Cómo hablarles a tus hijos sobre la raza y el sacerdocio

restricción del sacerdocio

Con la celebración del evento mundial y especial de la iglesia (01 de junio) para conmemorar el aniversario 40 de la revelación sobre el sacerdocio de 1978. Ahora, es la oportunidad perfecta para que los padres hablen sobre la restricción del sacerdocio y el templo con sus hijos. Esperamos que el siguiente artículo ayude a facilitar esta importante conversación en los hogares mormones.

También te puede interesar: Cómo malinterpretamos la raza y maldición; en las Escrituras: las ideas de un converso afroamericano

Cuando mi hijo escuchó por primera vez sobre la restricción del sacerdocio para los negros, su reacción instantánea fue, “¿por qué?”

Mi hijo congolés-estadounidense no podía comprender la idea de la restricción del sacerdocio y la participación de las ordenanzas del templo para los negros. La iglesia “normal” para mi hijo incluye: administrar la Santa Cena, servir en la presidencia del quórum de diáconos y participar de los bautismos en el templo. Podría no disfrutar cada minuto de la iglesia, pero si le preguntas a mi hijo sobre su parte favorita de ser diácono, dirá todas las veces, “repartir la Santa Cena.” A los 12 años, percibe lo sagrado de la ordenanza y comprende el sentido de pertenencia.

Al enfocarme en el aniversario 40 del levantamiento de la restricción del sacerdocio de la iglesia, reflexiono sobre este tema complicado en la historia mormona y cómo impacta en mi familia. Unos meses antes de que mi hijo fuera ordenado diácono, me di cuenta de que deseaba que escuchara sobre este tema primero por su familia, aunque me preguntara a mí mismo qué diría.

Hablar con nuestros hijos sobre la restricción del sacerdocio

restricción del sacerdocio

Hablar sobre la raza es nuevo para mí. Poco a poco se está volviendo menos incómodo, pero las familias predominantes blancas [en Utah] como la mía pueden tener problemas para abordar el tema o responder preguntas sobre algo con lo que no podemos empezar a familiarizarnos. Criar a un hijo negro me anima a salir de mi zona de confort frecuentemente y para bien. A continuación, mencionaré algunos consejos que hemos aprendido a lo largo del camino, que esperamos faciliten estas conversaciones para ti y tus hijos.

Hablar sobre temas controversiales con anticipación en casa

restricción del sacerdocio

Respecto al tema de la restricción del sacerdocio, imaginé a alguien mencionárselo a mi hijo (y otros) en una clase de la escuela dominical y mi hijo preguntándose cómo eso podía ser cierto e incluso peor, por qué sus padres no le habían hablado al respecto. Hablar sobre los temas más controversiales de la iglesia primero en nuestras familias, proporciona un marco necesario mientras nuestros hijos nutren sus testimonios en otros lugares. Esto me hizo recordar una cita “Como padre, tuve el poder de quitar el elemento sorpresa para aprender sobre algunos de los aspectos más difíciles de entender sobre la doctrina mormona y la historia de la iglesia.”

La comunicación abierta y a largo plazo es indispensable

restricción del sacerdocio

Hablar sobre la restricción del sacerdocio con nuestros hijos no es necesariamente una conversación para sentarse una sola vez.  Es más fluida que eso. En mi familia y otras, que he entrevistado, la conversación sobre la restricción del sacerdocio se combina con otras injusticias, como la esclavitud y la discriminación racial.

Como madre de una hija adolescente negra, Laurie Rose de Utah escribe, “La comunicación es indispensable… Lo frustrante era que [su hija] volviera a casa de la iglesia con la información equivocada como tener una maldición, la marca de Caín, etc. y preguntarse qué estaba sucediendo porque eso provenía de sus maestros. Así que se lo enseñábamos nuevamente. Todos somos hijos de Dios. Todos somos semejantes a Él, y nadie está por encima o debajo que otro,” y “un día, Jesucristo hará que TODAS las cosas injustas sean justas. Existe tanta esperanza en esa promesa.”

Organizar una noche de hogar sobre temas difíciles

restricción del sacerdocio

Con respecto a la restricción del sacerdocio, todos podemos beneficiarnos de las ideas compartidas por nuestros hermanos que tienen experiencias relacionadas directamente al tema. Shelley Washington, una mormona negra de Maryland, ofrece una manera inspirada de facilitar la conversación sobre la restricción del sacerdocio en casa. Cuando se publicó el ensayo “la Raza y el Sacerdocio” en 2013, junto con su esposo organizaron una noche de hogar para leer y hablar sobre la nueva información.

