La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días nos enseña que la educación es un proceso eterno y una parte fundamental de nuestra vida.
Sin embargo, ¿qué pasará con nuestro aprendizaje durante el Milenio, cuando Cristo reine sobre la Tierra? ¿Seguiremos aprendiendo o no tendremos esa necesidad?
Bien, para abordar este tema empezaremos con los temas básicos.
Entendiendo el milenio
El Milenio es el período posterior a la Segunda Venida de Jesucristo, durante el cual Él reinará por un corto periodo de tiempo y entonces vendrá el fin de la tierra.
Es un tiempo profetizado por estar marcado por la paz, la rectitud y la ausencia de guerra, ya que Satanás será atado (Doctrina y Convenios 43:31, Isaías 2:4).
Durante este periodo, los justos habitarán la Tierra, llevando una vida mortal, formando familias y participando en actividades similares a las de la actualidad. Este contexto proporciona la base para comprender cómo la educación continuará siendo una parte vital en el Milenio.
El propósito divino de la educación
La educación es considerada un principio divino dentro de las enseñanzas de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Nos ayuda a refinar nuestras habilidades y adquirir conocimientos, permitiendo que podamos servir eficazmente en el reino de Dios en cualquier ámbito.
El Señor desea que Sus hijos adquieran entendimiento, tal como se aconseja en Doctrina y Convenios 93:36:
“La gloria de Dios es la inteligencia, o en otras palabras, luz y verdad”.
Esto enfatiza la creencia de que la educación no es un objetivo terrenal, sino que también es fundamental para nuestro progreso espiritual y destino eterno.
Las enseñanzas de José Smith refuerzan aún más esta idea, ya que él declaró que el conocimiento y la inteligencia adquiridos en esta vida acompañarán a las personas en la próxima.
Esto nos recuerda que la educación no se limita a esta vida, más bien, tiene un significado eterno, permitiendo a las personas continuar su camino de aprendizaje durante el Milenio.
Aprendizaje continuo y oportunidades en el Milenio
El Milenio presenta oportunidades notables para el aprendizaje y el crecimiento. Con el Señor guiando personalmente a Su pueblo, el panorama educativo se enriquecerá con la presencia de seres resucitados, incluyendo profetas y otras personas justas que brindarán instrucción y apoyo.
Este entorno único fomentará una atmósfera de guía espiritual e intelectual intensificada. Además, la búsqueda del conocimiento y la verdad será primordial.
Como se indica en las enseñanzas de la Iglesia, una parte considerable del enfoque durante el Milenio estará en la obra misional, donde el evangelio será enseñado con poder a todas las personas.
Esto nos recuerda a la necesidad de una educación continua sobre el evangelio y los principios divinos, reforzando la idea de que el aprendizaje será un componente clave de la vida durante este tiempo.
Aliento de los líderes de la Iglesia
Los líderes nos han aconsejado constantemente sobre la importancia de la educación.
El presidente Gordon B. Hinckley instó a los jóvenes a procurar una educación y capacitación, mientras que el presidente Thomas S. Monson alentó a las jóvenes a buscar conocimiento y desarrollar sus talentos.
Esto refleja una comprensión más amplia de que la búsqueda de la educación es un esfuerzo de toda la vida, que se extiende hacia el Milenio y más allá.
Las enseñanzas de los líderes de la Iglesia resuenan con la creencia de que la educación equipa a las personas para cumplir con su potencial divino. A través del aprendizaje, los miembros de la Iglesia pueden prepararse para contribuir al establecimiento de Sion, donde el conocimiento y la rectitud florecerán.
Conclusión
Las enseñanzas de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días afirman que las personas continuarán su educación después de la Segunda Venida y a lo largo del Milenio.
Este período no solo facilitará la continuación del aprendizaje, sino que se enriquecerá con la presencia del Señor y de seres resucitados que guiarán e instruirán a Su pueblo.
La educación se ve como un aspecto vital del desarrollo personal y espiritual, enfatizando que la búsqueda del conocimiento es un principio eterno que mejora nuestro camino, hacía ser más como nuestro Salvador.
Mientras esperamos las bendiciones del Milenio, comprometámonos a buscar conocimiento y sabiduría en esta vida, sabiendo que nuestros esfuerzos tendrán un significado eterno.
Debemos esforzarnos por aprender, crecer y servir, preparándonos para las oportunidades divinas que nos esperan.
Fuente: Ask Gramps
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@masfe.org La Biblia no dice nada sobre los dinosaurios, pero el hecho de que no los mencione no quiere decir que no hayan existido. Y, si comprendemos lo que el apóstol Pedro quiso decir cuando dijo que “para el Señor un día es como mil años y mil años como un día”, entonces entenderemos que en realidad los 6 días de la creación no fueron días tal como nosotros los percibimos. Así que no te preocupes, la Biblia no contradice la existencia de nuestros milenarios amigos. #dinosaurios #creacion #biblia #sud #cristianos #sabiasque #genesis #opinion #curiosidades ♬ sonido original – Masfe.org