Una cuenta misional en Instagram, “missionariescalledtoserve”, ha compartido una noticia que llena de orgullo y emoción: los compañeros de una clase de una escuela secundaria en Nefi, Utah han recibido sus llamamientos para servir una misión de tiempo completo para La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
En su post, se lee: “La Clase de 2024 de la Escuela Secundaria JUAB alcanzó el mayor número hasta la fecha de élderes y hermanas que han elegido poner sus vidas en pausa para amar, servir, enseñar y compartir el evangelio con todo el mundo 🌎”. Este emotivo mensaje resalta la dedicación y el sacrificio de estos jóvenes.
Las fotografías muestran a 21 jóvenes, cada uno portando con orgullo las banderas de los países donde pronto servirán sus misiones. La imagen es un testimonio de su compromiso y el impacto que están a punto de tener en el mundo.
¿Quiénes son los misioneros?
Los misioneros son miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, quienes, movidos por un profundo deseo de servicio, dejan sus hogares por períodos de entre 18 meses y 2 años para dedicarse a ayudar a otros y compartir el Evangelio de Jesucristo.
Antes de partir a sus misiones, eran estudiantes, empleados, atletas, músicos y mucho más. Después de su servicio, regresarán a sus hogares para continuar con sus estudios, trabajar, casarse y vivir una vida normal.
El viaje de un misionero
El camino que estos jóvenes han elegido no es fácil, pero es profundamente gratificante. Decidir poner en pausa sus vidas personales para dedicarse a los demás requiere una gran dosis de valentía y fe. Durante sus misiones, experimentarán desafíos y alegrías, aprenderán sobre diferentes culturas y desarrollarán habilidades que les servirán para toda la vida.
Este grupo de la Clase de 2024 de la Escuela Secundaria JUAB está a punto de embarcarse en una aventura que transformará no solo sus vidas, sino también las vidas de aquellos a quienes servirán. Su ejemplo de dedicación y sacrificio es una inspiración para todos nosotros, recordándonos el poder del amor y el servicio desinteresado.
Estos jóvenes misioneros nos muestran que, en un mundo lleno de incertidumbres, hay quienes están dispuestos a poner a los demás primero, llevando un mensaje de esperanza y amor por todo el mundo, tal como lo enseñó el Salvador: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16:15).
¡Que su viaje esté lleno de bendiciones y que el impacto de su servicio resuene por generaciones!