La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y la Iglesia Adventista del Séptimo Día han unido esfuerzos para ayudar a familias necesitadas en Cabo Verde, España.
Inicialmente, The Community Association for Development of Pensamento (ACDP, por sus siglas en inglés) solicitó la ayuda de la Iglesia de Jesucristo para dar asistencia a las personas desvalidas durante esta pandemia mundial.
Es así que los Santos de los Últimos Días compró y entregó alimentos y artículos de primera necesidad para tres meses a setenta familias de la ciudad de Praia. Esta ayuda humanitaria benefició a más de 400 personas necesitadas.
Sobre esta donación, Lucilino Mendonca, representante de Servicios de Bienestar y Autosuficiencia de la Iglesia de Jesucristo declaró:
“LDSC decidió trabajar en cooperación con ACDP, porque creíamos que prestaban servicio a algunas de las poblaciones más vulnerables y afectadas, específicamente las personas mayores y las madres con niños pequeños”.
La Iglesia de Jesucristo y la Iglesia Adventista
Al poco tiempo, la Iglesia de Jesucristo y la Iglesia Adventista se unieron para llevar canastas de alimentos a 150 familias necesitadas en Monte Vermelho. Estas donaciones fueron entregadas por misioneros y jóvenes adultos Santos de los Últimos Días.
“Esta donación refleja lo que creemos: que como miembros de la Iglesia seguimos a Jesucristo al obedecer el segundo gran mandamiento de servir a los demás”, declaró Roseveltt Teixeira, líder local de la Iglesia de Jesucristo.
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