Servir en una misión puede ser un hito para la vida de muchos jóvenes Santos de los Últimos Días, por lo que es importante abordar esta conversación con ánimo y comprensión, incluso cuando alguien decide no servir.
Esta semana, el hermano David T. Lisonbee, miembro del comité asesor general de los Hombres Jóvenes, escribió un artículo sobre las formas en que los padres pueden hablar con sus hijos acerca de servir en una misión.
“A algunos jóvenes les da temor que menos personas deseen escuchar acerca de Jesucristo y Su evangelio restaurado en el mundo de hoy. Eso no cambia el hecho de que siempre hubo más personas que necesitaran escuchar sobre Jesucristo y las bendiciones de Su expiación”, escribió el hermano Lisonbee.
El hermano Lisonbee compartió cinco ideas.
1. Ayúdalo a comprender su identidad divina
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El hermano Lisonbee animó a los padres a leer Abraham 3:22–23 y Doctrina y Convenios 138:55–56 con sus hijos. Además, citó una declaración del presidente Nelson:
“Nuestro Padre Celestial ha reservado a muchos de Sus espíritus más nobles —quizás podría decir Su mejor equipo— para esta fase final. Esos nobles espíritus —esos excelentes jugadores, esos héroes— ¡son ustedes!”
2. Comparte la invitación a servir del profeta
El presidente Nelson enseñó:
“Mis queridos jóvenes hermanos y hermanas, ciertamente estos son los últimos días, y el Señor está acelerando Su obra para recoger a Israel.
Ese recogimiento es lo más importante que se está llevando a cabo hoy en la tierra.
Nada se le compara en magnitud, nada se le compara en importancia, nada se le compara en majestad.
Y si eligen hacerlo, si lo desean, pueden formar gran parte de él. Pueden formar parte de algo grandioso, algo espectacular, ¡algo majestuoso!”
3. Habla honestamente sobre la misión y haz preguntas
“Haz preguntas con espíritu de oración que se centren en las necesidades, intereses y deseos justos de tu hijo. Luego, escucha y reflexiona sobre las respuestas de tu hijo”, escribió el hermano Lisonbee.
4. Anima a tu hijo a recibir y estudiar su bendición patriarcal y a reflexionar sobre su significado y poder
Los padres pueden “asegurar [a sus hijos] que las bendiciones patriarcales contienen revelación personal de su Padre Celestial, que conoce sus fortalezas, debilidades y potencial eterno”.
5. Ofrécete a ayunar y orar con tu hijo
“Alienta a tu hijo a buscar en espíritu de oración el valor y la fortaleza para hacer lo que el Padre Celestial y el Salvador quisieran que hiciera con respecto a servir en una misión de tiempo completo”, escribió el hermano Lisonbee.
Pero, ¿qué sucede si mi hijo decide no servir en una misión?
Algunos hombres y mujeres jóvenes optarán por no servir en una misión inmediatamente después de ser elegibles. Incluso, otros jóvenes pueden optar por no servir en una misión en absoluto.
“Por supuesto, es vital recordar que tu hijo tiene albedrío. Él debe sentir tu amor y apoyo independientemente de su decisión.
Asimismo, hay oportunidades para servir a diferentes edades.
Si tu hijo no se siente listo para ir a la misión a los 18 años, no significa que no pueda prepararse y tomar la decisión de servir en los próximos años”, escribe el hermano Lisonbee.
Existen muchas razones por las que un joven adulto puede optar por no servir en una misión. Por ejemplo, pueden no estar seguros de su testimonio, no sentirse preparados, no sentir la necesidad de servir en una misión, sentirse presionados socialmente a servir.
No siempre se trata de problemas con la dignidad.
Hacer suposiciones sobre por qué un joven decide no servir en una misión, puede llevarlo a inactivarse de la Iglesia, tal como Andrew.
Andrew decidió no servir en una misión durante su juventud. Los miembros de su barrio hicieron suposiciones sobre su dignidad. Andrew sintió tanto dolor debido a esos rumores que se alejó de la Iglesia durante 10 años.
Ahora que es un miembro activo de la Iglesia, Andrew comparte lo que le enseñó su experiencia sobre lo que los padres pueden hacer para apoyar a los hombres y las mujeres jóvenes que deciden no servir en una misión.
“No asuman nada. Pregúntenles cómo se sienten acerca de servir en una misión y proporciónenles un espacio seguro para que expresen sus preocupaciones sin decepcionar a nadie”.
Asimismo, Andrew les recuerda a los padres que “muchas personas excelentes no sirven en una misión y aun así son miembros fuertes de la Iglesia”.
Según Patrick Mason, erudito Santo de los Últimos Días y autor de “Planted: Belief and Belonging in an Age of Doubt”, cuando un joven decide no servir en una misión, una de las cosas más importantes es proporcionar un entorno apropiado para que crezca su testimonio.
“Tal vez decidan servir en una misión unos años más tarde. O, quizás, decidan no servir. Sin embargo, deseamos que sean miembros activos de la Iglesia a largo plazo y que no se sientan apartados porque no tuvieron dicha experiencia”, dijo.
Fuente: LDS Living