Cuando era muy joven me encantaba ver películas de cuentos de hadas.
Cada cuento de hadas tiene su propio final feliz. Yo también soñaba con encontrar a la persona adecuada y tener mi propio “felices por siempre”.
Me dije a mí misma que tendría mucho cuidado al elegir a la persona con la que me casara. Tenía mucho miedo de equivocarme al elegir a alguien en quien confiar y que luego mi matrimonio fracasara.
Mi madre siempre me dijo que elegir a la persona adecuada para casarse es la decisión más importante que una persona puede tomar en su vida.
También te puede interesar: 5 Consejos para Adultos Solteros: Cómo encontrar un amor que dure
La mayoría de personas cree en un alma gemela. Cree que hay alguien que está destinado solo para ti.
Yo también pensé que era cierto. No obstante, a medida que crecía, comprendí que era yo quien decidiría. Soy yo quien hará que ese hombre sea el adecuado y perfecto para mí.
Raúl y yo éramos muy buenos amigos antes de que nos enamoráramos y nos casáramos. He llegado a conocer algunas de sus fortalezas y debilidades. Llegué a saber qué le gusta y qué no.
Ambos sabíamos que no éramos personas perfectas antes de casarnos.
Casarme con él ha sido lo más hermoso que me ha pasado y una de las decisiones más correctas que he tomado en mi vida. Sin embargo, como dicen las personas mayores, el matrimonio no es color de rosa.
A lo largo de su viaje como esposo y esposa, surgirán pruebas y desafíos. Se pondrá a prueba su amor y lealtad mutuos y se medirá su compromiso. Habrá ocasiones en las que te preguntarás si te casaste con la persona correcta.
Estoy agradecida por el Evangelio restaurado. Nos guía en nuestra vida diaria, nos da la esperanza de que las familias son eternas.
Me recuerda quién soy y me ayuda a comprender mi papel en el gran plan del Señor.
Cada vez que siento que estoy superando mi límite, mi Padre Celestial me ayuda a recordar que tengo un esposo que siempre me ayudará con mis debilidades e imperfecciones.
Recuerdo haberle preguntado al Señor muchas veces si mi esposo era el indicado para mí, y sé que el Padre Celestial me ha ayudado a saber que él era el hombre adecuado para casarme.
Mi esposo me contó una vez su gran secreto para mantenerse fuerte. Él dijo:
“¿Sabes qué? Desde que nos casamos cada vez que tengo dificultades o problemas en el trabajo, siempre recuerdo el sentimiento que tuve dentro del templo el día de nuestra boda.
Ese sentimiento me consuela de que el Señor nos haya dado Su bendición en nuestro matrimonio. Sé que Él nos está guiando”.
Después de escuchar lo que dijo mi esposo, estoy segura de que es verdad.
Puede haber momentos en los que nuestras pruebas nos debiliten, muestren las diferencias que hay entre nosotros. Sin embargo, nunca olvides la razón por la que elegiste a esa persona para que fuera tu esposo o tu esposa.
Ninguno de nosotros es perfecto. No obstante, (1) si puedes aceptar las debilidades de tu cónyuge, (2) si estás dispuesto a ayudar a esa persona a convertirse en su mejor versión cada día (3) mientras esa persona te ayuda a ti también, entonces te casaste con la persona correcta.
¡Cuéntanos en los comentarios cómo descubriste que tu esposo o esposa era la persona con la que debías casarte!
Esta es una traducción del artículo que fue escrito originalmente por Belle y fue publicado en faith.ph con el título “Did I Marry the Right Person?”