Como soltera mormona, las experiencias de la iglesia son diferentes que de “costumbre.” Me tomó tiempo hablar con casi unos doce solteros o ex solteros, particularmente con aquellos que pasaron mucho tiempo solteros después de los 21 años, e invitarlos a contarnos que les gustaría que supiéramos de su experiencia como solteros mormones en la iglesia.
No es de extrañar que encontrara las conversaciones interesantes y reveladoras, asimismo algunos temas y opiniones surgieron una y otra vez. Mira el siguiente video:
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1. Dos solteros mormones no son parecidos
Hablando en general, los solteros solo tenemos en común el hecho de ser solteros mormones. Sin embargo, más allá de esa característica, somos personas muy diferentes con nuestras propias historias. Algunos solteros nunca se casaron; otros, se divorciaron o son viudos. Por otro lado, estudiaron en la universidad o no. Quizá algunos fueron miembros toda su vida y otros, se convirtieron siendo adultos. Cierto número tiene hijos y otros, no.
Tenemos nuestras propias fortalezas, debilidades, talentos, intereses, desafíos y triunfos. Entonces, no asumas que solo por ser solteros mormones pensamos y actuamos igual. Luchamos por ser valorados como las personas que realmente somos.
2. La mayoría desea casarse (por primera vez u otra vez) pero no estamos desesperados por casarnos
En otras palabras, por favor, no nos pregunten constantemente si o cuando nos casaremos. Confíen en nosotros, si encontramos a la persona correcta, nos casaríamos. A veces, realmente apreciamos sus esfuerzos de buscarnos una pareja pero recuerden que incluso si conocemos a un soltero que fuera miembro activo de la iglesia, necesariamente este hecho no lo volvería un buen prospecto para el matrimonio. Aun así, si te sientes impulsado a presentarnos a alguien que crees que podría ser una cita divertida o buena pareja, continua y preséntanoslo pero no nos presiones a salir con esa persona. Es muy probable que nos casemos exitosamente si nos dan un poco de tiempo y espacio para buscar inspiración por nuestra parte.
3. A nosotras, las hermanas, nos gustaría ayudarte a encontrar algunos hombres buenos
Una hermana soltera de Oklahoma tuvo que decir esto sobre ser soltera en la iglesia: “A la conferencia de solteros de la que acabo de regresar, asistieron 700 mujeres y 200 hombres. ¿Dónde están todos los hombres? Inactivos, creo.”
“Necesitamos que los quórumes de élderes y los grupos de sumo sacerdocio salgan y hagan su trabajo de contactar a estos solteros mormones. No existe manera en que puedan ser correctos portadores del sacerdocio mientras estén inactivos y sin amigos en la iglesia. La mayoría de las hermanas preferiríamos quedarnos solteras que terminar con un hombre que no tenga un testimonio fuerte y no sea un portador valiente del sacerdocio.”
4. Valoramos su amistad
Tenemos amistades fantásticas con otros solteros y amistades maravillosas con los casados. Aunque no tengamos el mismo estado civil que nuestros amigos casados frecuentemente compartimos muchas otras cosas en común como el amor por la música, el interés por actividades al aire libre y a veces, una perspectiva similar de la vida además de una creencia profunda y eterna de nuestra responsabilidad de hacer una diferencia positiva en el mundo que nos rodea por medio de actos de servicio consistentes y compasivos.
5. Apreciamos su sensibilidad por nuestras circunstancias de solteros y probablemente sin hijos cuando dan sus mensajes en la reunión sacramental y comparten sus lecciones de los domingos
Amamos el hecho de que la iglesia se centre en la familia y entendemos que muchos mensajes y lecciones se escribieron y prepararon necesariamente con las familias en mente. Aun así, apreciamos cuando los maestros y discursantes consideran que no todos nosotros [los solteros mormones] vivimos en hogares donde haya una madre, un padre e hijos ideales. No esperamos que nos compadezcan por nuestra falta de dicha situación familiar pero somos impactados positivamente cuando los maestros y discursantes hacen un esfuerzo para preparar sus lecciones según nuestras circunstancias personales.
6. Necesitamos maestros orientadores y maestras visitantes diligentes
Un buen número de solteros mormones no ha experimentado la bendición de tener maestros orientadores y maestras visitantes fieles. Sin embargo, sabemos que ésta puede ser una gran bendición en nuestras vidas. Una madre soltera de dos niños dijo lo siguiente sobre sus maestros orientadores fieles: “agradezco a mis maestros orientadores por darse el tiempo de traer mensajes asimismo enseñarme a hacer ciertas cosas como sellar las grietas de mi ventana.” Por favor, sepan que aunque tengamos familia o no, es una inmensa bendición tener maestros orientadores y maestras visitantes diligentes.
7. Amamos servir en los llamamientos de la iglesia y en capacitaciones de la iglesia para voluntarios pero frecuentemente tenemos menos tiempo libre de lo que los demás podrían imaginar
Para aquellos que no tienen hijos, comprendemos que a veces, nuestros amigos casados asumen que tenemos menos responsabilidades y más tiempo libre de lo que en realidad tenemos. Ciertamente, muchos de nosotros trabajamos arduo para mantener nuestros trabajos exigentes, la única responsabilidad de cuidar mantener nuestros hogares además de las necesidades de amigos y familias. A veces, incluye a nuestros padres ancianos.
Por favor, sepan que en verdad deseamos servir en la iglesia y estamos comprometidos. Al mismo tiempo, buscamos por medio de la oración el equilibrio entre nuestro servicio en la iglesia con las demandas y necesidades en nuestras vidas personales.
8. Disfrutamos sirviendo en diferentes llamamientos de la Iglesia
Los solteros mormones disfrutamos servir en una gran variedad de llamamientos, desde maestros de la primaria hasta consejeros de la sociedad de socorro y misioneros de barrio. A donde nos manden a servir, buscamos utilizar las habilidades especiales y conocimiento que ganamos de nuestros trabajos y vidas profesionales para magnificar nuestros llamamientos en la Iglesia.
9. Esperamos que celebren lo bueno de nuestras vidas con nosotros
Aunque a veces, podríamos sentirnos acongojados por no estar casados y, según sea el caso, no tengamos hijos, sabemos que aún existen muchas cosas buenas por celebrar en nuestras vidas. Significa mucho cuando nuestros amigos mormones comparten nuestra emoción por un ascenso en el trabajo o el entusiasmo por desarrollar un talento. Trabajamos arduo por hacer las vidas felices sin importar las circunstancias. Lo cierto es que nuestra felicidad naturalmente se duplica cuando la compartimos con los demás.
10. Sabemos que haces una diferencia poderosa y positiva en nuestras vidas
Si alguna vez te has preguntado si haces una diferencia en nuestras vidas, te aseguramos que SÍ, lo haces. Podemos recordar numerosas veces cuando tu amistad y cariño hicieron una gran diferencia.
Para los solteros mormones, las experiencias en la Iglesia pueden ser complicadas pero con la comprensión y el apoyo de nuestros amigos, familia y miembros de nuestro barrio, es mucho más fácil. Ser sensible a nuestras necesidades nos demuestra que amas y aprecias nuestra contribución a la comunidad y no podemos estar más agradecidos.
Adaptación del artículo escrito originalmente por Debra Sansing Woods y publicado en ldsliving.com con el título “10 Things LDS Singles Wish You Knew.”