No todos los amores tienen la dicha de durar para siempre. Sin embargo, tenemos la oportunidad de volver a comenzar y encontrar a ese compañero eterno o compañera eterna que deseamos.
Salir en citas se siente extraño durante la mediana edad. En especial, cuando no has salido con nadie más que tu cónyuge en décadas. No obstante, todo se puede solucionar con un poco de práctica. Al final, ya has estado en ese camino antes.
¡Aquí comparto contigo cinco consejos que pienso que serán de gran ayuda para ti!
1. La seguridad es lo primordial
Si no conoces bien a la persona con la que vas a salir, es preferible reunirte con ella en un lugar público e iluminado.
Cuando salía con mi esposa, solía recogerla en la puerta de su casa. Sin embargo, ahora, el Internet ha cambiado todo eso. Nos reunimos en espacios públicos y cada quien se va por su lado. Con frecuencia, salimos en una primera cita con alguien que no conocemos muy bien, si es que la conocemos.
En muchos casos, una primera cita suele ser nuestro primer encuentro en persona.
Sin embargo, independientemente de cómo suceda tu reunión, si eres hombre, asegúrate de acompañar a tu cita hasta que se haya ido u ofrécete a llevarla a casa.
Preocuparte por su seguridad es un gran gesto de respeto.
Asimismo, ya seas hombre o mujer, sigue tus instintos sobre ciertas excepciones y pon la seguridad primero.
2. Ser conservador con el contacto físico
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Hoy en día, dar un abrazo en una reunión o al despedirse es una costumbre – claro, me refiero a antes del COVID.
Creo que dar un abrazo es una expresión de afecto y aceptación. Así que, no malinterpretes eso. Un abrazo es una costumbre, no implica un interés serio o el deseo de más afecto.
Además, debes tener en cuenta que cada persona se siente cómoda con un nivel diferente de afecto físico. Por lo general, te recomendaría que seas conservador con respecto al afecto en las primeras citas y te enfoques en la conversación.
3. Llegar a un acuerdo sobre el pago de la cuenta
En la actualidad, se ha vuelto común que las mujeres inviten a los hombres a salir. No obstante, cuando sucede esto, ella controla los gastos. Y, la persona que controla los gastos, paga la cuenta. Si el acompañante se ofrece a pagar la cuenta o la propina, o en el mejor de los casos se ofrece a dividir la cuenta, sería genial.
4. Mantenerse alejado del teléfono
No es agradable estar en una cita y que tu teléfono no pare de sonar. Eso interrumpe la comunicación.
Es comprensible, si tienes hijos menores en casa, que no dejas de ser padre o madre cuando estás en una cita. Sin embargo, asegúrate de indicarles a tus hijos o las personas que dejaste a su cuidado que se comuniquen contigo solo en caso de alguna emergencia.
Así demostrarás respeto por la otra persona y podrás conocerla mejor.
Tuve experiencias desagradables con citas que revisaban constantemente sus redes sociales y se reían de cosas de las que yo no estaba al tanto.
O, en una ocasión, una cita se enojó conmigo por enviar un mensaje de texto a una persona mientras estaba con ella en un concierto al aire libre. En realidad, me estaba comunicando con un cliente. Sin embargo, pude entender su frustración.
Pude haber enviado un mensaje de texto a mi cliente e informarle que no estaría disponible y lo llamaría al día siguiente.
Tener tu teléfono sobre la mesa frente a ti, te distrae. Incluso, si no estás usándolo activamente. Además, indica de manera sutil que la persona con la que estás no es tan importante como tu teléfono.
5. Evitar hablar de relaciones anteriores
Mantengan al mínimo la conversación sobre sus ex cónyuges y novios.
Estás saliendo en una cita para conocer mejor a tu acompañante, no para repetir los detalles que rompieron tu corazón. Esta puede ser una tentación seria si la cita es entre dos divorciados.
Si la relación progresa, habrá oportunidades para compartir tu historia de divorcio y será importante hacerlo.
En la primera cita, aprovecha la oportunidad para conocer a tu pareja haciéndole preguntas profundas sobre otros temas y cómo esa persona ve la vida en el futuro.
Si la conversación se convierte en una sesión de terapia, no se propiciará un ambiente para una conexión positiva. Será una conexión de dos personas heridas y no quieres construir una relación sobre eso.
¿Qué otras cosas deberíamos tomar en cuenta al volver a salir en citas estando divorciados? ¡Cuéntanos en los comentarios!
Fuente: Meridian Magazine