{"id":37223,"date":"2018-09-08T14:15:16","date_gmt":"2018-09-08T19:15:16","guid":{"rendered":"https:\/\/mormonsud.org\/?p=37223"},"modified":"2018-09-08T14:15:16","modified_gmt":"2018-09-08T19:15:16","slug":"historias-infertilidad-biblia","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/masfe.org\/temas\/para-meditar\/historias-infertilidad-biblia\/","title":{"rendered":"Encontrar paz a trav\u00e9s de las historias de infertilidad en la Biblia"},"content":{"rendered":"
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Cuando me di cuenta de cuantas historias de la Biblia trataban sobre la infertilidad, supe que hab\u00eda algo importante que deb\u00eda aprender de sus lecciones de vida.<\/em><\/p>\n<\/blockquote>\n

Es dif\u00edcil no llorar cuando hablo sobre las luchas contra la infertilidad que mi esposo y yo superamos. Me sent\u00ed optimista. Me sent\u00ed un fracaso. Sent\u00ed gratitud por los m\u00e9dicos que trabajaron arduamente para ayudarnos. Me sent\u00ed destruida con cada tratamiento fallido. Sent\u00ed que mi familia y amigos me amaban. Me sent\u00ed sola y desolada en mi dolor. Fue un tiempo dif\u00edcil.<\/p>\n

Tambi\u00e9n te puede interesar:\u00a0<\/strong><\/em>Jes\u00fas llor\u00f3, y deseo que mis hijos tambi\u00e9n lloren<\/a><\/p>\n

Mientras escudri\u00f1aba las escrituras en ese tiempo, me di cuenta de que hab\u00eda muchas parejas que sufrieron de infertilidad: Abraham y Sara, Isaac y Rebeca, Jacob y Raquel, Elcana y Ana, y Zacar\u00edas y Elisabet. Me sorprend\u00ed. La Biblia solo cubre una peque\u00f1a parte de una gran historia. \u00bfPor qu\u00e9 Dios inspirar\u00eda a los profetas a incluir tantas historias sobre la infertilidad? Parec\u00eda el inicio de una respuesta a mis oraciones. Hab\u00eda algo que aprender. As\u00ed que decid\u00ed estudiar a cada una de las mujeres en estas historias y a medida que las estudiaba, aprend\u00ed cuatro lecciones importantes que me ayudaron a crecer y encontrar paz a pesar de mis luchas contra la infertilidad.<\/p>\n

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    La infertilidad no es el reflejo de nuestra dignidad o capacidad<\/strong><\/span><\/h2>\n<\/li>\n<\/ol>\n

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    Cuando enfrent\u00e9 la infertilidad, me di cuenta de que era dif\u00edcil no sentir que era mi culpa, que Dios no confiaba en m\u00ed por alg\u00fan motivo. \u00bfNo era lo suficientemente fiel? \u00bfNo ser\u00eda una madre suficientemente buena? Me quedaba despierta durante la noche despu\u00e9s de que mi esposo se dorm\u00eda, deseando saber qu\u00e9 caracter\u00edstica me faltaba. Mi cerebro dec\u00eda que era inaceptable. Mi coraz\u00f3n me manten\u00eda despierta. Una de las mayores lecciones que aprend\u00ed de estudiar a estas mujeres de la Biblia fue que mi infertilidad de ninguna manera se relacionaba con la confianza o falta de confianza de Dios en m\u00ed.<\/p>\n

    La cantidad de informaci\u00f3n que pude encontrar sobre estas mujeres que no ten\u00edan hijos variaba, pero todas ten\u00edan ciertas cosas en com\u00fan. Sus vidas no eran f\u00e1ciles y el hecho de no tener hijos solo era parte de eso. La mayor\u00eda culp\u00f3 a los dem\u00e1s por no tener hijos. Varias tuvieron que esperar durante un largo tiempo para tener hijos, aunque guardaran los mandamientos y oraran. Despu\u00e9s de que Ana finalmente tuvo un hijo, lo llev\u00f3 a El\u00ed, el sacerdote, y le record\u00f3 sus oraciones: \u201c\u00a1Oh, se\u00f1or m\u00edo!… yo soy aquella mujer que estuvo aqu\u00ed junto a ti orando a Jehov\u00e1. Por este ni\u00f1o oraba\u201d<\/em> (1 Samuel 1: 26 \u2013 27; v\u00e9ase tambi\u00e9n los vers\u00edculos 10 \u2013 12).<\/p>\n

