“Que consideren la Iglesia como su gran y buena amiga, su refugio cuando el mundo parezca cerrarse a su alrededor, su esperanza cuando las cosas se vuelvan tenebrosas, su columna de fuego.”
(Gordon B. Hinckley)
Y, ¿ustedes son conversas?; Sabíamos que esa pregunta siempre nos direccionaba al principio. Conocí la Iglesia a los 2 años de edad, junto con mis 2 hermanas. Mi abuela paterna, pidió permiso a mis padres para poder llevarnos a la Iglesia, mis padres accedieron. Participamos en los programas de la Iglesia de acuerdo a nuestra edad. Mis padres no se convirtieron a la Iglesia, e incluso, no nos permitieron bautizarnos hasta después de los 8 años. La respuesta a esa pregunta era un no, y un sí. Tuvimos la oportunidad de saber que era ser un nuevo converso, y vivir el evangelio desde la niñez. Así que hoy les presentare, 37 cosas para ayudar a los nuevos conversos.
No. #1 Hazlo sentir como en casa.
Lo podrás ayudar por medio de tu interés genuino, apoyo, palabras de consuelo.
No. #2 Bríndale tu amistad sincera.
No. #3 Hazle saber, que no se preocupe, si al principio no lo sabe todo.
No. #4 Prestar servicio.
No. #5 Conviértete todos los días.
No. #6 Regala un Libro de Mormón, Triple o Biblia, o incluso folleto, y dedícaselo.
No. #7 Pídeles sus datos de contacto.
Es muy importante estar comunicados.
No. # 8 Felicítale por sus metas cumplidas.
No. #9 Visítale.
No. #10 Relata experiencias espirituales que le fortalezcan.
No. #11 Preséntalo o preséntala a tus amigos.
No. #12 Dale un breve recorrido por la capillla.
No. #13 Conoce a su familia.
No. #14 Desarrolla el atributo cristiano: Compasión.
No. #15 Pregúntale a los misioneros o misioneras por su desarrollo en la iglesia.
No. #16 Verlos a través de los ojos de nuestro Padre Celestial.
No. #17 Regala una corbata.
Si eres mujer joven, o joven que sepa coser, puedes hacer lo siguiente, ¡super nice!
No. #18 Ora para saber sus necesidades.
No. #19 Enséñale formas de aprender.
No. #20 Resistir la presión social, y no morir en el intento.
Hazles saber, que es posible lograrlo, y que como testifica Alma a Helamán: “Más que he aquí, mis miembros recobraron su fuerza, y me puse de pie, y manifesté al pueblo que había nacido de Dios”.
No. #21 Conóceles por su nombre.
No. #22 Oportunidades para progresar.
No. 23 Canta un himno.
No. #24 Sé amable y sonríe.
No. #25 El progreso espiritual, es paso a paso.
No. #26 Invítalos a una Conferencia General.
No. #27 Si tienes la oportunidad, visítalo junto con los misioneros, o misioneras.
No. #28 Testifícale de las verdades eternas.
No. #29 Invítale a compartir su testimonio, en una reunión sacramental.
No. #30 Organicen una actividad de servicio.
No. #31 Conocer sus dones y talentos.
No. #32 Invítalo o invítala a los bailes JAS.
No. #33 Comparte tu escritura especial.
No. #34 ¡Motívalos siempre!
No. #35 Sé siempre positivo o positiva.
No. #36 Hazle saber, que nuestro Padre Celestial, está muy feliz de su decisión.
Hacer esto, siempre le ayudará a sentir, que tomó la mejor decisión, que es una hija o hijo especial de él, y que tiene una naturaleza y destino divino.
No. #37 Intenta, con fe y amor, paso a paso, los 37 puntos.
No tengas miedo a fallar, si no logras hacer todos y cada uno de estos puntos, la retención de los nuevos conversos, consiste en la fuerza más poderosa de todas: El amor.