No deje que las finanzas venzan a su matrimonio

Por Tudie Rose

No creo conocer a una sola persona que no haya tenido problemas financieros en algún momento. Dado que las finanzas siguen siendo una de las principales causas de divorcio, es importante llegar a enfrentarse al estrés asociado con problemas monetarios en su matrimonio.

Muchas personas jóvenes adquieren una gran cantidad de deuda, en general por préstamos estudiantiles, pero a veces por tarjetas de crédito antes de casarse. Añádale una boda cara, una luna de miel en un crucero, y un bebé o dos en un par de años, y no pasará mucho tiempo hasta que estén hasta la coronilla y se dirijan a un tribunal de divorcio. Sin embargo, si tienen un plan desde el principio, se puede evitar una gran parte del estrés debido a las finanzas.

Pareja mormona reparando una bicicleta

Soy realista. Si no hay dinero, simplemente lo acepto. Las parejas tienen que sentarse y ser realistas sobre el dinero que entra y sale. Si existen los préstamos estudiantiles, entonces, tal vez la boda de Cenicienta no pueda darse, tal vez los anillos se conviertan en bandas simples. Hay prioridades de por medio. Si ustedes se van a casar (y permanecer casados), tienen que ser adultos responsables. La boda no hace al matrimonio, pero muy a menudo puede dar comienzo un largo camino de deudas.

Heber J. Grant, séptimo Presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormón), dijo:

“Si hay una sola cosa que traerá la paz y la alegría al corazón humano, y a la familia, es vivir dentro de nuestras posibilidades. Y si hay alguna cosa que agota, desalienta y descorazona es tener deudas y obligaciones que no podemos cumplir”. (Heber J. Grant, Gospel Standards (Normas del Evangelio) [Salt Lake City: Deseret Book Co., 1941]., P 111).

Al igual que con todo lo demás en un matrimonio, la responsabilidad financiera requiere trabajo en equipo. No es lo que “yo” quiero y lo que “mi cónyuge” quiere; es lo que “nosotros” queremos como pareja. A menudo, ustedes necesitan sentarse juntos para hablar de los objetivos y decidir juntos hacia dónde apunta su trabajo. Si los dos están trabajando por los mismos objetivos , entonces no les importará los sacrificios que se les presente. También es importante mantener un sentido del humor. Habrá días en que todo en la casa se malogre al mismo tiempo, y lo más probable será el mismo día en que un adolescente destroce el auto. Puede gritar y llorar o puede reír y planear.

Sentirnos libres de deudas-James E. Faust

Usted no necesita comprar cada juguete nuevo que se lance al mercado. Este es un gran problema con las parejas de hoy en día. Usted no necesita 140 canales de televisión. De hecho, si usted no puede pagar, no necesita la televisión en absoluto. Mi casa no tenía un lavavajillas cuando la compramos. Lavamos sin tenerlo durante muchos años. Después de que mi padre murió, mi mamá nos compró un lavavajillas portátil por Navidad. Duró un par de años y luego se fue al cielo de los lavavajillas. Murió la misma semana en la que se malogró nuestro televisor. No podíamos darnos el lujo de reemplazar ambos, así que tuvimos una reunión familiar. Le dije a mis hijos que teníamos que tomar una decisión: (a) lavar los platos y comprar  un nuevo televisor, o (b) leer más libros y comprar un lavavajillas. Obviamente, eligieron el televisor. Estoy segura de que todos pensaron que finalmente cedería y compraría un lavavajillas. Ahora estamos con el nido vacío, y yo aún no he comprado un lavavajillas. Simplemente no es tan importante en el esquema de las cosas.

Teníamos cinco meses de casados cuando compramos nuestra “primera casa”.  Eso fue en mayo de 1977 y aún estamos viviendo en la misma casa. Hicimos una ampliación a la casa, pero todavía estamos aquí. Vivir en esta casa nos permitió ayudar a los niños durante la universidad y servir en una misión SUD. Note que dije ayudar. Nuestros hijos han trabajado muy duro para pagar su educación y ser independientes, y es así como debe ser.

