Jesús Picón Huerta, joven peruano y misionero retornado de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, desapareció el lunes 26 de mayo tras partir rumbo al nevado Artesonraju, una de las cumbres más altas de la Cordillera Blanca en Perú. Desde entonces, no hay noticias sobre él ni sobre sus dos compañeros de expedición.

Jesús sirvió su misión en Lima, donde destacó por su amor al Salvador, su servicio desinteresado y su testimonio firme. Al retornar, decidió seguir su amor por las alturas e ingresó al Centro de Estudios de Alta Montaña (CEAM), donde se preparaba como guía profesional.

El grupo planeaba ascender por la cara noreste y la arista norte del Artesonraju. Lo último que se supo de ellos fue que habían comenzado el ascenso.

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Al no recibir más noticias, sus familiares dieron la alerta. Desde entonces, guías de Huaraz y la policía de alta montaña comenzaron la búsqueda. El acceso es muy difícil: llegar a pie a la zona puede tomar más de 15 horas. Por ello, los rescatistas y seres queridos han pedido con urgencia un helicóptero que agilice el rescate.

Junto a Jesús también desaparecieron Efraín Pretel, de Perú, y Edson Vandeira, de Brasil. Los tres eran estudiantes comprometidos, con un fuerte vínculo con las montañas y grandes metas por cumplir.

La familia de Jesús, junto a muchos miembros de la Iglesia, participa en ayunos y ruega con fe por su aparición con vida.

Al operativo se han sumado los reconocidos alpinistas Eneko e Iker Pou, quienes pidieron públicamente al gobierno que acelere el apoyo logístico. Insisten en que el tiempo es decisivo.

En Más Fe, nos unimos con esperanza y confianza en el Señor por Jesús, Efraín y Edson. También acompañamos a sus familias, a quienes los están buscando y a quienes toman decisiones clave. Creemos que el Señor está presente en cada esfuerzo y que hará posible que estos jóvenes regresen a casa.

Fuente: Facebook