Poco después de que Justin Bieber lanzara su primer álbum, el cual presentaba a la canción “Baby” como su primer éxito, el joven cantante saltó a la fama debutando en los primeros puestos en varios países dentro de los medios musicales. Más adelante, Justin Bieber recibiría un regalo inesperado: un Libro de Mormón con dos testimonios escritos en su interior.
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Cuando la miembro SUD, Ashley Raymond, ganó las entradas para tener la oportunidad de conocer a Justin Bieber el 10 de julio de 2010, invitó a su amiga Sammie Parkinson a venir como su acompañante.
“Estábamos obsesionadas con Justin a esa edad”, expresó Parkinson con una sonrisa.
Antes de la reunión, Raymond y Parkinson se enteraron de que la gente solía darle un regalo a Justin Bieber cuando se reunían con él, así que comenzaron a intercambiar ideas juntas, preguntándose qué podrían darle a Justin Bieber que él todavía no tuviera.
Parkinson compartió lo siguiente:
“[Ashley y yo] siempre hemos sido fuertes en la Iglesia. Amamos este Evangelio. Tuve la bendición de crecer en una familia que siempre se esforzó por ser misionera incluso fuera del ‘campo misional’. Así que, teniendo ese ejemplo en nuestras vidas, pensamos que sería genial darle algo que desempeñó un papel tan importante en nuestras vidas.”
Es por eso que Raymond y Parkinson decidieron darle a Justin Bieber un Libro de Mormón con sus testimonios cuidadosamente escritos dentro de la portada.
“No recuerdo todos los detalles de lo que escribimos, pero básicamente dijimos que este libro le traería verdadera felicidad y daría más sentido a su vida. Pensamos que sería genial si él lo leyera y pudiese ayudar a difundir el Evangelio.”
En la reunión, Raymond y Parkinson sólo pudieron hablar con Bieber por un minuto, pero le entregaron el regalo a su guardaespaldas, quien prometió que le entregaría el Libro a la estrella del pop.
Sammie Parkinson también compartió:
“Nos gustaba bromear y decir que [Justin Bieber] sacó la canción “Pray” unos meses después porque él había leído el Libro de Mormón.”
Esta experiencia sólo ayudó a Parkinson a tener más valor y prepararse para futuras experiencias en las que compartiría el Evangelio. Recientemente, Sammie Parkinson participó en un viaje de servicio humanitario de un mes a Fiji, donde ella y su amiga fueron las únicas mormonas.
Las preguntas y las bromas se convirtieron en algo constante durante su estadía ya que muchos de sus compañeros voluntarios nunca habían oído hablar de los mormones. En una ocasión, un voluntario ateo quiso provocar un debate.
Sammie contó:
“No sabíamos cómo responder, ya que nunca habíamos estado en una situación en la que teníamos que defender nuestras creencias. Compartimos nuestro testimonio y mantuvimos la calma.”
Después de dejar Fiji, Parkinson recibió fotos de sus compañeros voluntarios con misioneros mormones, junto con notas como “Extrañamos a nuestras mormonas”. Dos voluntarias alemanas incluso recibieron una copia del Libro de Mormón después de que entablaron una conversación con las misioneras en Hawai. Estas voluntarios fueron a los Estados Unidos y se quedaron con Sammie Parkinson y su familia, y una de ellas mencionó:
“No he conocido a muchos mormones, pero son algunas de las personas más agradables que he conocido.”
Si bien Parkinson no sabe lo que puede resultar de estas oportunidades para compartir el Evangelio, ella sí sabe que cosas buenas pueden suceder por compartir su fe en cualquier circunstancia, ya sea en una reunión con una estrella del pop o con amigos al otro lado del mundo.
Sammie expresó finalmente:
“Sé que pasamos por sus vidas para presentarles el Evangelio. Si no es ahora, espero que algún día abran sus corazones y se den cuenta de la verdad del Evangelio.”
Este artículo fue escrito originalmente por Scott Taylor y fue publicado por desseretnews.com bajo el título de “When Justin Bieber Received a Book of Mormon”
