¡Sí puedes! Claro que eres bienvenido a la Iglesia y lo que hayas o estés pasando, tu apariencia, o cualquier otra cosa no son un impedimento para que asistas.
“Creo que si el Señor estuviera hablándoles directamente, la primera cosa que se aseguraría de que entendieran es cuál es su verdadera identidad. Mis queridos amigos, ustedes son literalmente hijos procreados como espíritus de Dios”, así lo enseño el presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Russell M. Nelson.
Y si somos valiosos hijos de Dios, ¿no crees que él te espera en su Iglesia? La respuesta es más que obvia.
Así que todavía estás tiempo, alístate y ven como eres a la Iglesia.
Si todavía no estás seguro de asistir, nosotros podemos acompañarte, escríbenos en los comentarios de esta publicación o envíanos un mensaje a cualquiera de nuestras redes sociales. Estaremos felices de ir contigo a la Iglesia.