Devon Blackmon es un exjugador del equipo de fútbol americano de BYU y no es miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Sin embargo, pasó suficiente tiempo con sus compañeros de equipo que, si eran miembros, muchos de ellos misioneros retornados.
De sus compañeros, llegó a apreciar la madurez y la perspectiva que brindó el servicio misional a sus vidas y su juego en el campo de fútbol.
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En una entrevista con Ben Criddle en ESPN960, Blackmon comentó:
“Una misión es algo que probablemente todos necesitamos… Te hace darte cuenta de lo que es la vida desde una perspectiva diferente… Ahora que ya no juego al fútbol, ¿qué tengo que hacer para compensar eso?
Pienso en el carácter y creo que la misión pone lo que mencioné en perspectiva.
Si más jugadores sirvieran en una misión, seríamos grandes jugadores en el campo, seríamos aún mejores”.
Criddle también bromeó con Blackmon sobre servir en la Misión Provo Utah y el increíble misionero que sería:
“Probablemente, me encantaría el hecho de acercar a la gente a Dios, ayudarlos a hacer lo correcto y traer esa energía. No puedes obtener la misma gratificación jugando al fútbol que sirviendo a la gente. Realmente, no puedes encontrar eso en ningún otro lugar”.
Fuente: LDS Living