Encontrarás nacimientos en hogares, centros comerciales y campos vacíos. Algunos ocupan capillas enteras, mientras que otros son tan pequeños que caben en un dedal.
Sin importar su tamaño o forma, los nacimientos siguen siendo uno de los símbolos más queridos de la temporada navideña. También conocidos como pesebres, representan a los personajes clave de la historia del nacimiento de Cristo: María, José, los pastores, los sabios y el Niño Jesús.
Esta tradición sirve como un recordatorio duradero del verdadero significado y espíritu de la Navidad. Sin embargo, sus orígenes son humildes.
San Francisco de Asís creó el primer nacimiento en 1223. Quería combatir el creciente materialismo en las celebraciones navideñas.
Preocupado por el intercambio excesivo de regalos, organizó un nacimiento viviente en una cueva italiana para reenfocar la adoración en Cristo. En menos de un siglo, los nacimientos se volvieron parte de las celebraciones navideñas en todas las iglesias italianas.
Con el tiempo, las escenas estáticas reemplazaron a las vivientes. Los artesanos comenzaron a crear nacimientos más pequeños utilizando materiales como terracota, madera, cera y papel.
A medida que la tradición se extendió, los países añadieron sus toques únicos. En Polonia, el szopka utiliza edificios históricos como coloridos y detallados telones de fondo para el nacimiento.
Un factor que ayudó a popularizar los nacimientos fue la llegada de la peste negra. Los líderes religiosos los usaron para ayudar a las personas a encontrar esperanza durante la tragedia.
Al enfocarse en el humilde y pobre nacimiento de Cristo, los nacimientos hicieron que el Salvador se sintiera cercano. Se convirtieron en un motivo popular durante todo el año, no solo en Navidad.
Hoy en día, los nacimientos son tan únicos como las personas que los exhiben. La mayoría incluye el mismo elenco medieval de personajes.
María, José y el niño Jesús ocupan el lugar central, acompañados por pastores, animales, sabios y ángeles. También son comunes los nacimientos diseñados para niños y los adornos de árbol de Navidad con esta temática.
Muchos miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días valoran el espíritu que los nacimientos aportan. En Kirtland, Ohio, un lugar de importancia histórica para la Iglesia, una exposición anual de pesebres encanta a los visitantes.
Eventos similares se realizan en las iglesias de los Santos de los Últimos Días en todo el mundo. En 2014, los Santos de los Últimos Días establecieron un récord con la escena de nacimiento viviente más grande.
La historia del nacimiento, representada a través de hermosos pesebres y tradiciones queridas, nos invita a reflexionar sobre el nacimiento de Cristo. Nos ayuda a centrar nuestros corazones en la verdadera razón de la temporada: recordar Su amor, humildad y sacrificio.
Fuente: LDS Daily