Washington sintió un tremendo dolor y enojo por la manera en cómo se hablaba de las personas negras en la iglesia. Cuando Shelley y su esposo se unieron a la iglesia a principios de la década del 2000, ninguno de los dos sabía sobre la restricción del sacerdocio.

restricción del sacerdocio

“Al principio, cuando me uní a la iglesia, me preguntaba, “¿Dónde están los negros?,” recuerda. Pronto, Washington aprendió sobre la restricción del sacerdocio y algunas cosas hirientes que se enseñaban sobre las personas negras. “Sentí como si tuviera que convertirme en una persona blanca. Intenté ser blanca en la iglesia porque no podía ser mi yo negro. Me decían que tenía una maldición y lo acepté porque pesaba que era así.”

A medida que Washington y su esposo crían a sus tres hijos, hacen todos los esfuerzos posibles para asegurarse de que sus niños tengan una experiencia diferente y hablarles sobre la restricción del sacerdocio ha formado gran parte de ese proceso. “Para progresar, tienes que saber de dónde provienes,” expresa Washington.

Construir la fe y la confianza

restricción del sacerdocio

Considerando todos estos temas, ¿cómo podemos ayudar a nuestros hijos a curar el daño causado por otros con la veracidad del evangelio? Cuando no están disponibles las respuestas, en especial de los temas controversiales como la restricción del sacerdocio, es una gran ayuda regresar a los fundamentos de la doctrina. Cuando damos ejemplo de la fe en Jesucristo, reconocemos Su evangelio como un conjunto básico de creencias, permitimos que el Espíritu manifieste la veracidad de su doctrina. Desde que sabemos que la fe real requiere de obras, educamos a nuestros hijos en la verdad, al utilizar las escrituras, las palabras de los profetas y de otros líderes de la iglesia así como la revelación personal.

Responder y compartir sinceramente

restricción del sacerdocio

Mantener un diálogo abierto en nuestras familias significa que nuestros hijos ocasionalmente nos harán preguntas difíciles. Así como los misioneros no pueden responder todas las preguntas de sus investigadores, tampoco nosotros los padres. Estoy aprendiendo que la frase “no sé,” a veces es la mejor y ciertamente, la respuesta más sincera. La pausa después del “no sé” crea un espacio para que brote la fe de los hijos. Cuando somos sinceros en nuestras respuestas a las preguntas difíciles, nuestros hijos desarrollan confianza en nosotros. Esto les infunde la confianza para continuar su propia exploración e imitar el patrón de pedir y recibir revelación personal de Dios.

Una extensión de conversar sobre la restricción del sacerdocio en nuestras familias es compartir lo que hemos aprendido de los demás. Para mí, esto incluye decir lo que se piensa para corregir los mitos cuando aparezcan en las clases, conversaciones y en Internet – incluso, cuando es socialmente arriesgado.

Educarnos a nosotros mismos

Además de escuchar las conversaciones de otros, también podemos ayudar al educarnos. A continuación, mencionaré algunos recursos que debes revisar:

1. Temas del evangelio, ensayo: “La raza y el sacerdocio”

restricción del sacerdocio

Familiarizarnos con el ensayo de la iglesia “La raza y el sacerdocio” nos puede dar la seguridad que necesitamos para hablar sobre las teorías incorrectas que nosotros y los demás pudimos haber aprendido antes. Este ejemplo del documento resume y denuncia los malentendidos más comunes:

Actualmente, la Iglesia rechaza las teorías formuladas en el pasado de que la piel negra es una señal de desaprobación o maldición divina, o que refleja las acciones en la vida preterrenal; que los matrimonios de raza mixta son un pecado; y que las personas negras o de otra raza u origen son en modo alguno inferiores a cualquier otra persona. Hoy en día, los líderes de la Iglesia condenan en forma inequívoca todo racismo, pasado y presente, de cualquier manera que se manifieste.

2. Las obras de especialistas mormones negros

restricción del sacerdocio

Estudiar las obras de los especialistas mormones negros puede expandir nuestro conocimiento sobre los temas de la raza en la iglesia y las escrituras, Marvin Perkins, es uno de esos expertos.

