Después de casi 50 años, Roe contra Wade, el fallo de la Corte Suprema que legalizó el aborto en todo el país, ya no existe.
Hoy, 24 de junio, la Corte Suprema anuló Roe, fallo establecido en 1973, y una decisión de 1992 de Planned Parenthood contra Casey, que reafirmó el derecho constitucional al aborto.
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El fallo se produjo en el caso de Dobbs contra Jackson Women’s Health Organization, que impugnó una ley de Misisipi que impuso restricciones estrictas al aborto.
“El aborto presenta un asunto moral muy importante. La Constitución no prohíbe a los ciudadanos de cada estado regular o prohibir el aborto. Roe y Casey adoptaron esa autoridad. Ahora anulamos esas decisiones y devolvemos esa autoridad al pueblo y a sus representantes electos”, dictaminó la Corte Suprema.
Posición de los líderes religiosos sobre la anulación del derecho constitucional al aborto
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La decisión de Dobbs se anticipó desde mayo, cuando se filtró un primer borrador del fallo.
La decisión de anular el derecho constitucional al aborto fue recibida con regocijo y consternación por parte de los líderes religiosos, que han sido voces fuertes en ambos lados del debate sobre el aborto desde antes de Roe.
El arzobispo William Lori de Baltimore, jefe del Comité de Actividades Provida de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. (USCCB), dijo que los católicos y otras comunidades religiosas trabajaron y oraron por la reversión de Roe durante años.
Lori dijo que la iglesia necesita enfocar sus esfuerzos en una “hermosa visión de la vida humana” y redoblar sus esfuerzos para ayudar a las madres embarazadas que enfrentan circunstancias difíciles.
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“No nos hemos opuesto simplemente al aborto. Hemos estado trabajando por la causa de la vida al proporcionar servicios: servicios médicos, centros de embarazo provida, servicios educativos, servicios de caridad, servicios de adopción”, dijo en una entrevista.
Lori agregó:
“Lo que la iglesia ha aportado a esto es una hermosa visión de la vida humana. Una hermosa comprensión de que cada vida es preciosa desde la concepción hasta la muerte natural. Creemos que la decisión de hoy de la Corte Suprema nos ayudará a comunicar y vivir esa visión de manera más efectiva”.
La USCCB también pidió más apoyo para las mujeres embarazadas y sus hijos a raíz de Roe contra Wade.
“Es un tiempo de sanar heridas y reparar divisiones sociales; es un tiempo de reflexión y diálogo civil. Es momento de unirnos para construir una sociedad y una economía que sostenga matrimonios y familias, donde cada mujer tenga el apoyo y los recursos que necesita para traer a su hijo a este mundo en amor”.
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La Academia Vaticana para la Vida también emitió un comunicado en el que pide a EE. UU. que construya una sociedad que apoye a las familias y “asegure una educación sexual adecuada, garantice una atención médica accesible para todos y prepare medidas legislativas para proteger la familia y la maternidad, superando las desigualdades existentes”.
Jamie Manson, presidente de Catholics for Choice, reaccionó a la decisión con un “horror desgarrador”.
“Este fallo otorga a los líderes de derecha una licencia sin restricciones para codificar las creencias religiosas marginales en la ley civil. Es un ataque frontal y totalmente incompatible con los principios básicos estadounidenses de libertad religiosa y la separación de la iglesia y el estado”.
Decisiones divididas sobre el aborto
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Como muchos estadounidenses, los líderes religiosos siguen divididos sobre el tema del aborto.
Mientras que más de la mitad de los estadounidenses (61%) dice que el aborto debería ser legal en la mayoría o en todos los casos. El 74% de los evangélicos blancos dice que el aborto debería ser ilegal en la mayoría o en todos los casos.
Pocos estadounidenses creen que debería prohibirse por completo, según Pew Research.
“Hoy es un día de angustia, indignación e injusticia. Todos tenemos dignidad otorgada por Dios y fuimos creados para vivir en una relación respetuosa con los demás.
El acceso a la atención del aborto honra estos valores. Criminalizar a las personas que acceden o brindan servicios de aborto no”, dijo Jeanné Lewis, directora ejecutiva de Faith in Public Life, en un comunicado.
La Asociación Nacional de Evangélicos, que presentó un escrito en el caso Dobbs, recibió con agrado la noticia de que Roe fue revocada.
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“Dios es el autor de la vida y cada vida humana desde la concepción hasta la muerte tiene un valor inestimable.
Bajo Roe contra Wade, nuestra capacidad para considerar políticas que salvaguarden la vida en la etapa más vulnerable se vio severamente limitada.
