Durante la última Conferencia General, los miembros adultos solteros pudieron sentir el amor y la preocupación del Padre Celestial específicamente por ellos.
A medida que ha aumentado el número de miembros adultos solteros en la Iglesia, algunos líderes han enfatizado la necesidad de apoyar, integrar e involucrar a los miembros solteros de la Iglesia.
Presidente Ballard
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Durante la última Conferencia General, el presidente M. Russell Ballard, del Cuórum de los Doce Apóstoles, dijo que él y sus compañeros líderes deliberaron en consejo con espíritu de oración sobre “todos los que se sienten solos o sienten que no pertenecen”. Continuó:
“Anhelamos ayudar a todos los que se sienten de esa manera”.
La Iglesia está buscando las mejores formas de ayudar y apoyar a los miembros que nunca se casaron, se divorciaron o enviudaron. “La Iglesia los quiere y los necesita “, dijo.
“Sí, ¡los necesitamos! Necesitamos sus voces, talentos, habilidades, bondad y rectitud”.
El amor del Señor
Élder Cook
Para involucrar de una manera más plena a los miembros solteros, la Iglesia ha ampliado recientemente la cantidad de llamamientos y asignaciones en los que pueden participar.
“Queremos que sepan los amamos y que son importantes en la edificación del reino de Dios.
Por esta razón, sentimos que debíamos revisar cuidadosamente normas y percepciones erróneas que pudieran limitar el servicio de la Iglesia de los miembros solteros.
Lo que descubrimos fue que la norma de la Iglesia permite un amplio servicio por parte de los adultos solteros, pero que podría ser incluso más amplia (…)
Esperamos que sus líderes sepan qué llamamientos extenderles, incluso como consejeros en obispados, sumos consejos y como presidentes y consejeros de organizaciones”, dijo el élder Quentin L. Cook cuando se anunció este cambio.
Para apoyar esta acción, la Iglesia ha elaborado una infografía para ayudar a los líderes a escuchar y comprender las experiencias de los miembros solteros.
Somos hijos e hijas de dios
En su discurso, el presidente Ballard enfatizó la importancia de dejar de lado las etiquetas y recordar que todos, independientemente de nuestro estado civil, somos hijos e hijas de Dios y tenemos la capacidad de servir en Su Iglesia. Él dice:
“El evangelio de Jesucristo tiene el poder de unirnos. En el fondo tenemos muchas más similitudes que diferencias.
Como miembros de la familia de Dios, somos verdaderamente hermanos y hermanas”.
Élder Gong
No podemos dejar de mencionar el énfasis que el élder Gerrit W. Gong también puso sobre el tema en su discurso “Lugar en el mesón”:
“Nuestra posición ante el Señor y en Su Iglesia no es una cuestión de nuestro estado civil, sino de llegar a ser discípulos fieles y valientes de Jesucristo.
Los adultos quieren ser vistos como adultos, y ser responsables y contribuir como adultos”.
Fuente: Newsroom
