Los investigadores de la Universidad de Emory aprendieron que los adolescentes que participan en la historia familiar “tienen niveles más altos de bienestar emocional”, ya que las historias familiares ayudan a proporcionar un sentido de identidad y quiénes son en el mundo.
Los líderes de la Iglesia han prometido bendiciones similares a los Santos de los Últimos Días cuando buscan a sus antepasados, compilan historias familiares y realizan ordenanzas en los templos.
La historia familiar promete curar tus heridas
“La historia familiar y la obra del templo no son solo para los muertos, sino que también bendicen a los vivos”, dijo el élder Dale G. Renlund, del Quórum de los Doce Apóstoles, durante la conferencia general de abril de 2018 . Al participar en la historia familiar, “también reclamamos las bendiciones ‘curativas’ prometidas por los profetas y apóstoles”.
Entre esas bendiciones se encuentra una mayor comprensión del Salvador y Su expiación; mayor alegría y capacidad de sentir el amor del Señor; mayor amor por los antepasados y parientes vivos “para que ya no nos sintamos solos”, y “mayor capacidad para reparar corazones con problemas, rotos o ansiosos y para curar a los heridos”, dijo el élder Renlund.
La historia familiar como antídoto para la ansiedad y depresión
Muchos Santos de los Últimos Días que enfrentan desafíos de salud mental han encontrado estas bendiciones y más a medida que descubren, se reúnen y se conectan a sus familias.
Matt Millican es un consejero profesional con licencia y miembro de la Iglesia de Jesucristo que vive en Ontario, Oregon, él explica que participar en la historia familiar puede ser una herramienta útil para aquellos que luchan con la depresión y la ansiedad, ya que puede proporcionar una manera para que las personas se sientan productivas y se concentren en algo fuera de su depresión y ansiedad.
Al hacer historia familiar, “podemos salir de nuestras cabezas y mirarnos a nosotros mismos en el contexto de algo mucho más grande”, asegura Millican.
Este profesional explica que también hay un aspecto de “salir y hacer” en la historia familiar que puede ser beneficioso para aquellos que enfrentan desafíos de salud mental”
“Hay mucho más que simplemente investigar en línea, por ejemplo, las personas pueden visitar lugares donde tuvieron lugar importantes eventos familiares o tomar fotos de las lápidas de las tumbas de los miembros de la familia.
Actividades como estas brindan la oportunidad de probar algo diferente, o ir a un lugar nuevo que puede tener sentido en nuestras vidas, y sin embargo, no hay realmente ninguna presión para lograr algo específicamente, aparte de ir a la experiencia”.
La historia familiar elimina la soledad
Amy Harris, profesora asociada de la Universidad Brigham Young y directora del programa para la especialización de historia familiar, dijo que muchos estudiantes han comentado sobre cómo la historia familiar les ha ayudado a comprender los desafíos de salud mental en ellos mismos o en sus familias.
“No es una píldora mágica que tomas y de repente no tienes ningún problema, pero simplemente ayuda a darles contexto y les ayuda a no sentirse solos”.
Sin importar las incertidumbres sobre las causas de la ansiedad, el evangelio proporciona esperanza y seguridad, así como también una perspectiva para comprender el propósito de la vida y el papel de la oposición.
Fuente: The Church News
