El principio del sacrificio es importante en el Evangelio de Jesucristo. De hecho, el sacrificio máximo de Jesucristo nos ofrece la salvación y la exaltación.
Hacer sacrificios suscita las bendiciones del cielo.
A fin de saber más acerca de por qué los sacrificios son importantes y cómo podemos aprender a hacer sacrificios como lo hizo Jesús. A continuación, mencionaré algunas cosas que los profetas y los líderes Santos de los Últimos Días han dicho sobre el sacrificio.
El Presidente Gordon B. Hinckley explicó la importancia del sacrificio en el Evangelio:
“El sacrificio es la esencia misma de la religión; es la piedra angular de una vida familiar feliz, la base de la verdadera amistad, el fundamento de una vida pacífica como comunidad y de las relaciones sólidas entre las personas y las naciones… Sin sacrificio no hay verdadera adoración a Dios “.
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Sacrificarnos por los demás no significa que debamos sufrir privaciones. De hecho, es lo opuesto. El Presidente Ezra Taft Benson dijo:
“Si queréis encontraros a vosotros mismos, aprended a negaros a vosotros mismos para bendecir a otros. Olvidaos de vosotros mismos, tratad de encontrar a otro que necesite vuestro servicio, y descubriréis el secreto de una vida feliz y completa”.
El Presidente Dallin H. Oaks también nos recuerda que no solo disfrutamos de una vida feliz y completa ahora al hacer sacrificios. En realidad, nos estamos preparando para la eternidad. Dijo:
“Creo que los Santos de los Últimos Días que dan servicio desinteresado y se sacrifican imitando a nuestro Salvador como forma de adoración, se adhieren a valores eternos en una mayor medida que cualquier otro grupo de personas. Los Santos de los Últimos Días consideran sus sacrificios de tiempo y recursos como parte de su formación y preparación para la eternidad… Así como el sacrificio expiatorio de Jesucristo es la parte fundamental del plan de salvación, los seguidores de Cristo debemos hacer nuestros propios sacrificios para prepararnos para el destino que ese plan nos proporciona”.
Para ayudarnos a aprender a sacrificarnos y entregarle nuestro mejor esfuerzo al Señor, el Presidente Spencer W. Kimball compartió 3 cosas en las que podemos enfocarnos. Primero, debemos “eliminar la tendencia al egoísmo, el cual atrapa el alma, endurece el corazón y obscurece la mente”. Segundo, debemos “cooperar completamente y trabajar en mutua armonía”. Finalmente, dijo que debemos “postrarnos ante el altar y sacrificar todo lo que nos sea requerido por el Señor”.
Si bien dicho sacrificio puede ampliar nuestras almas, la hermana Carol B. Thomas compartió algunas de las bendiciones que recibimos mediante el sacrificio.
“El sacrificio es un principio asombroso. A medida que de todo corazón demos de nuestro tiempo y talentos y todo lo que poseemos, se convierte en una de las formas más reales de adoración. Puede desarrollar en nuestro interior un profundo amor hacia los demás y hacia nuestro Salvador, Jesucristo. Mediante el sacrificio los corazones pueden cambiar, podemos vivir más cerca del Espíritu y tener menos apetito por las cosas del mundo”.
Esta es una traducción del artículo que fue escrito originalmente por Aleah Ingram y fue publicado en ldsdaily.com con el título “What Latter-day Saint Prophets Have Said About Sacrifice”.