Las tradiciones de Navidad alrededor del mundo son muy diversas, pero comparten rasgos significativos que con frecuencia involucran cosas como las luces, los árboles con hojas perennes y la esperanza.
La Navidad es probablemente la festividad más celebrada del mundo, y la Navidad moderna que ahora conocemos es producto de cientos de años de tradiciones seculares y religiosas de todo el mundo, muchas de ellas centradas en el solsticio de invierno.
Aquí te compartimos los orígenes de las tradiciones de Navidad de todo el mundo, como el tronco de árbol de Navidad, los villancicos y los bastones de caramelo.
1. México: “¡Feliz Navidad!”
En 1828, el ministro estadounidense, Joel R. Poinsett, llevó una planta roja y verde de México a su país.
Como los colores de la flor eran perfectos para la nueva festividad, aquellas flores, que fueron llamadas poinsettias en nombre de Poinsett, comenzaron a aparecer en los invernaderos para el año 1830.
En 1870, las tiendas de Nueva York comenzaron a venderlas en época de Navidad. Para 1900, aquellas flores se habían convertido en un símbolo universal de la festividad.
En México, se hacen piñatas que se llenan de dulces y monedas y se cuelgan del techo.
Luego, los niños se turnan para golpear la piñata hasta que se rompa, creando una lluvia de golosinas. Los niños corren para recolectar la mayor cantidad de dulces que puedan.
2. Inglaterra: “Happy Christmas!”
Las tarjetas de Navidad se remontan a Inglaterra. Un inglés llamado John Calcott Horsley ayudó a popularizar la tradición de enviar tarjetas de navidad cuando comenzó a producir tarjetas pequeñas con escenas festivas y un saludo navideño escrito previamente a fines de la década de 1830.
Las nuevas oficinas de correos en Inglaterra y los Estados Unidos hicieron que las tarjetas fueran populares casi de la noche a la mañana.
Aproximadamente al mismo tiempo, R.H. Pease, el primer fabricante de tarjetas estadounidense, realizaba tarjetas similares en Albany, Nueva York, al igual que Louis Prang, un alemán que emigró a Estados Unidos en 1850.
Por otro lado, los pueblos celtas y teutónicos consideraron durante mucho tiempo que el muérdago tenía poderes mágicos. Se decía que tenía la capacidad de sanar las heridas y aumentar la fertilidad.
Los celtas colgaban muérdago en sus casas para invitar la buena suerte y protegerse de los malos espíritus. Durante las vacaciones en la época victoriana, los ingleses colgaban ramitas de muérdago en los techos y en las puertas.
Si se encontraba a alguien de pie debajo del muérdago, alguien más en la habitación le daba un beso, comportamiento que generalmente no se demostraba en la sociedad victoriana.
3. Suecia: “God Jul!”
La mayoría de las personas en los países escandinavos honran a Santa Lucía cada 13 de diciembre. La celebración del Día de Santa Lucía tuvo origen en Suecia, pero se extendió hasta Dinamarca y Finlandia a mediados del siglo XIX.
En estos países, la festividad se considera el comienzo de la temporada de navidad y, como tal, a veces se la denomina como la “pequeña Yule”.
Lucía vivió en Siracusa durante el siglo IV, cuando la persecución de los cristianos era común. Desafortunadamente, la mayor parte de su historia se ha perdido a lo largo de los años.
Según la leyenda, Lucía perdió la vista cuando fue torturada por un Diocleciano a causa de sus creencias cristianas. Otros dicen que se pudo haber arrancado los ojos en protesta por el mal trato de los cristianos. Lucía es la santa patrona de los ciegos.
Tradicionalmente, la hija mayor de cada familia se levanta temprano, se pone un vestido largo y blanco con una banda roja y una corona hecha de ramitas con nueve velas encendidas y despierta a cada uno de los miembros de su familia. Luego, la familia desayuna en una habitación iluminada por velas.
Por ese día, aquella joven es llamada “Lussi” o “Lussibruden” (la novia Lucy).
Todo animal que se cazaba o pescaba se debía hacer durante el día de Santa Lucía a la luz de las antorchas. Las personas iluminaban sus hogares con mucha luz.
Por la noche, los hombres, mujeres y niños llevaban antorchas a un desfile. El día terminaba cuando todos arrojaban sus antorchas hacia un gran montón de paja, creando una enorme hoguera.
Hoy en día en Finlandia, una niña es elegida para ser Lucía a nivel nacional y es honrada en un desfile en el que se ve rodeada de personas que portan una antorcha.
La luz es un tema principal del Día de Santa Lucía, ya que su nombre, que se deriva de la palabra latina lux, significa luz. Esta fiesta se celebra cerca del día más corto del año, cuando la luz del sol comienza a tomar más fuerza.
4. Finlandia: “Hyvää Joulua!”
Muchos finlandeses visitan el sauna en Nochebuena. Las familias se reúnen y escuchan la transmisión de radio nacional “Paz de Navidad”. Es costumbre visitar las tumbas de los familiares que han fallecido.
5. Noruega: “Gledelig Jul!”
Noruega es el lugar de origen del Tronco del árbol de Navidad (Yule log). Los nórdicos en la antigüedad usaban el tronco de un árbol en su celebración del regreso del sol en el solsticio de invierno, es decir, en la fiesta de Yule.
El término “Yule” proviene de la palabra nórdica “hweol”, que significa rueda. Los nórdicos creían que el sol era una gran rueda de fuego que se acercaba y luego se alejaba de la tierra.
¿Alguna vez te has preguntado por qué la conocida chimenea es una parte tan central de la típica escena de Navidad? Bueno, esta tradición se remonta al Yule nórdico y ahora ya sabes porqué.
6. Alemania: “Froehliche Weihnachten!”
La tradición de decorar árboles de Navidad proviene de Alemania. La decoración de árboles de hoja perenne siempre ha sido parte de la tradición alemana en el solsticio de invierno.
Los primeros “árboles de Navidad” decorados explícitamente y con el nombre de la fiesta cristiana aparecieron en Estrasburgo (parte de Alsacia) a principios del siglo XVII.
Después de 1750, los árboles de Navidad comenzaron a aparecer en otras partes de Alemania, y más aún después de 1771, cuando Johann Wolfgang von Goethe visitó Estrasburgo e incluyó rápidamente un árbol de Navidad en su novela, “El sufrimiento del joven Werther”.
El Nacimiento del Salvador
Independientemente de la tradición de Navidad que sigas, lo más importante de todo es recordar la razón principal por la que celebramos este día: El nacimiento del niño Jesús, el Hijo de Dios.
Que esta Navidad sea un tiempo para recordar y mostrar el amor que Jesús nos pidió que tuviéramos por todas las personas. Que sea una época para recordar la misión y el amor que Jesucristo nos tuvo al realizar el sacrificio más grande del mundo.
“Porque cuando mantenemos el espíritu de la Navidad, mantenemos el Espíritu de Cristo, porque el espíritu de la Navidad es el Espíritu de Cristo. Eliminará todas las distracciones que nos rodean que menoscaban la Navidad y reemplazan su verdadero significado”.- Thomas S. Monson
Fuente: history.com