En un nuevo episodio de podcast de LDSliving, Stephanie Nielson compartió cómo encontró motivación a partir de las poderosas emociones de la maternidad después de un accidente que cambió su vida en 2008 y que la dejó gravemente quemada en más del 80% de su cuerpo.
Familia Nielson. Imagen vía LDSliving
La maternidad fue el trabajo que quería
“Desde muy joven, la maternidad fue el trabajo, la profesión que quería. Así que lo tomé en serio desde muy, muy joven, y sentía que, antes del accidente, era realmente buena siendo mamá… Y sentía que quería terminar ese trabajo.
Estábamos preparados para que la familia se hiciera cargo si lo necesitábamos [después del accidente],… pero el hecho es que son mis hijos. Me fueron dados, y quería criarlos. Y fueron mi motivación para mejorar.
En el hospital, mis terapeutas físicos me decían, ‘trabajemos en estirarte para que puedas mejorar’. Tenía que hacer estas tonterías de preescolar, como separar bloques y organizarlos por color. Y todas estas cosas eran realmente difíciles para mis dedos y mis manos. Y no estaba motivada.
Stephanie Nielson y su hija. Imagen vía Instagram
No fue hasta que las enfermeras decían, ‘pongámonos a pensar que estás jugando con tus hijos. O digamos que estás aspirando, o necesitas alcanzar el frasco de salsa de tomate en el armario’. Y no fue hasta que recibí esas indicaciones que pensé, ‘Sí, para eso estoy trabajando. Quiero volver con mis hijos’.
Eso simplemente me cambió de la noche a la mañana… Eso me salvó la vida. Pensaba en mis hijos. Quería volver con ellos. Quería volver a acostarlos para la siesta y leerles cuentos y andar en bicicleta juntos y jugar”.
Ser mamá no significa tener el control de todas las cosas
Ahora que soy mamá, mirando hacia atrás, creo que parte de lo que lo hizo tan desafiante inicialmente fue que tuve que aprender a ceder algo de control.
Cuando solo eres responsable de ti mismo, puedes esbozar aproximadamente la mayoría de lo que implica tu vida cotidiana. Pero los niños, incluso desde sus primeros días, comienzan a ser sus propios pequeños seres humanos.
Cada día se siente como un completo juego de azar en cuanto a cómo irán las cosas, y por más que lo intentes, no puedes hacer que tus hijos se duerman a una hora determinada, aprendan a caminar o a usar el baño, jueguen bien con otros niños, coman sus vegetales, aprendan a leer o se comporten en la escuela. Podría llenar probablemente tres párrafos más con ejemplos.
Los hijos son una gran motivación para superarse
Pero al igual que Stephanie, también puedo atestiguar el hecho de que gran parte de lo que hago todos los días está bellamente motivado por mi hija.
Ella ha ampliado nuestros límites, a mi esposo y a mí, de maneras importantes, nos ha traído luz y un amor más profundo de lo que pensaba posible, y nos ha enseñado mucho sobre el amor de nuestros padres celestiales.
En resumen, es exactamente lo que nuestra familia necesitaba.
Entonces, tal vez una lección importante que he aprendido sobre la maternidad es hacer un inventario de tu motivación última y luego aprovechar las cosas que puedes controlar para alcanzar ese objetivo.
Cuando la vida de Stephanie fue completamente sacudida después de su accidente, ella sabía que aún quería ser una madre involucrada y activa para sus hijos. Así que aprovechó lo que podía controlar, que en ese momento era sanar y quedarse “en este lado del cielo”, como ella misma dice.
Las mamás lo son todo
También me encantó lo que Claire Nielson, la hija mayor de Stephanie, dijo en reconocimiento a los esfuerzos de Stephanie por ser intencional como madre y lo importante que eso ha sido para ella como hija. Me da esperanza que mis propios esfuerzos como madre puedan ser reconocidos algún día también.
Stephanie Nielson y su hija mayor Claire.
“Mi mamá ha creado un hogar que es feliz y seguro, y un lugar al que queremos regresar. Me entristece cuando las mamás dicen: ‘Solo soy una mamá’, porque no eres solo una mamá. Las mamás son todo.
Vivimos en un mundo aterrador. Necesitamos hogares buenos donde los niños puedan crecer seguros, donde puedan fortalecer su relación con nuestro Padre Celestial y donde puedan aprender sobre Jesucristo.
Así que cuando salgamos al mundo, tengamos esas cosas esenciales como un testimonio sólido. Y un lugar donde aprendimos lecciones importantes para que podamos ser buenas mamás y papás, misioneros y ayudar a otras personas”.
Fuente: LDSliving
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