La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha comenzado a enviar un número muy limitado de misioneros de tiempo completo a asignaciones fuera de sus países de origen.
Daniel Woodruff, portavoz de La Iglesia de Jesucristo, emitió la siguiente declaración el miércoles sobre el envío de misioneros a asignaciones fuera de sus países de origen:
“Desde que comenzó la pandemia de COVID-19, muchos misioneros han aceptado reasignaciones para servir en sus países de origen debido a los desafíos generados por el coronavirus. Agradecemos su fe y optimismo en estas extraordinarias circunstancias.
En este momento, la Iglesia ha comenzado a enviar un número muy limitado de estos misioneros a asignaciones fuera de sus países de origen. Es un proceso realizado cuidadosamente y con prudencia. Debido a la pandemia en curso, todos los viajes de los misioneros dependen de las condiciones locales y las restricciones en los transportes aéreos, y es posible que algunos misioneros no partan durante varios meses. Reconocemos que las condiciones pueden cambiar rápidamente y continuaremos monitoreando de cerca los eventos globales realizando los ajustes necesarios. La seguridad de nuestros misioneros y de aquellos a quienes sirven es nuestra principal prioridad.
Una vez programado el viaje, las oficinas de la misión notificarán a los misioneros que luego compartirán sus itinerarios con sus familias. Pedimos que los misioneros y sus familias no se comuniquen con la Oficina de Viajes de la Iglesia, las embajadas o los cónsules sobre sus planes o documentos de viaje. Al viajar, los misioneros recibirán instrucciones de seguir las pautas de salud pública establecidas para prevenir la propagación del COVID-19. Una vez que lleguen a sus nuevas asignaciones, los misioneros se pondrán en cuarentena durante el período requerido y luego participarán en actividades apropiadas a las circunstancias locales.”
Fuente: newsroom.churchofjesuschrist.org