conscientes de lo que en verdad es posible alcanzar en el plan de Dios para todos Sus hijos e hijas.
Templo de Río de Janeiro. Imagen: Sala de Prensa – La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
“Al reflexionar sobre las bendiciones disponibles para ustedes gracias al Sacerdocio Aarónico, ruego que sientan como el Espíritu del Señor los impulsa a aprovechar al máximo dichas bendiciones, tanto para ustedes mismos como para todos los demás”, finalizó el élder Cook.
Por último, el élder Stevenson compartió:
“Testifico que los cielos permanecen abiertos y que hay mucho más por venir mientras el Señor nos prepara para los emocionantes días futuros…
Ruego que a diario expresemos nuestra gratitud por las apariciones de Juan el Bautista y de Pedro, Santiago y Juan, y por el retorno del Sacerdocio Aarónico y de Melquisedec en esta última y final dispensación, en preparación para el regreso de nuestro Señor y Salvador, sí, Jesucristo”.
Fuente: LdsLiving
