Por Reinaldo Mendoza
Muchas son las publicaciones en textos, diarios e Internet que muestran a los mormones como un grupo religioso racista y excluyente de aquellas personas de raza negra. Este tipo de publicidad busca confundir y generar un juicio sin fundamento en las grandes masas y alejar los corazones de muchos hijos de Dios, de las verdades eternas que posee La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días: La Iglesia Restaurada de Dios.
Para los Santos de los Últimos Días, como prefieren ser llamados los miembros de la referida Iglesia, este tipo de comentarios forma parte de la lucha que deben enfrentar en la guerra espiritual que se gesta entre el bien y el mal y que se inició en la vida premortal y continúa en la actualidad.
El profeta por la libertad
La verdad en este asunto se puede evaluar y exponer desde diferentes perspectivas. En una apelación que el profeta José Smith hizo al estado de Vermont el 29 de noviembre de 1843, en Nauvoo, Illinois y publicado bajo el título General Joseph Smith’s Appeal to the Green Mountain Boys en 1843, este líder expresó: “Deja que el rico y el erudito, el sabio y el noble, el pobre y el necesitado, el esclavo y el libre, tanto el negro como el blanco, guarde su camino y se aferre al conocimiento de Dios y ejecute juicio y justicia en la tierra con rectitud, y se prepare para presentarse ante el Juez de vivos y muertos, porque la hora de Su venida está cerca”.
Allí se observa como José Smith reconocía que, entre otros casos, los negros y los esclavos tenían el derecho de adorar a Dios y obtener el conocimiento y preparación necesaria para participar de las bendiciones de la salvación y la vida eterna. Exigía, el profeta, a las leyes terrenales que tal libertad se pudiera dar a estas personas, quienes eran almas e hijos espirituales de Dios y no merecían estar en la oscuridad espiritual.
Mormones anti esclavitud
Durante las largas travesías de los pioneros mormones de un lugar a otro, ocurrió que en una ocasión los Santos llegaron con el fin de establecerse al condado de Jackson, en el estado de Misuri, la historia cuenta que “la llegada de tantos Santos inquietó a los colonos que habían vivido mucho tiempo en el lugar y temían que los recién llegados, que en su mayoría eran del norte de Estados Unidos, les hicieran perder el control político, puesto que éstos (mormones) no apoyaban la esclavitud que se practicaba en el sur (de los Estados Unidos)”. Ante el temor de los esclavistas, éstos hicieron todo lo posible para que con ataques físicos y sicológicos los Santos de los Últimos Días abandonaran, finalmente, el condado de Jackson.
Los mormones respetaban las leyes terrenales y celestiales tal y como lo establecen las Santas Escrituras y José Smith, un profeta inspirado, no podía sino procurar dentro de sus posibilidades temporales dar pasos firmes en la lucha anti esclavitud y la igualdad para todos los hombres sin distingo de raza y color.
Una Iglesia de Revelación
Fue entonces cuando José Smith aspiró a la presidencia de Los Estados Unidos de Norteamérica siendo una de sus propuestas la libertad de los esclavos. José Smith sabía que la realidad social y las limitaciones en todos los ámbitos de la vida que tenían los negros no radicaban en su color sino en su estado de esclavitud y se refirió al respecto diciendo que los negros “vinieron al mundo como esclavos mentalmente y físicamente. Cambie su situación con la de los blancos, y ellos serían como ellos”.
Muchas personas insisten que a los miembros negros de La Iglesia de Jesucristo se les negó por muchos años la oportunidad de poseer el sacerdocio y ello es una muestra de la actitud racista de los mormones. Este tipo de conclusión solo muestra el poco conocimiento de los detractores de la Iglesia Restaurada con respecto a los asuntos divinos; en una Iglesia de Revelación se espera por los dictados de Dios y sólo en ese momento se puede actuar en función de tal o cual asunto.
Bendiciones para todos
Lo cierto es que llegó el día en que todo hombre negro, digno y miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días pudiera recibir el sacerdocio. Con ello, las bendiciones del Altísimo sobrevinieron a las familias y naciones mayoritariamente de raza negra y el Evangelio Restaurado está avanzando a paso acelerado.
En la actualidad, en África existe un total de 421 mil 892 miembros de La Iglesia de Jesucristo. De la misma manera, existen unas 27 Misiones; 1 mil 281 congregaciones; 3 templos y unos 193 Centros de Historia Familiar. Todo ellos distribuidos en países como Angola, Benín, Botsuana, Camerún, Cabo Verde, República de África Central, Costa de Marfil, República Democrática del Congo, Etiopía, Ghana, Kenia, Lesoto, Liberia, Madagascar, Malawi, Mauricio, Mozambique, Namibia, Nigeria, Reunión, Sierra Leona, Sudáfrica, Suazilandia, Tanzania, Togo, Uganda, Zambia y Zimbabue.
La familia humana
Los Santos de los Últimos Días se unen ante las voces de confusión e intrigas para manifestar al mundo entero lo que se registra en el comunicado oficial: “La raza y el sacerdocio”, publicado por La Iglesia de Jesucristo y en la que se lee: “En la teología y la práctica, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días abraza la familia humana universal. Las Escrituras y las enseñanzas afirman que Dios ama a todos Sus hijos y hace que la salvación esté al alcance de todos. Dios creó las muchas diversas razas y etnias y estima a todos ellos por igual. El Libro de Mormón dice que todos son iguales ante Dios”.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días como organización absolutamente cristiana no ha sido nunca, ni será, racista. Cualquier manifestación personal de un miembro de la Iglesia, de forma aislada o en grupo, no representa ni representará a la institución y su vocería oficial presidida por el profeta de Dios.
Miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, donde sirve como Obispo del Barrio Unión, Estaca Los Sauces, Valencia-Venezuela. Periodista (Comunicador Social, mención Desarrollo Social), egresado de la Universidad Católica Cecilio Acosta en Venezuela. Magister en Teaching Higher Education, egresado de la Caribbean International University.