    Todas permanecieron firmes y fieles, incluso cuando sus oraciones y s\u00faplicas no fueron contestadas inmediatamente de la manera en que esperaban. Adem\u00e1s, ese era el punto. Su fe no depend\u00eda de la respuesta que recibieran o de si ten\u00edan hijos en esta vida. Eligieron confiar en nuestro Padre Celestial. Y, yo pod\u00eda hacer lo mismo.<\/p>\n

    Cuando finalmente estas mujeres pudieron tener hijos, criaron a algunos de los hombres m\u00e1s incre\u00edbles y fieles que vivieron en esta tierra: Isaac, Jacob, Jos\u00e9, Samuel y Juan el Bautista. Mientras meditaba sobre el impacto que cada uno de estos hombres tuvo en el mundo, me conmov\u00ed por la confianza que el Padre Celestial hab\u00eda depositado en estas mujeres, por medio de la confianza que \u00c9l coloca en todos, \u00c9l pide que ense\u00f1en a Sus hijos \u2013 madres y padres, t\u00edas y t\u00edos, maestros de la Escuela Dominical, obispos, l\u00edderes de la guarder\u00eda y m\u00e1s.<\/p>\n

    Ante los ojos de Dios, estas mujeres no fueron definidas por su infertilidad y yo tampoco. Somos hijas de Dios y \u00c9l cree en nosotras.<\/p>\n

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      Los planes de Dios involucran m\u00e1s de lo que podemos ver ahora<\/strong><\/span><\/h2>\n<\/li>\n<\/ol>\n

      \"infertilidad\"<\/strong><\/p>\n

      Me encanta la historia de Elisabet, la madre de Juan el Bautista. Sabemos muy poco sobre ella y aun as\u00ed aprend\u00ed tanto de ella. Elisabet y su esposo, Zacar\u00edas, oraron para tener hijos, pero sus oraciones no fueron contestadas de la manera en que esperaban. Aparte de eso, los dem\u00e1s la miraban con desprecio por no tener hijos, estoy segura de que eso solo intensific\u00f3 su dolor. A pesar de todo, ella y su esposo siguieron siendo fieles a los mandamientos y las ordenanzas del Se\u00f1or. Debieron ser personas incre\u00edbles.<\/p>\n

      Finalmente, fueron bendecidos con un hijo. Me pregunto c\u00f3mo se habr\u00e1 sentido Elisabet cuando se enter\u00f3 de que el tiempo de su embarazo se debi\u00f3 en cierta parte al hecho de que su hijo, Juan, preparar\u00eda el camino para el Mes\u00edas. Al ser la mujer fiel que era, probablemente lo utiliz\u00f3 como una lecci\u00f3n para ense\u00f1arle a su hijo a confiar en el tiempo del Se\u00f1or.<\/p>\n

      Elisabet me record\u00f3 que solo puedo ver una peque\u00f1a parte de lo que el Se\u00f1or ve. Este pensamiento me ayud\u00f3 a continuar despu\u00e9s de cada tratamiento de infertilidad fallido. No pod\u00eda entender por qu\u00e9 el Se\u00f1or segu\u00eda gui\u00e1ndonos por caminos que parec\u00edan fracasos ya que no terminaban d\u00e1ndonos un beb\u00e9. Ahora, mirando hacia atr\u00e1s, puedo darme cuenta de c\u00f3mo cada uno de estos aparentes fracasos era un pelda\u00f1o importante en nuestro camino hacia el entendimiento de Su tiempo.<\/p>\n

      El Presidente Russell M. Nelson una vez inst\u00f3 a las \u201chermanas que no tienen hijos\u201d<\/em> a \u201crecordar que el concepto del tiempo en el plan del Se\u00f1or es mucho m\u00e1s amplio que las horas solitarias de la preparaci\u00f3n o la totalidad de esta vida mortal. Esta es apenas segundos en comparaci\u00f3n con la eternidad.\u201d <\/em>S\u00e9 que \u00c9l puede ver y saber mucho m\u00e1s de nuestro futuro, y si lo escuchamos, \u00c9l siempre nos dirigir\u00e1 por caminos que finalmente <\/em>nos llevaran a la gran felicidad.<\/p>\n

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        Encontrar gozo en el presente y valorar el conocimiento que est\u00e1s obteniendo<\/strong><\/span><\/h2>\n<\/li>\n<\/ol>\n

        \"infertilidad\"<\/p>\n

        Otra mujer de la Biblia de cuya experiencia aprend\u00ed fue Eva. Siempre am\u00e9 y admir\u00e9 a Eva. Era fiel, valiente, compasiva y sabia. Al considerar su historia a trav\u00e9s de los lentes de mi lucha contra la infertilidad solo se profundiz\u00f3 mi admiraci\u00f3n por esta incre\u00edble mujer. No s\u00e9 si Eva ten\u00eda el total conocimiento de su incapacidad de tener hijos sin salir del Jard\u00edn del Ed\u00e9n, pero el \u00c9lder Jeffrey R. Holland del Qu\u00f3rum de los Doce Ap\u00f3stoles explica que Eva \u201ccomprendi\u00f3 que ella y Ad\u00e1n tuvieron <\/em>que caer para que los hombres [y mujeres] existieran [2 Nefi 2: 25] y tuvieran gozo\u201d (v\u00e9ase 2 Nefi 2: 22 \u2013 25).<\/p>\n

