Con su reciente llamamiento al Cuórum de los Doce Apóstoles, el élder Gérald Caussé ha despertado curiosidad y admiración entre muchos miembros de la Iglesia.
¿Quién es este nuevo apóstol y qué lo caracteriza? Tal vez la mejor manera de conocerlo sea a través de sus propias palabras.
A lo largo de sus discursos de conferencia general, el élder Caussé ha compartido enseñanzas llenas de sencillez, claridad y amor por el Salvador.
Su forma de enseñar refleja un corazón sensible y una fe profunda en Cristo. Escucharlo es como ver cómo una imagen del discipulado se va revelando, principio tras principio.
Sus mensajes nos muestran a un líder que valora la unidad, la humildad y la belleza del evangelio. Habla de la universalidad del amor de Dios, de la alegría que hay en seguir aprendiendo, del poder del sacrificio de Cristo y del deber sagrado de cuidar la creación de nuestro Padre Celestial.
A continuación, recordamos ocho frases de sus enseñanzas que nos ayudan a conocer mejor su forma de ver el mundo y su relación con el Señor.
1. La verdad es para todos
El evangelio no es exclusivo. Es un mensaje de amor, que el élder Caussé nos da, uno que puede comprenderse con el corazón, sin importar nuestro nivel de conocimiento o experiencia.
“Dios sería injusto si el evangelio solo estuviera al alcance de una élite intelectual. En Su bondad, ha hecho que las verdades acerca de Él sean comprensibles para todos Sus hijos.”
2. Todos somos parte de la familia de Dios
El evangelio une, no separa. Nos recuerda que el Reino de Dios es una familia donde todos tienen un lugar, sin importar de dónde venimos. Por ello, él nos señaló:
“En esta Iglesia no hay extraños ni marginados. Solo hay hermanos y hermanas. El conocimiento de un Padre Eterno nos ayuda a ser más sensibles a la hermandad que debe existir entre todos los hombres y mujeres.”
3. La alegría está en aprender siempre
El élder Caussé ha enseñado que el aprendizaje no termina con la escuela ni con la edad. Cada día podemos acercarnos más a Cristo si cultivamos el deseo de aprender, servir y crecer.
«El Evangelio es una fuente de conocimiento que nunca se agota. Siempre se puede aprender y sentir algo nuevo cada domingo, en cada reunión y en cada versículo de las Escrituras».
4. El evangelio se vive en comunidad
Sus mensajes nos invitan a ver la Iglesia no como una institución, sino como una comunidad de santos imperfectos que caminan juntos hacia Cristo. Allí encontramos apoyo, comprensión y la oportunidad de fortalecer la fe unos con otros. Él enseñó:
«La Iglesia es más que un edificio o un lugar en particular; es tan real y viviente en la más humilde morada de los lugares más remotos del mundo».
5. Cuidar la creación es una forma de gratitud
Entre sus palabras más recordadas, el élder Caussé ha hablado sobre la responsabilidad que tenemos de cuidar la tierra. Respetar la creación es honrar al Creador, y vivir con gratitud por todo lo que Él nos ha dado.
“[A]unque es infinita y universal en su alcance, es un don notablemente personal e íntimo, adaptado para cada uno de nosotros individualmente. Así como Jesús invitó a cada uno de los discípulos nefitas a palpar Sus heridas, Él murió por cada uno de nosotros, personalmente, como si ustedes o yo fuésemos la única persona en la tierra.”
6. El gozo está en servir
Servir con amor es reflejar el carácter de Cristo. Esa ha sido una constante en sus enseñanzas: que la verdadera felicidad no está en recibir, sino en dar. En un discurso él dijo:
“Más allá de ser simplemente una necesidad científica o política, el cuidado de la tierra y de nuestro entorno natural es una responsabilidad sagrada que Dios nos ha confiado. ¿Cómo podemos honrar y amar al Padre Celestial y a Jesucristo sin honrar y amar Sus creaciones?”.
7. Preparen la vía
A veces olvidamos que el plan de Dios no está lleno de complicaciones. El evangelio de Jesucristo es claro, directo y lleno de amor. Todo en la Iglesia, desde las ordenanzas hasta los llamamientos, tiene un propósito sencillo: ayudarnos a acercarnos más al Salvador. Es así como el élder Caussé comenta:
«Aun cuando se les ha conferido misiones y autoridad diferentes, el Sacerdocio Aarónico y el Sacerdocio de Melquisedec son compañeros inseparables en la obra de salvación».
8. El evangelio es sencillo
A veces pensamos que el discipulado requiere entenderlo todo, pero el élder Caussé nos recuerda que el evangelio es simple, y su poder está en vivirlo con un corazón humilde. En este sentido, él nos enseña:
«Aunque muchas circunstancias de la vida puedan estar más allá de nuestro control, ninguno de nosotros está más allá del alcance de las infinitas bendiciones del Señor».
En cada discurso, su mensaje regresa al mismo punto, que Jesucristo lo llena todo. Su ejemplo, Su gracia y Su expiación son el camino hacia la verdadera paz.
Mientras el élder Caussé inicia esta nueva etapa de servicio, su testimonio permanece firme. Las palabras del élder Gérald Caussé nos inspiran a vivir con fe y esperanza, recordándonos que el evangelio no es complicado, es profundamente humano y divino a la vez.
Que cada una de sus enseñanzas nos motive a ser discípulos más sinceros y a reconocer, en lo cotidiano, la mano amorosa de Dios.
Fuente: LDS Daily
