¿Te imaginas el gran impacto que tiene la fe en el deporte? Para Leonardo “Maya” Vanegas, técnico deportivo de Cuenca Juniors, su fe es parte crucial dentro de su desempeño en la cancha.
Recientemente, Vanegas logró una de las victorias más remarcables dentro de su carrera, lo cual demuestra el impacto no solo de horas de preparación y entrenamiento, sino también de una vida centrada en Cristo.
Triunfo para el Cuenca Juniors
El Estadio Alejandro Serrano Aguilar en Cuenca se estremeció este pasado jueves 28 de agosto en un versus decisivo que enfrentó al Cuenca Juniors con el Barcelona de Guayaquil por la Copa Ecuador.
Luego de varios momentos emocionantes en la cancha, finalmente el Cuenca Juniors se consolidó como ganador en una histórica victoria de 2-0, eliminando al Barcelona de Guayaquil de la clasificación para la copa a pesar de ser uno de los equipos de renombre del país.
El exitoso desempeño del equipo de Cuenca Juniors estuvo al mando del técnico Vanegas, quien durante meses se encargó de dirigir las sesiones de entrenamiento y elaborar las estrategias que llevaron al equipo a la gloria.
La fe en la cancha
Además de su trabajo deportivo, Leonardo Vanegas es un fiel miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, proveniente de una familia pionera en la Estaca Cuenca.
Una de sus particularidades que lo destaca de otros técnicos deportivos es que no teme compartir su fe abiertamente mediante sus redes sociales. Su firmeza en el evangelio es un recordatorio de que la fe se vive en diferentes escenarios y tiene un fuerte impacto no solo en lo espiritual, sino también en lo temporal.
Para Leonardo Vanegas, su fe es fundamental en su preparación. Él reconoce que Dios es el mejor guía y, a medida que fortalecemos nuestro vínculo con Él, podremos recibir la orientación necesaria para desempeñar nuestros roles correctamente en donde estemos.
“Dios me da la oportunidad de seguir. Lo que vivimos no es casualidad, es causa y efecto del trabajo”, expresó Vanegas.
Una verdad espiritual
Detrás de esta emocionante experiencia deportiva, se encuentra un principio espiritual: Dios es el mayor instructor en todos los campos.
En el Libro de Mormón se nos relata una historia similar que afrontó el profeta Nefi. Como parte de su travesía hacia la tierra prometida, Nefi y su familia debían navegar por las grandes aguas rumbo al lugar que Dios había preparado para ellos. Pero había un problema, ¿cómo podrían atravesar las aguas?
Dios le indicó a Nefi que debía construir un barco y lo instruyó en cuanto a la manera en la que debía construirlo. Cuando sus hermanos se burlaron de él, Nefi reconoció el poder del Señor como su instructor y respondió:
“Si el Señor tiene tan grande poder, y ha hecho tantos milagros entre los hijos de los hombres, ¿cómo es que no puede enseñarme a construir un barco?”. (1 Nefi 17:51)
Si bien ambas experiencias ocurren en dos escenarios y épocas diferentes, la enseñanza es la misma. Ya sea que dirijas un equipo deportivo como Vanegas, dirijas una familia como Nefi, o solo dirijas tu propia vida, deja que el Señor sea el instructor que te enseñe cómo hacerlo.
Fuente: Sala de Prensa – Ecuador
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Que buena noticia, éxito totales para ese Santo de los últimos días.. P
Muchas gracias por tus palabras de apoyo Tito.