La ciudad de Las Vegas, la mezquita de las apuestas en el mundo; un destino de diversión y perdición.
No nos podemos olvidar de “¡lo que pasa en las Vegas, se queda en las Vegas!”. Esta es la ciudad de la que todo el mundo sabe.
Retrocedamos por un momento al año 1855, ¿quién hizo la primera apuesta en Las Vegas? Nada más ni nada menos que el “Moisés estadounidense”, Brigham Young.
Sin embargo, esta apuesta fue diferente a cualquier otra; no había cartas, ni fichas, ni siquiera dinero; lo que había eran 30 hombres dispuestos a dejar sus familias, hogares y estilos de vida para construir un establecimiento Santo de los Últimos Días en un desierto.
Esto resultó en una poderosa comunidad de Santos de los Últimos Días en Las Vegas y un templo del Señor.
En la actualidad, los visitantes pueden apreciar estas inmensas contribuciones que los Santos han hecho a la ciudad; sobre todo el impactante templo dedicado en 1989, el cual ilumina todo el horizonte.
Incluso, durante la Conferencia General de octubre del 2022, se anunció un segundo templo en Las Vegas, exactamente en Lone Mountain. Esto evidencia la gran influencia que los Santos aún tienen en el estado.
Una gran influencia
Hay más de 100,000 Santos en la región metropolitana de las Vegas. No obstante, a pesar de ser un gran número, eso solo representa el 6% de la población total de Las Vegas y Nevada.
Los miembros de La Iglesia de Jesucristo están entre las comunidades más influyentes sobre las más de dos millones de personas que alberga el estado.
Los Santos adoran en 360 congregaciones, junto con 3 misiones y 34 centros de Historia Familiar, los cuales enriquecen a las comunidades y ayudan a fortalecer las relaciones familiares.
Viendo así la gran influencia de los Santos, el editor, dueño y CEO de “Las Vegas Sun”, Brian Greenspun, dejó en claro que, “La comunidad Santo de los Últimos Días ha sido fundamental en cada faceta política, de servicio público y de caridad del estado. Ningún otro grupo ha influenciado tanto”.
El apoyo de las mujeres a las familias
Heidi Greshman, Santo de los Últimos Días, es una profesora y activista comunitaria. Ella realizó una importante labor al eliminar las señales y publicidades ofensivas en el área de Las Vegas, dijo:
“No deberíamos estar forzados a desviar la mirada de nuestros hijos cuando vemos un cartel indecente. Las personas se han olvidado de que Las Vegas no es únicamente un lugar turístico, sino también el hogar de un millón y medio de personas, las cuales tenemos una vida y salimos con nuestros niños”.
Otra importante mujer Santo de los Últimos Días, Judie Brailsford-Marcucci, se alió con Lisa Mayo-De Riso, una ferviente católica. Juntas dirigieron, desde que llegaron a Las Vegas, las normas de calidad de vida entre las compañías de carteles, licorerías, lugares de apuestas cerca a las escuelas, tiendas de cannabis cerca a las Iglesias, vecindarios y mucho más.
Ellas declararon que, si no fuera por el activismo de la comunidad Santo de los Últimos Días, los niños y vecindarios se hubieran visto afectados por dichos establecimientos y las costumbres que generan.
Estas mujeres recuerdan que, gracias a las 12 mil firmas recolectadas, consiguieron mantener a los casinos fuera de las áreas residenciales. Esto con el fin de proteger a las familias.
Santos de los Últimos Días en puestos públicos
En el pasado, muchos Santos de los Últimos Días han sido seleccionados para presidir puestos públicos en Las Vegas. Uno de ellos es Bruce Woodbury, que se desempeñó como Comisionado entre 1981 y 2009.
Otra influyente comisionada Santo de los Últimos Días, fue Mary Beth Scow, que sirvió del año 2010 al 2017. Ella trabajó para mantener los juegos y las apuestas en áreas fuera de los vecindarios.
Cuando se le preguntó la razón por la cual tantos miembros de la iglesia eran electos en oficios públicos, Scow resaltó lo siguiente:
“Muchos de los Santos de los Últimos Días están interesados en postularse a puestos públicos por honrados propósitos; y creo que las personas ven eso. Cuando eres alguien verdaderamente honesto, desearás lo mejor para la comunidad. Eso resuena en las personas, y ellas confían en ti porque lo sienten; creo que esa es la razón por la que tenemos tantos miembros de la Iglesia siendo electos para los cargos públicos”.
El profundo impacto
Los periodistas Jon Ralston y John L. Smith han descrito la influencia que tienen los Santos en sus comunidades locales.
Ralston dice que los miembros de la Iglesia “han influido profundamente en el desarrollo de la ciudad. Ellos son conocidos por ser personas firmes y de una moral recta”.
Smith también comenta:
“No podrías decir que Las Vegas es lo que es, si no fuera por la gran influencia de personas tan dedicadas como los Santos de los Últimos Días. No creo que haya un área en toda la ciudad de Las Vegas que no haya recibido la influencia de los miembros de la Iglesia de Jesucristo. Creo que su mayor contribución es la estabilidad en las comunidades”.
De esta manera, los Santos siguen influenciando de manera positiva a personas que no son de nuestra fe; tales como el senador Bryan, Lisa Mayo-DeRiso y muchos más.
Finalmente, el ex senador de Nevada y gobernador, Richard Bryan, compartió su concepto sobre la influencia de los Santos en el estado:
“La comunidad de Santos de los Últimos Días ha tenido un profundo impacto en el sur de Nevada. Si nos remontamos a los primeros años de la misión en 1855, ellos trajeron consigo valores familiares sólidos.
La familia estaba en primer lugar, no en el segundo ni en el tercero; y la estructura familiar afecta todo. Ellos son buenas personas quienes han contribuido a que Las Vegas sea una buena ciudad para vivir para todos nosotros”.
Fuente: LdsLiving