Antes de la crisis económica actual, hemos recibido mucha presión por parte de los amigos (y algunos familiares) para comprar una casa más grande, una más bonita. No tenía ningún sentido para nosotros incurrir en ese tipo de deuda por un hogar ya que nuestros hijos se irían en cuestión de algunos pocos años. Uno a uno, vimos personas que compraban casas y sabíamos que en realidad no podían pagarla. Cuando la recesión impactó, vimos cómo las personas se iban de cabeza en sus hipotecas. Algunos (muchos) perdieron sus hogares. Nosotros aún vivimos aquí. Incluso después de volver a financiar un par de veces para ayudar a los niños en su educación, nuestro pago actual de la casa es de $ 545 por mes, y sólo debemos menos de $ 30.000 en la hipoteca (básicamente el costo de un auto nuevo). En la ciudad donde vivimos, para alquilar un apartamento decente se tiene que pagar el doble de la cantidad de nuestro pago de la casa.

Antes de hacer la ampliación a nuestra casa, teníamos dos habitaciones y un baño. Hubo un momento en que tuvimos tres hijos en una habitación con camarotes. Por la noche, eran camas de pared a pared. Saqué la puerta de la habitación para dejar un espacio para un armario hacia donde la puerta normalmente se abría. Realmente estaba lleno; pero todos sobrevivimos hasta que pudimos darnos el lujo de ampliar nuestra casa. En un principio, íbamos a comprar una casa más grande, pero financieramente tenía más sentido quedarse aquí y añadir otro dormitorio, baño y sala de estar.

¿Me habría encantado una casa grande y una cocina moderna con un triturador de basura y  un lavavajillas? Por supuesto, me habría gustado mucho. ¿Yo la necesitaba? Para nada. Las cosas no hacen un matrimonio o una familia. Por otra parte, recuerdo esos días: la construcción de estantes adicionales en los armarios y el convertir cambiadores de pañales antiguos en organizadores de juguete con cariño. Me volví una maestra en encontrar espacio de almacenamiento, también me convertí experta en reciclaje o reutilización de artículos para ahorrar dinero. Una casa de muñecas antigua guardada en un viejo librero se convirtió en una cabecera y estante de artículos pequeños en un dormitorio. Las cestas viejas de la ropa se convirtieron en cajas de juguetes. Si había una manera de volver a utilizar algo para ahorrar dinero y/u organizar “cosas” se hacía. Nota al margen: ¡Fue muy divertido!  Siempre sentí una sensación de realización al terminar un proyecto, sobre todo porque nunca he tenido las herramientas adecuadas para hacer cualquier cosa.

Haga de su matrimonio un lecho de rosas-mormones

MarriageTo read all of Tudie Rose’s article on marriage, click the picture.

 

Mis hijos comieron hígado de res y cebollas creyendo que era “carne” durante años. La salsa de tomate, kétchup si lo prefiere) se diluía con un poco de agua. El jugo de naranja concentrado y congelado era mezclado con limonada concentrada congelada para hacer que dure más porque la limonada era más barata que el jugo de naranja. Se añadía un poco de leche a los huevos revueltos para que se extendieran. Los tubos de pasta de dientes no se descartaban hasta que mamá los hubiera cortado, abierto y raspado hasta la última gota de pasta de dientes de la parte interior del tubo. La marca barata de la tienda equivalente a Listerine se echaba sobre los pies de atleta (así como sobre el cuero cabelludo para la caspa) porque daba resultado y era barato. Un chorrito de un tipo de desodorante curaba el picor de las picaduras de mosquitos. Mamá sacaba los dientes flojos con un par de alicates. Los juguetes eran a menudo “encontrados en la autopista” (incluidos los triciclos y bicicletas) porque papá trabajaba como jornalero en la carretera.

Las finanzas no tienen que derrotar su matrimonio. Sean un equipo. Hagan un plan. Estén dispuestos a sacrificarse por los objetivos. Vivan dentro de sus medios. Mantengan su sentido del humor. Hay un viejo dicho que creo que se originó durante la Gran Depresión y realmente necesita ser transmitido a la siguiente generación: Utilícelo, úselo hasta que se gaste, confórmese, o prescinda de él.

Tudie RoseAbout Tudie Rose
Tudie Rose es madre de cuatro hijos y abuela de diez en Sacramento, California. La puede encontrar en Twitter como @TudieRose. Ella escribe blogs como Tudie Rose en http://potrackrose.wordpress.com. Ha escrito artículos para Familius. Usted encontrará un ensayo de Tudie Rose en lecciones de mis padres, Michele Robbins, Familius 2013, en http://www.familius.com/lessons-from-my-parents #. UYPhA6K.

Deja Tu Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *