¿Estás dudando de tu servicio como misionero? Pues, no lo hagas más, esta es la única oportunidad que tienes en tu juventud para servir a Dios de tiempo completo.
La misión es una gran oportunidad para moldear tu carácter, hacerte más independiente, ampliar tu perspectiva, poner tu granito de arena para hacer de este mundo un lugar mejor y sobre todo acercarte a Dios.
En la misión aprenderás a ver la vida con mayor esperanza y podrás ayudar a tus semejantes a acercarse a Cristo.
El élder Jeffrey R. Holland nos habló sobre la obra misional innumerables veces y nos insta a no dejar pasar esta gran bendición.
La misión es difícil, pero será una experiencia que bendecirá tu vida para siempre
Misioneros Santos de los Últimos Días ayudando al refugio de animales domésticos.
Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
El élder Holland expresó sobre servir en una misión:
“Solo tienes una oportunidad para servir en una misión. Es tu responsabilidad [y] deber aprovechar [la misión] al máximo [y] dar hasta el último gramo de energía…
Todas [tus] dificultades, todas [tus] lágrimas, todo [tu] trabajo arduo se recordarán como lo mejor que hiciste, no porque lo disfrutaste, no porque bautizaste a todos, sino porque diste todo lo que tenías, incluso cuando no creíste que podías y especialmente cuando no querías.
Vive tu misión al máximo, trabaja con más ahínco que nunca. Hazle saber a los demás que esto es lo más importante para ti...
Termina tu misión orgulloso de lo que hiciste y esa experiencia te bendecirá por el resto de tu vida”. – “Solo tienes una oportunidad para servir en una misión”, discurso en el CCM, Jeffrey R. Holland.
Cuando sirves en una misión, participas en la salvación de almas
Imagen: La Iglesia de Jesucristo
En otro discurso llamado “El milagro de una misión”, el élder Holland mencionó:
“[La obra misional] es, por definición, lo más importante que puedes hacer en el mundo, en el tiempo o en la eternidad. Por esa razón, estás comprometido con la salvación del alma humana. Esa es la obra más elevada y sagrada del universo.
Esto es lo que el mismo Dios dijo que era Su obra y gloria. Este es el propósito por el cual el Salvador vino a la Tierra, dio Su vida y resucitó para proporcionar esas posibilidades y promesas de vida eterna.
Este es el propósito por el cual cada profeta ha vivido y cada apóstol ha hablado. Este es el propósito por el cual cada misionero desde Adán y Eva ha salido a declarar la verdad.
¡Tú formas parte de eso! Te unes a esa hermandad, como lo dije antes, por definición, por teología. Esto es lo más importante que puedes hacer”.
La misión no es fácil, requiere un esfuerzo desde lo más profundo de tu alma
Misioneros Santos de los Últimos Días. Foto: La Iglesia de Jesucristo
En su poderoso discurso, “La obra misional y la expiación”, el élder Holland también declaró:
“Estoy convencido de que la obra misional no es fácil porque la salvación no es una experiencia barata. La salvación nunca fue fácil. Nosotros somos la Iglesia de Jesucristo, esta es la verdad, y Él es nuestro Gran y Eterno Caudillo.
¿Cómo podemos creer que podría ser fácil para nosotros cuando nunca fue fácil para Él?
Opino que tanto los misioneros como los líderes de la misión deben pasar, aunque sea unos momentos, en Getsemaní. Tanto los misioneros como los líderes de la misión deben dar aunque sea uno o dos pasos hacia la cima del Calvario.
…[Es] mi opinión que los misioneros y los investigadores, para llegar a la verdad, para llegar a la salvación, para conocer aunque sea de manera mínima este precio que se pagó, tengan que pagar una pequeña parte de ese mismo precio.
Por eso no creo que la obra misional alguna vez haya sido fácil, ni que lo sea la conversión, la retención, ni la fidelidad continua.
Se requiere esfuerzo, desde lo más profundo de nuestra alma”.
La misión no es fácil, requiere mucho esfuerzo, pero cada uno de ellos valdrá la pena no solo en esta vida, sino también en la eternidad. ¡No te rindas!
*Portada: Fotografía tomada por Ravell Call, Deseret News.
Esta es una traducción del artículo que fue publicado originalmente en Called to Share con el título “You Only Get One Chance to Serve a Mission Says Elder Holland“.
