Pregunta
He luchado con la pornografía por mucho tiempo. Recientemente, he dejado atrás ese comportamiento. Continúo en mi proceso de arrepentimiento y trato de enmendar lo que hice.
Me aseguro de poner a los demás primero y ayudó siempre que puedo. Sin lugar a dudas sé que el evangelio es verdadero y me gustaría ir en una misión. Es como si un fuego ardiera dentro de mi pecho cada vez que habló sobre el evangelio.
Entonces, ¿es posible que pueda servir para obtener el perdón del Señor? No es mi única razón para ir, por supuesto, pero es una de ellas.
Respuesta
El perdón que buscas se puede obtener antes de que vayas a la misión. Imagen: Canva
¡Tengo noticias maravillosas para ti! El perdón que buscas se puede obtener antes de que vayas a la misión.
En octubre de 2002, M. Russell Ballard, quien fue presidente del Cuórum de los Doce Apóstoles, exhortó:
“Necesitamos misioneros vibrantes, inteligentes y fervientes que sepan escuchar y responder a los susurros del Santo Espíritu.
Este no es el momento para los alfeñiques espirituales; no podemos enviarles a una misión para que se reactiven, se reformen o para que obtengan un testimonio; simplemente no tenemos tiempo para eso.
Queremos que estén llenos de ‘fe, esperanza, caridad y amor, con la mira puesta únicamente en la gloria de Dios’”.
Para cuando busques perdón en el campo misional será demasiado tarde.
De hecho, si no has resuelto tus problemas con la pornografía antes, es posible que los papeles de tu misión se retrasen. No lo digo para desanimarte, sino para ayudarte.
No puedes buscar perdón en el campo misional, ya es demasiado tarde. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Es posible que te hayas arrepentido completamente, pero que aún no hayas el perdón del Padre, aún sí tienes el poder de avanzar.
Tu obispo está encargado del proceso de solicitud para ir a la misión, puedes preguntarle si calificas para servir en la misión de acuerdo a cómo te encuentras en tu proceso de arrepentimiento. Tu obispo puede ayudarte a dejar atrás cualquier desafío que te impida servir.
Siguiendo con el mensaje del presidente Ballard, el apóstol expresó:
“Si ven que tienen deficiencias en la dignidad, decidan hacer los cambios necesarios y comiencen a hacerlo ahora mismo. Si piensan que deben hablar con su padre y con su obispo sobre algún pecado que hayan cometido, no esperen; háganlo ahora. Ellos les ayudarán a arrepentirse y a cambiar a fin de que puedan ocupar su lugar como miembros de la generación más grandiosa de misioneros”.
Tu obispo puede ayudarte a dejar atrás cualquier desafío. Créditos: Candace Simpson, Elegant Images
El élder L. Tom Perry también respaldó el consejo del élder Ballard y explicó por qué el aspecto de la dignidad es un criterio importante en el servicio misional:
“Por favor, sepan que aun cuando la enseñanza que impartan sea convincente, es el Espíritu el único que convierte. Predicad Mi Evangelio ofrece una buena descripción de todo lo que concierne a la obra misional.
En él leemos: “Como representante autorizado de Jesucristo, usted puede enseñar a las personas con poder y autoridad que ‘la redención viene en el Santo Mesías y por medio de él’ y que nadie ‘puede morar en la presencia de Dios, sino por medio de los méritos, y misericordia, y gracia del Santo Mesías’ (2 Nefi 2:6, 8).”
Puedes ayudar a personas a sentirse alineadas con Dios. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Como misionero, tendrás la oportunidad de enseñarle a personas que tienen adicciones, que han pasado por un aborto o que de otra manera necesitan la expiación de Jesucristo.
La luz del evangelio revelará sus pecados como la oscuridad que son, y a veces pueden sentirse alejados de Dios por eso. Cuando seas digno y limpio, podrás testificar poderosamente ante ellos de “los méritos, la misericordia y la gracia” del Salvador por los cuales viene la redención y el perdón.
Serás la prueba más real del poder sanador y liberador del arrepentimiento y perdón que vienen del Salvador.
Fuente: Ask Gramps
