En la tarde del martes, un avión Embraer 190 de Aeroméxico se accidentó poco después de despegar del Aeropuerto Internacional Guadalupe Victoria, en Durango. El vuelo AM2431, que se dirigía a la Ciudad de México, impactó contra el suelo minutos después de iniciar su ascenso. A pesar de la magnitud del accidente, los 103 ocupantes sobrevivieron y la mayoría sufrió heridas.
El gobernador José Aispuro explicó que el piloto intentó abortar el despegue, pero no logró detener la maniobra a tiempo y la aeronave salió de la pista alrededor de las 18:09 horas (hora de Brasilia). Las autoridades aeroportuarias atribuyeron el incidente a una tormenta con granizo.
Entre los pasajeros viajaba un pastor iraní que, al sentir el impacto, comenzó a orar en el nombre de Jesús para que el avión se detuviera, y el avión se detuvo.
Después, ayudó a mujeres y niños a salir entre el fuego y el humo, y se unieron en oración pidiendo protección. El pastor afirma que lo ocurrido fue un milagro y agradece a Dios por haberlos librado de una tragedia mayor.
Pasajeros, heridos y operativo de emergencia
En el avión viajaban 99 pasajeros y 4 tripulantes: dos pilotos y dos asistentes de vuelo. Entre los pasajeros había 88 adultos, 11 menores y dos bebés. La Secretaría de Salud estatal reportó que 85 personas sufrieron heridas, con entre 2 y 12 en estado crítico, y 49 permanecen hospitalizadas.
El Embraer 190, matrícula XA-GAL, salió de fábrica en Brasil en 2008 y tiene capacidad para 100 pasajeros. Aeroméxico lo incorporó a su flota en 2014 y, el día del accidente, ya había completado cuatro vuelos previos.
Tras el siniestro, brigadas de rescate y seguridad atendieron a los heridos y los trasladaron a hospitales cercanos. Aeroméxico reafirmó que su prioridad es cuidar a pasajeros y tripulación y confirmó su cooperación total con las investigaciones.
Fuente: Noticias Profeticas
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