Los misioneros de la Iglesia de Jesucristo son mundialmente conocidos por visitar los hogares de innumerables familias y compartir un mensaje que cambia vidas.
Sin embargo, aun así muchas personas se preguntan qué es lo que realmente hacen durante sus lecciones o visitas.
Aquí te comparto 6 cosas que los misioneros de la Iglesia de Jesucristo harán si decides reunirte con ellos.
1. Buscarán un lugar y horario que te sea cómodo para visitarte
Los misioneros siempre buscarán tu comodidad para reunirse contigo. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Los misioneros aman compartir el evangelio, ¡y están dispuestos a predicarlo en cualquier lugar!
Por videollamada, una visita en tu casa, en la casa de tus primos, o de tus amigos, en la Iglesia o en un parque, no importa. Para el Señor siempre hay tiempo y lugar.
Los élderes y las hermanas buscan cumplir con el último mandamiento que les dejó Jesucristo antes de ascender a los cielos:
“Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16:15).
2. Comenzarán con una oración
Los misioneros esperan que el Espíritu Santo haga parte de la reunión. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Tener el espíritu es sumamente importante durante una reunión o visita, especialmente si desean enseñar principios que solo el Espíritu puede confirmar en el corazón.
“El fruto del Espíritu es: amor, gozo, paz, longanimidad, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley” (Gálatas 5:22-23).
Para lograrlo, empezarán su visita haciendo una oración. No te asustes si lo hacen, es más, acompáñalos y pídeles que te enseñen a orar.
La oración es una herramienta que te permite comunicarte con el Padre Celestial en cualquier lugar y circunstancia. Es un poder que tenemos cuando nos sentimos solos o desalentados.
3. Te conocerán y serán muy amables
Los misioneros aman a todas las personas. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Los misioneros aman a todas las personas. Consideran a todos como hijos e hijas de un Dios, un amoroso Padre Celestial.
Por eso, querrán conocerte para demostrar su verdadero interés y de esta manera brindarte un mensaje de esperanza y paz.
Te harán preguntas sobre tu familia, tu trabajo, tus hobbies, y sobre cualquier otro tema que desees compartir.
Además, puedes confiarles tus dificultades o problemas, o incluso alguna crisis de fe que tengas a fin de que puedan ayudarte de la mejor manera. No te juzgarán.
Cada uno de ellos tienen orígenes y circunstancias diferentes, sin embargo, unidos en su amor por Jesucristo. Créditos: Scott G Winterton, Deseret News
Cada misionero es también una persona. No son perfectos, pero se esfuerzan por llegar a ser verdaderos discípulos de Jesucristo. Puedes preguntarles sobre sus familias, planes a futuro después de la misión, sus hobbies o sus platos de comida favoritos.
Probablemente, uno de ellos sea de otro país o de otra ciudad, entonces será una conversación sumamente entretenida.
Cada uno de ellos tienen orígenes y circunstancias diferentes, sin embargo, unidos en su amor por Jesucristo.
Recuerda que los misioneros buscan vivir el segundo gran mandamiento:
“Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (Mateo 22:39).
4. Compartirán un mensaje inspirador
Tienen un mensaje de esperanza y paz para ti. Imagen: La Iglesia de Jesucristo
El mensaje que compartirán contigo será único y, como vimos en un punto anterior, será especialmente destinado para ti. Sentirás que Dios mismo está respondiendo tus mayores preguntas, aquellas que has hecho y aquellas que no, pero que están en tu corazón.
Su mensaje siempre te traerán esperanza y paz, pues también son los frutos del Espíritu.
Si sientes que tu vida está de cabeza, que necesitas una mano o que simplemente ya no puedes continuar, es el momento perfecto para llamar a los misioneros y pedirles un mensaje.
“Hijo[a] mío[a], paz a tu alma; tu adversidad y tus aflicciones no serán más que por un breve momento; y entonces, si lo sobrellevas bien, Dios te exaltará; triunfarás sobre todos tus enemigos” (Doctrina y Convenios 121:7-8).
5. Responderán tus preguntas
Mientras hables con los misioneros, estás invitado a realizar cualquier pregunta que puedas tener. Imagen: La Iglesia de Jesucristo
Si tienes preguntas con respecto a un tema en específico o sobre la Iglesia de Jesucristo, siéntete libre de hacerlas.
Los misioneros estarán más que gustosos de dar lo mejor de sí para responderte.
Si bien los misioneros son jóvenes y tal vez no tengan todas las respuestas, sí te podrán ayudar a que tú las puedas averiguar por tu propia cuenta; te darán las herramientas necesarias para acercarte más a Dios.
A veces las respuestas están más cerca o son más simples de lo que podemos imaginar.
“Y el Señor Dios se vale de medios para realizar sus grandes y eternos designios; y por medios muy pequeños el Señor confunde a los sabios y realiza la salvación de muchas almas” (Alma 37:7).
6. Te preguntarán si pueden reunirse contigo de nuevo
Los misioneros siempre te respetarán. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
No hay primera sin segunda, ¡y más si se trata sobre tu felicidad!
Cuando terminen de compartir un mensaje o lección contigo, te pedirán regresar y continuar con los mensajes que tienen preparados para ti.
Si aceptas, las próximas reuniones tendrán una estructura similar, pero los temas irán variando.
Ten en cuenta que los misioneros de la Iglesia de Jesucristo te ven con los ojos de Dios. Siempre verán lo mejor de ti y el gran potencial que tienes.
Tú también eres progenie de Dios.
“Recordad que el valor de las almas es grande a la vista de Dios” (Doctrina y Convenios 18:10).
No te preocupes si ya no deseas recibirlos después de la primera reunión. Los misioneros respetarán tu decisión, no se molestarán contigo e incluso puedes continuar compartiendo tu amistad si lo deseas.
