En la película “La llegada”, el personaje principal literalmente aprende a ¡ver el futuro! porque aprende el idioma de los extraterrestres. Esta película elogia el determinismo. Si no sabes qué es el determinismo, revista este artículo de Wikipedia, “determinismo lingüístico”.
En resumen: hay algunas cosas que la mente no puede comprender si no existe una palabra para ello en el idioma. ¿Podría ser que el idioma dicte lo que podemos pensar? Ciertamente, algunos idiomas pueden enseñarnos nuevos conceptos y cambiar la forma en la que interactuamos con el entorno… Pero, ¿hasta qué punto?
Como miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, creemos que tuvimos una vida como hijos espirituales de nuestro Padre Celestial antes de esta vida. Entonces, ¡esta idea tiene implicaciones muy interesantes! Si el idioma limita nuestros pensamientos, ¿qué significa eso para el tiempo que pasamos como espíritus? ¿Acaso el idioma limita la cantidad de verdad y luz a la que podemos acceder?
¿NO? ¿SÍ? ¿TAL VEZ?
El idioma es un facilitador, no un inhibidor
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El siguiente es un ejemplo de cómo el idioma puede influir, pero no determinar el pensamiento. Una vez escuché que en las lenguas inuit existen más de 5 palabras para la nieve. Estas palabras describen la cualidad de la nieve. El determinismo lingüístico argumenta que alguien no puede imaginar los tipos de nieve si su idioma no tiene una palabra para eso.
Sin embargo, conocer los diferentes tipos de nieve se relaciona más con el papel que juega la nieve en la cultura. Si de repente los Caminantes Blancos se apoderan del mundo y provocan un invierno interminable, estaría dispuesto a suponer que las personas descubrirían los diferentes tipos de nieve muy rápido.
Las personas pueden pensar e incluso decir que su idioma no tiene una palabra específica para la nieve. Es posible que en algunos casos se requiera una larga explicación.
Ciertamente, el idioma no limita el pensamiento. Permite el intercambio indirecto de experiencias. El idioma también permite que las comunidades colaboren como unidad y tengan una historia compartida. Incluso puede modificar la interpretación de los eventos, al colorear los hechos con la cultura. Sin embargo, no evita que las personas perciban el mundo que las rodea.
De todos modos, el determinismo lingüístico no es verdad. Por otro lado, definitivamente, existe la influencia lingüística.
El idioma y la sociedad
El idioma es la lente a través de la cual vemos nuestro mundo y la sociedad tiene mucho que ver con eso. Cada generación va recogiendo nuevas palabras y descartando las que ya no considera importantes. Por eso, existen muchos cambios con los términos.
Los términos cambian de significado, caen en desuso o aumentan su popularidad. A veces, las palabras olvidadas vuelven al uso popular.
Un ejemplo: “propaganda” es una palabra que ha cambiado drásticamente durante los últimos cientos de años. Solo significa publicidad, ¿verdad? Bueno, la Segunda Guerra Mundial cambió eso. Significaba específicamente “publicidad con una agenda”. Por lo tanto, probablemente escuches a alguna iglesia o empresa referirse a su “propaganda” sin causar sorpresa.
El idioma y el Señor
Un ejemplo reciente de cambio de palabras sucedió en la Iglesia para que los Santos dejaran de referirse a sí mismos como “mormones” o “SUD” porque estos nombres no incluyen la palabra más importante del Evangelio. Cristo es el centro de la Iglesia. Por tanto, se les ha pedido a los Santos referirse a sí mismos como miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Si bien esto es un bocado, basado en lo que sabemos sobre el lenguaje, mantener el nombre de Cristo en nuestras bocas también lo mantiene en nuestras mentes.
Por otro lado, la sociedad puede hacer que las cosas que son peligrosas o no buenas ante los ojos del Señor suenen mejor de lo que realmente son.
La sociedad usa palabras sutiles para enmascarar la severidad de las acciones perjudiciales.
Mediante el uso de un vocabulario específico de registro, la sociedad puede agregar un sentido culto. Decir “vandalismo” o “destrucción de la propiedad” suena mucho más común y abierto a juicio que “travesura”.
Ante los ojos de la ley, los delitos no dependen de cómo se les denomina. Asimismo, ante la vista de Dios, los pecados son pecados, sin importar la palabra que se use. Cuando se suavizan las palabras para los pecados, el transgresor puede no sentir el impacto total de sus acciones. Esto protege a uno mismo y a la mente. Sin embargo, en realidad, no cambia la acción en sí.
El discurso del Espíritu
El libro “Speaking with the tongue of Angels” (Hablar con lengua de ángeles) de Lisa Teixeira habla sobre aprender el lenguaje del Espíritu.
Un lenguaje como este es uno que va más allá de la palabra hablada. De hecho, ¡incluso reemplaza el lenguaje corporal! Si estudiaste lenguaje, es posible que sepas que gran parte del lenguaje se comunica sin palabras. Mediante nuestros gestos y acciones, transmitimos significados sin siquiera pensar. ¿Cómo sería si no solo habláramos con nuestras palabras, nuestros cuerpos y nuestros espíritus?
En las Escrituras el Espíritu Santo habla al corazón de los hombres en su propio idioma. Hay un discurso de conferencia que se llama “El lenguaje del Espíritu” del Élder Joseph B. Wirthlin. ¡Qué glorioso es que el Espíritu hable directamente a nuestros corazones! El espíritu de Dios habla de las cosas como son en realidad.
Aunque la vida pueda ser confusa, el Espíritu nos conoce y nos comprende. Él es parte de la Trinidad, nos conoció antes de esta vida y nos conoce a todos íntimamente como hijos espirituales de nuestro Padre Celestial.
Sin duda alguna, una vez que las personas se familiaricen con este lenguaje, el Espíritu les proporciona a los Santos la verdad cuando las palabras les fallan.
¿Tienes algún ejemplo de alguna frase del idioma que cambió tu forma de ver el mundo? ¡Publícalo en los comentarios de abajo!
Esta es una traducción del artículo que fue escrito originalmente por Rachael Bundy y fue publicado en thirdhour.org con el título “Does Language Limit Revelation and Understanding?”