Si bien la decisión de Dobbs no resuelve todas las preguntas sobre la política de aborto, elimina un impedimento para considerar las preocupaciones provida”, dijo Walter Kim, presidente de NAE.
El pastor de Texas Bart Barber, recién elegido presidente de la Convención Bautista del Sur, dijo que los bautistas del sur se regocijaron con el fallo de hoy y apoyan las leyes que prohibirían el aborto, “excepto en los casos en que la vida de la madre esté en peligro”.
Barber también dijo que “las futuras madres que enfrentan circunstancias difíciles merecen el amor y el apoyo de la iglesia, la comunidad y la sociedad”.
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El Consejo Judío para Asuntos Públicos con sede en Nueva York condenó el fallo de Dobbs y dijo que no representa “la voluntad del pueblo, ni es lo mejor para el país”. El grupo también dijo que prohibir el aborto es contrario a la ley y los valores judíos.
“Si bien tratamos a un feto con gran importancia, no merece el estatus de persona hasta el momento del nacimiento y luego tiene el mismo estatus que la persona que da a luz.
Si el feto pone en peligro la vida de una persona físicamente o, según al menos algunas autoridades religiosas judías, por angustia mental, la ley judía apoya el aborto del feto hasta el momento del nacimiento”, dijo la JCPA en un comunicado.
La Conferencia Católica del Estado de Nueva York dijo en respuesta a la decisión de revocar Roe: “Damos gracias a Dios”.
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Continuó el comunicado:
“Con toda la comunidad provida, estamos encantados con este resultado de la Corte.
Sin embargo, reconocemos la amplia gama de emociones asociadas con esta decisión.
Hacemos un llamado a todos los católicos y a todos los que apoyan el derecho a la vida de los niños no nacidos a ser caritativos, incluso mientras celebramos un momento histórico importante y una respuesta a una oración”.
La Asociación Humanista Estadounidense dijo que la decisión socavará los derechos de las minorías religiosas, incluidos los no teístas.
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Al grupo también le preocupa que la decisión de hoy se utilice en el futuro para socavar otras decisiones de la Corte Suprema.
El razonamiento utilizado proporcionará además un camino para revocar decisiones en casos importantes de derechos civiles como Obergefell contra Hodges, que prohíbe las leyes que condenan el matrimonio entre personas del mismo sexo. Asimismo, Loving contra Virginia, que prohíbe el matrimonio interracial, entre otros, dijo el grupo en un comunicado.
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La Sociedad Thomas More, un grupo legal sin fines de lucro que se opone al aborto, presentó varios escritos en el caso Dobbs y apoya la decisión de hoy.
“La victoria provida de hoy es solo un paso más en nuestra cruzada por la causa sagrada a la que servimos”, dijo Tom Brejcha, presidente y asesor principal del grupo.
La Rev. Dra. Susan Frederick-Gray, presidenta de la Asociación Unitaria Universalista, también considera que la decisión de Dobbs socava la libertad religiosa y viola el “compromiso moral” de su comunidad con el bienestar de las familias.
“Esta decisión contraria al derecho a decidir de la Corte Suprema infringe nuestras creencias religiosas profundamente arraigadas.
El acceso al aborto y el derecho a elegir es una cuestión de igualdad de género, autonomía corporal y libertad religiosa, todas las cuales son enseñanzas religiosas unitarias universalistas de larga data”, dijo en un comunicado.
La posición de la Iglesia con respecto al aborto
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Después de que el Tribunal Supremo de los Estados Unidos anulara el derecho al aborto, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, ha actualizado su posición con respecto al aborto:
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días cree en la santidad de la vida humana. Por lo tanto, la Iglesia se opone al aborto electivo por conveniencia personal o social, y aconseja a sus miembros que no se sometan, realicen, alienten, paguen u organicen tales abortos.
La Iglesia permite posibles excepciones para sus miembros cuando:
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- El embarazo es el resultado de una violación o incesto, o
- Un médico competente determina que la vida o la salud de la madre están en grave peligro, o
- Un médico competente determina que el feto tiene defectos graves que no permitirán que el bebé sobreviva más allá del nacimiento.
La Iglesia enseña a sus miembros que ni siquiera estas raras excepciones justifican el aborto automáticamente. El aborto es un asunto muy serio y debe considerarse solo después de que las personas involucradas hayan consultado con los líderes de su iglesia local y sientan a través de la oración personal que su decisión es correcta.
La posición de la Iglesia sobre este asunto no ha cambiado. A medida que los estados se esfuerzan por promulgar leyes relacionadas con el aborto, los miembros de la Iglesia pueden elegir adecuadamente por participar en los esfuerzos para proteger la vida y preservar la libertad religiosa.
Fuente: Religion News