        Sabemos c\u00f3mo Eva lleg\u00f3 a considerar su decisi\u00f3n de comer del fruto en retrospectiva. Despu\u00e9s de que Ad\u00e1n y Eva fueron expulsados del jard\u00edn, un \u00e1ngel lleg\u00f3 y les ense\u00f1\u00f3 sobre Jesucristo y Su Expiaci\u00f3n (v\u00e9ase Mois\u00e9s 5: 6 \u2013 9). Luego, el Esp\u00edritu Santo descendi\u00f3 sobre Ad\u00e1n, provocando que testificara. Eva dijo con alegr\u00eda: \u201cDe no haber sido por nuestra transgresi\u00f3n, nunca habr\u00edamos tenido posteridad, ni hubi\u00e9ramos conocido jam\u00e1s el bien y el mal, ni el gozo de nuestra redenci\u00f3n, ni la vida eterna que Dios concede a todos los que son obedientes\u201d <\/em>(Mois\u00e9s 5: 11).<\/p>\n

        Eva encontr\u00f3 gozo en su decisi\u00f3n. No puedo imaginar cuan doloroso pudo haber sido para Eva ser expulsada, dejar la presencia del Dios que amaba. Y, aun as\u00ed, cuando record\u00f3 esa decisi\u00f3n, se regocij\u00f3 del conocimiento que hab\u00eda obtenido, al saber que, por medio de la Expiaci\u00f3n de Jesucristo, finalmente podr\u00eda regresar a la presencia de nuestro Padre Celestial. Eva me ense\u00f1\u00f3 a encontrar felicidad en el presente. Ella pudo haber pasado su vida deseando todav\u00eda estar en el Jard\u00edn del Ed\u00e9n, anhelando la vida que dej\u00f3. En su lugar, encontr\u00f3 gozo en su situaci\u00f3n actual: en sus hijos, en el conocimiento que obtuvo y en el poder de la Expiaci\u00f3n del Salvador.<\/p>\n

        La lecci\u00f3n de Eva fue muy poderosa para m\u00ed. Durante mi lucha contra la infertilidad, a menudo me sent\u00ed tentada a solo concentrarme en lo que me faltaba, pero al centrarme en el presente tambi\u00e9n encontr\u00e9 gozo.<\/p>\n

        Entre otras cosas, pude utilizar este tiempo para ofrecer servicio como obrera en el templo. Antes, iba al templo porque era lo que se supon\u00eda que hiciera. Sin embargo, ahora me encanta incluso m\u00e1s. Siento un mayor aprecio por las ordenanzas que recibimos en el templo. \u00a1Las bendiciones prometidas a aquellos que guardan los convenios son incre\u00edbles! Y, son concedidas a todos. J\u00f3venes y adultos. Aquellos en buena condici\u00f3n f\u00edsica y los discapacitados. Casados y solteros. Aquellos que tienen hijos y no. Me siento una persona diferente porque serv\u00ed en el templo. Valoro m\u00e1s a las familias eternas. Tengo un mayor entendimiento de la Expiaci\u00f3n del Salvador. Oro de manera m\u00e1s consciente. Y, s\u00e9 que el mayor conocimiento y fe que gan\u00e9 por servir en el templo me convertir\u00e1n en una mejor madre.<\/p>\n

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        1. Todas somos madres<\/strong><\/span><\/li>\n<\/ol>\n

          \"infertilidad\"<\/strong><\/p>\n

          Eva tambi\u00e9n me ense\u00f1\u00f3 que el hecho de ser madre no tiene que vincularse con dar a luz: Dios el Padre y Ad\u00e1n llamaron a Eva \u201cla madre de todos los vivientes\u201d<\/em> (G\u00e9nesis 3: 20; Mois\u00e9s 4: 26) incluso antes de que diera a luz. Como Ardeth Greene Kapp, que sirvi\u00f3 como Presidenta General de las Mujeres J\u00f3venes y que nunca pudo tener hijos, pregunt\u00f3: \u201c\u00bfLa maternidad se encuentra reservada solo para aquellas que pueden dar a luz? \u00bfNo fue la misi\u00f3n sagrada de la maternidad preordenada por Dios para todas las mujeres<\/strong> antes de que existiera el mundo?\u201d <\/em>Adem\u00e1s observ\u00f3: \u201cHe llegado a saber que todas podemos\u2026 regocijarnos en el sagrado llamamiento de la maternidad. Dar a luz solo es una parte de este llamamiento sagrado.\u201d <\/em>Esta comprensi\u00f3n fue un b\u00e1lsamo reconfortante para mi coraz\u00f3n roto. Era madre \u2013 no en el sentido tradicional, ciertamente, pero ten\u00eda un papel que desempe\u00f1ar, una responsabilidad que asumir.<\/p>\n