3. Las cuentas de redes sociales de los mormones negros

restricción del sacerdocio

Si bien podemos aprender mucho de nuestros hermanos negros, no esperamos que los miembros negros nos enseñen sobre la restricción del sacerdocio. Este tipo de expectativas impone una forma de microagresión y colocan una carga adicional sobre nuestros hermanos. Una manera apropiada de apoyar y aprender de las experiencias de nuestros hermanos negros podría ser seguir las cuentas de redes sociales de las entretenidas “Sistas in Zion,” Tamu Smith y Zandra Vranes. Una acción inapropiada podría ser enfocarnos en un miembro negro de nuestro barrio y esperar que nos explique los mitos que rodean la restricción del sacerdocio.

Seguir adelante

restricción del sacerdocio

Mis amigos blancos me preguntan qué podemos hacer para ayudar. Si deseamos “llorar con los que lloran y consolar a los que necesitan consuelo” (Mosíah 18:09), escuchemos con atención las experiencias de nuestros hermanos negros, evitemos decir las frases que nos tranquilizan: “Bueno, ya no es así.”

El relato de mi familia, como me lo contó mi mamá, Becky, habla de esto: “Existen muchas cosas injustas en el mundo. ¿Cómo podemos avanzar a partir de esto? ¿Qué podemos hacer al respecto? ¿Cómo podemos continuar?”

Podemos hacer más diciendo menos. En vez de ignorar a los miembros que posiblemente se puedan sentir ofendidos con la frase “no seas tan sensible,” podemos considerar sabiamente que “el que guarda su boca y su lengua, su alma guarda de angustias” (Proverbios 21: 23). Podemos escuchar las voces como la del reconocido Darius Gray, quien en su ensayo publicado en lds.org, dice “si nuestro enfoque sincero fuera permitir que [los miembros negros de la iglesia] compartieran sus vidas, historias, familias, esperanzas y penas, no solo obtendríamos un mayor entendimiento sino que haríamos de esta práctica un largo camino hacia la curación de la heridas del racismo.”

restricción del sacerdocio

Aprecio la voz de Tekulvé Jackson-Vann y me he dado cuenta de cómo su fe frecuentemente reemplaza sus desafíos. Escribe, “Le recuerdo a mi hijo mayor que el racismo se basa en las personas y los testimonios se fundamentan en la doctrina. No podemos permitir que el carácter de las personas nos aleje de lo que sabemos que es verdad.”

Escuchar esas voces sin intentar relacionar o defender requiere incluso más que amor; requiere caridad. El tipo de caridad definida en Corintios, que es “benigna” “no busca lo suyo” “no se irrita.” El tipo de caridad que “se regocija en la verdad” (1 Corintios 13: 4 – 6).  No lo entenderemos correctamente siempre, pero continuar en los esfuerzos de corregir los mitos y detener los comportamientos hirientes es como mantenemos parte de nuestro convenio bautismal de llevar las cargas los unos de los otros. La parte de nuestra historia compartida como mormones, donde solo algunos de nosotros recibimos la plenitud del evangelio, sigue siendo una carga para nuestros hermanos negros. A medida que apoyo a mi hijo que soporta esa carga, aprendo a amar mejor.

 Artículo originalmente escrito por Sherilyn Olsen y publicado en ldsliving.com con el título “How to Talk to Your Kids About Race and the Priesthood.”

Comentarios
La verdad es que este artículo es un tanto decepcionante. Es como contar una verdad a medias, que es peor que mentir. Si hay que hablar del sacerdocio y las personas de piel obscura entonces hay que contar la verdad de la historia de la iglesia. Las cosas que dijeron los primeros líderes y las circunstancias que rodearon a esas cosas. Hoy por internet se puede encontrar la historia de la iglesia en las mismas páginas oficiales de la iglesia, no hay necesidad de andar disfrazando las cosas para que parezcan más lindas o menos duras. Yo pienso que cuando alguien tiene que andar endulzando algunas cuestiones es porque sabe que son cosas duras en la historia, son cosas a veces difíciles de aceptar. La verdad es que este artículo es como cuando enseñamos hablar a los bebés, se les dice mema en lugar de mamadera, o tete en lugar de chupete y después los niños tienen que volver a aprender de nuevo las palabras reales de las cosas. Les agradezco muchísimo por el esfuerzo aplicado en estos artículos, pero no sean eufemistas con la verdad.
Diego.

Deja Tu Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *