El estudio de las Escrituras puede ser de gran valor para nosotros. La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (los “mormones”) consideramos la Biblia, el Libro de Mormón, Doctrina y Convenios, y la Perla de Gran Precio como sagradas escrituras. José Smith, el primer Profeta de la Iglesia, aconsejó:
“Escudriñen las escrituras- escudriñen las revelaciones que publicamos y pidan a nuestro Padre Celestial, en el nombre de su hijo Jesucristo, que manifieste la verdad ante ustedes, y si lo hacen sin siquiera una mirada de duda a Su Gloria, Él les responderá por el poder del Espíritu Santo. Sabrán entonces por ustedes mismos y no por nadie más. No dependerán más del hombre para adquirir conocimiento de Dios; y no habrá lugar a especulaciones. No, pues cuando el hombre recibe instrucciones de Él quien los creó, sabe que esto lo salvará” (José Smith, Enseñanzas del Profeta José Smith, tomado de la Guía de Estudio del Nuevo Testamento).
Pero francamente, no siempre es fácil entender el contenido de las Escrituras, especialmente cuando se lee por primera vez. A continuación algunas ideas que podrían servir de ayuda durante su búsqueda:
- <!–[endif]–>Antes de estudiar, pida a su Padre Celestial que le ayude a entender lo que haya de leer y a la vez que le ayude a encontrar los principios que serán más importantes para su vida en este momento.
- <!–[if !supportLists]–><!–[endif]–>No sienta la obligación de abarcar todo un libro o capítulo de una sola vez y rápidamente. En vez de eso, vaya despacio, deténgase y busque las verdades del presente, si algo le impresiona lealo una vez más y cuidadosamente.
- <!–[if !supportLists]–><!–[endif]–>La Iglesia SUD ha creado un extenso conjunto de pie de páginas y referencias a los libros canónicos. Estos pie de páginas incluyen el significado arcaico de las frases así como también ofrece referencias a otras escrituras relacionadas al mismo tema, al glosario Bíblico y al índice de temas (estas últimas dos se encuentran al final de la Biblia). Existe una versión de las Escrituas en el sitio oficial de la Iglesia http://www.scriptures.lds.org/es/
- <!–[if !supportLists]–><!–[endif]–>Compárelas y aplíquelas en su propia vida.
- <!–[if !supportLists]–><!–[endif]–>Visualice los relatos que encuentre en estos santos libros. Imagínese como se sentiría si fuera parte de dicho evento.
- <!–[if !supportLists]–><!–[endif]–>Escriba los pensamientos e inspiraciones que recibe a medida que vaya leyendo. Esto podría ser apropiado de llevarlo en su diario. Algunas personas llevan un “diario de las esrituras”, otros escriben en el margen de las páginas de sus escrituras. Algunas versiones electrónicas proveen espacio suficiente para hacer anotaciones.
- <!–[if !supportLists]–><!–[endif]–>Lealas una y otra vez. Estúdielas diariamente, aun cuando sea sólo por unos minutos. Y una vez que haya leído todo el libro, no se detenga, lea una vez más y otra. El crecimiento que se puede adquirir por medio del estudio personal de las Escrituras es inmenso.
El Presidente Gordon B. Hincley, quien había sido Profeta y Presidente de la Iglesia SUD hasta el día de su fallecimiento el pasado 27 de Enero del año en curso, dijo en una ocasión:
“Estoy agradecido por el énfasis que se le da al estudio de las Escrituras. Espero que para ustedes esto llegue ha ser, más que una obligación, algo gozoso de realizar. Llegarán a desarrollar amor por la palabra de Dios. Les prometo que a medida que lean sus mentes serán iluminadas y sus espíritus aliviados. Al principio les parecerá tedioso, pero llegará a ser una experiencia maravillosa lleno de pensamientos y palabras de cosas divinas”. (Gordon B. Hinckley, “Su luz interior” Liahona, Mayo 1995, 99, tomado de la Guía de Estudio del Nuevo Testamento).
Por Katie Parker el 31 de enero de 2008.