          Sheri Dew, la antigua Segunda Consejera de la Sociedad de Socorro, dijo:<\/p>\n

          La maternidad es m\u00e1s que dar a luz. Se trata de la esencia de qui\u00e9nes somos como mujeres. Define nuestra identidad, nuestra estatura y naturaleza divinas, as\u00ed como los rasgos exclusivos que nos ha dado nuestro Padre\u2026<\/em><\/p>\n

          Como hijas de Eva, todas somos madres y siempre lo hemos sido.<\/em><\/p><\/blockquote>\n

          Por medio de la experiencia de Eva, me di cuenta de que la maternidad es un llamamiento para amar, educar y guiar a las generaciones m\u00e1s j\u00f3venes y tengo ese llamamiento independientemente de si di a luz o no. Durante los d\u00edas en que descubr\u00ed que ten\u00eda problemas de infertilidad, me llamaron como l\u00edder de las Mujeres J\u00f3venes en mi barrio. S\u00e9 que esta fue una bendici\u00f3n misericordiosa del amoroso Padre Celestial. Cuando derram\u00e9 mi coraz\u00f3n en ese llamamiento, cada jovencita se convirti\u00f3 en una hija para m\u00ed. Sent\u00ed un amor por ellas que solo podr\u00eda haber venido de su Padre Celestial. Pude experimentar lo que significa ser una madre sin dar a luz, y fue hermoso.<\/p>\n

          Me siento agradecida por las historias de esas mujeres maravillosas y justas de la Biblia. Nunca esper\u00e9 relacionarme tan profundamente con mujeres que vivieron en un tiempo diferente al m\u00edo, pero su fe y valent\u00eda al enfrentar la infertilidad significaron mucho para m\u00ed. Aprend\u00ed a tener m\u00e1s confianza en que soy una hija de Dios y que \u00c9l me ama, cree en m\u00ed y tiene un plan para m\u00ed. Aprend\u00ed a amar el templo y a encontrar oportunidades de aprender incluso en medio del dolor. He obtenido un mayor entendimiento de lo que significa ser madre. Principalmente, aprend\u00ed que incluso los detalles m\u00e1s peque\u00f1os en las escrituras pueden ser utilizados por nuestro amoroso Padre Celestial para darnos conocimiento y consuelo.<\/p>\n

          Vive con perfecta esperanza<\/strong><\/span><\/p>\n

          Si tenemos fe en Jesucristo, los tiempos m\u00e1s dif\u00edciles de la vida, as\u00ed como los m\u00e1s f\u00e1ciles, pueden ser una bendici\u00f3n. En todas las situaciones, podemos elegir lo justo con la gu\u00eda del Esp\u00edritu. Tenemos el evangelio de Jesucristo para dar forma y gu\u00eda a nuestra vida si as\u00ed lo decidimos. Y con los profetas que nos revelan nuestro lugar en el plan de salvaci\u00f3n podemos vivir con perfecta esperanza y con un sentimiento de paz. <\/em>Presidente Henry B. Eyring, Segundo Consejero de la Primera Presidencia, \u201cMonta\u00f1as que Ascender,\u201d Liahona de abril 2012.<\/p><\/blockquote>\n

          Recursos para aquellos que luchan contra la infertilidad<\/strong><\/span><\/h3>\n

          \"pareja\"<\/p>\n

          La infertilidad es una lucha f\u00edsica, mental y emocional. Los tratamientos m\u00e9dicos tambi\u00e9n pueden ser una gran carga financiera para las parejas. Afortunadamente, podr\u00eda haber recursos locales disponibles para ayudar a aligerar estas cargas. Muchos pa\u00edses tienen una asociaci\u00f3n nacional contra la infertilidad que puede brindar informaci\u00f3n sobre los diferentes tipos de tratamientos, cl\u00ednicas locales que tratan la infertilidad, grupos de apoyo y ayuda financiera. A continuaci\u00f3n, mencionar\u00e9 algunos recursos. (Estos recursos no son auspiciados por La Iglesia).<\/p>\n

          Apoyo financiero<\/strong><\/span><\/p>\n