Los peligros de las apps de citas: “No todos tienen intenciones buenas”

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Las apps de citas se están volviendo cada vez más populares en todo el mundo y, de la misma manera, los peligros que ahí acechan no se han quedado atrás.

Cuando Marla Perrin, ahora de 25 años, escuchó por primera vez sobre Mutual, la aplicación de citas diseñada para miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, se emocionó mucho.

Perrin había usado otras aplicaciones de citas en el pasado, pero encontró su experiencia infructuosa y frustrante. Los hombres con los que hacia match a menudo no compartían su fe, por lo que siempre estaba con la guardia en alto, preocupada de que alguien la acosara o acechara.

Mutual parecía ser un oasis de citas para Marla Perrin. Ella pensó que los hombres en la aplicación eran todos miembros de la Iglesia, lo que significaba que finalmente podría relajarse un poco. Pensó que los chicos que encontraría tendrían los mismos valores y expectativas en cuanto a las citas, como la ley de castidad, y que respetarían sus límites.

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Al menos eso pensaba, hasta que conoció a un misionero retornado que al principio parecía bueno y atractivo. Sin embargo, después de salir en una primera cita con él, lo encontró arrogante y agresivo. Seguidamente, ella le dijo que no estaba interesada en volver a salir con él.

“No me mientas”, respondió. 

Su respuesta hizo que se le erizara la piel y ella inmediatamente bloqueó su número. Más tarde esa misma noche, recibió llamadas de tres números desconocidos, todos ellos de él, esos también los bloqueó. Ella esperó que ese fuera el final.

Pero días después, recibió un mensaje de una cuenta de Instagram de un joven que afirmaba vivir en su área. Intercambiaron algunos mensajes y él la invitó a salir. Como todavía se sentía asustada después de su última experiencia, aceptó encontrarse con él en el lugar más seguro en el que podía pensar: el Templo de Laie Hawaii.

Cuando él apareció, ella sintió que un escalofrío le recorrió la espalda: era el mismo chico de antes. Ella se dio cuenta de que él la había engañado para que se reuniera usando un perfil falso. Marla le dijo firmemente que la dejara sola y regresó a su casa de inmediato. 

“En retrospectiva, tuve un falso sentido de seguridad, porque era una aplicación de citas para los miembros de mi Iglesia”, dijo sobre la aplicación, la cual no tiene afiliación con La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. “En Mutual, pensé que encontraría un esposo, no un acosador.”

Perrin no es la única y el problema no es sólo en Mutual. El acoso en las aplicaciones de citas es muy común, según un estudio reciente por Pew Research Center. 

El 60% de las mujeres usuarias de este tipo de aplicación menores de 35 años han expresado que personas de sitios o aplicaciones de citas han continuado comunicándose con ellas después de que dijeron que no estaban interesadas, y el 57% informó haber recibido mensajes o imágenes explícitas no solicitadas.

“No todos tienen intenciones buenas”

A pesar de los inconvenientes, las aplicaciones de citas religiosas también brindan beneficios importantes y únicos, dijo la Dra. Marina Adshade, catedrática de la Escuela de Economía de Vancouver en la Universidad de Columbia Británica.

“Estoy relativamente a favor de la tecnología de aplicaciones de citas sólo porque hace que los mercados de personas sean mucho más grandes. Y desde una perspectiva puramente económica, si existe un mercado aún más grande, es mucho más probable que [los usuarios] se encuentren con alguien que tenga todas las cualidades que están buscando, lo contrario a un mercado más pequeño”, dijo.

Eso es un punto fuerte para las personas solteras de minorías religiosas, como los judíos o miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, que pueden tener problemas para encontrar pareja en una ciudad en la que su fe no es la religión dominante, dijo.

Dicho esto, las aplicaciones de citas en sí deberían asumir la responsabilidad de garantizar que sus productos sean seguros para los usuarios, tomando un papel activo en la detección de las personas que usan la aplicación, respondiendo rápidamente a los informes de acoso sexual, dijo la Dra. Adshade.

Bob Carroll, cofundador de Mutual, dijo que la aplicación tiene un proceso riguroso que le permite a los usuarios informar sobre el comportamiento inapropiado que experimentan en la aplicación o en las citas establecidas a través de la aplicación.

“Queríamos que Mutual fuera algo más que [una app] donde sólo puedes deslizar hacia arriba y hacia abajo”, dijo. “Lo que queríamos que marcara la gran diferencia era la clase de aplicación [que brindamos], que las personas en la app se adhiriesen a los mismos valores que tendrían en su propia comunidad física.”

También es importante que los usuarios tomen medidas para protegerse al usar aplicaciones de citas.

“La mejor manera de protegerse [en las citas] es encontrarse siempre en lugares públicos y siempre dejar que alguien más sepa en dónde van a estar”, dijo la Dra. Adshade. 

“Investiguen a la persona antes de salir con ella, revisen su Facebook y otras redes sociales. Vean en qué tipo de actividades está involucrada está persona y cómo trata a los demás vía online. Creo que es mejor conocerla de esa manera antes de conocerla en el mundo real.”

Una app como las demás

Mientras tanto, en Hawai, Marla Perrin está agradecida de no tener que usar más aplicaciones de citas. En la Iglesia un domingo de noviembre de 2018, conoció al hombre que se convertiría en su esposo.

Mirando hacia atrás, dijo, que su experiencia en Mutual le enseñó que el hecho de que una aplicación de citas esté basada en la religión no significa que las mujeres que la usan estén a salvo del acoso.

“Si tuviera que usarla de nuevo”, dijo, “trataría a Mutual como cualquier otra aplicación de citas, sabiendo que no todos tienen intenciones buenas.”

Fuente: deseret.com 

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