El 29 de julio de 2024, la Primera Presidencia de la Iglesia de Jesucristo anunció que Brigham Young University creará una Facultad de Medicina.
A diferencia de muchas escuelas de medicina, esta nueva facultad “se centrará en la enseñanza con investigación en áreas de importancia estratégica para la Iglesia”, por lo que será una adición distintiva en lo que respecta a la educación en medicina.
Esto quiere decir que BYU, como una institución basada en la fe, se distinguirá del resto por tener un enfoque más que secular, un enfoque que se alinea con las creencias de la Iglesia.
La Iglesia de Jesucristo anunció que Brigham Young University creará una Facultad de Medicina. Imagen: Canva
Actualmente, en Estados Unidos existen aproximadamente 158 escuelas de medicina acreditadas que pueden otorgar títulos profesionales. De estas, son muy pocas las que mantienen una fuerte afiliación religiosa.
Entre ellas, destacan instituciones católicas como Loyola University Chicago, Creighton University, Georgetown University y Saint Louis University, seguidas por Belmont Belmont, y Loma Linda University.
Es importante destacar que, incluso dentro de este grupo selecto, el nivel de compromiso religioso varía considerablemente.
Existen instituciones que relacionan bien la religión y los estudios seculares. Imagen: Canva
Mientras algunas instituciones integran fuertemente la fe en su currículo y misión, otras simplemente mencionan su afiliación religiosa en documentos oficiales sin verse reflejada en su día a día.
Por otro lado, las escuelas de medicina que otorgan el título de Doctor en Osteopatía (DO) presentan un panorama diferente. Alrededor del 20-25% de estas escuelas tienen algún tipo de afiliación religiosa. Entre ellas se encuentran Liberty University, Baptist Health Sciences University y Duquesne University.
El rol de la fe en la educación
Este nivel de integración religiosa es poco común entre las escuelas de medicina, sin embargo, se espera que BYU lo refleje. Imagen: Canva
Instituciones como Loma Linda University, de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, integran profundamente su fe en la malla curricular y la vida estudiantil en el campus.
Este nivel de integración religiosa es poco común entre las escuelas de medicina, sin embargo, se espera que BYU lo refleje.
La integración de la fe en la formación médica plantea interrogantes sobre cómo se abordarán temas controvertidos como el aborto, la anticoncepción y los cuidados en la etapa final de la vida.
Mientras algunas instituciones religiosas tienen posturas claras sobre estos temas, otras optan por un enfoque más inclusivo, respetando las diversas creencias de sus estudiantes y futuros pacientes.
La formación de médicos diferentes
Estas instituciones buscan cultivar en sus estudiantes un profundo sentido de propósito y servicio. Imagen: Canva
Más allá de las polémicas, el verdadero valor de las escuelas de medicina basadas en la fe radica en su capacidad para formar médicos compasivos, conscientes y competentes.
Estas instituciones buscan cultivar en sus estudiantes un gran sentido de propósito, empatía y servicio, inspirándolos a brindar una atención médica integral que vaya más allá de los aspectos clínicos.
Programas como “Medicina Centrada en el Paciente” de Loyola University demuestran cómo la fe puede integrarse en la educación médica para abordar preguntas sobre el sufrimiento, la pérdida y la condición humana.
La necesidad de una educación médica basada en la fe
No solo se trata de la atención al paciente y su bienestar físico, sino de su salud emocional y espiritual. Imagen: Canva
La creciente demanda de las escuelas de medicina basadas en la fe es evidente en la gran cantidad de solicitudes que reciben.
Loma Linda y Loyola, por ejemplo, reciben miles de solicitudes de admisión cada año por lo que están significativamente saturadas y refleja la existencia de un público que está dispuesto a buscar una formación médica que también tenga un fundamento de valores religiosos.
Se desea brindar un enfoque holístico de la atención al paciente, abordando el bienestar físico, emocional y espiritual. Esto también se alinea con el creciente reconocimiento de la importancia de la salud mental y la atención espiritual en los resultados generales de salud.
A medida que la escuela de medicina de BYU tome forma, será interesante observar cómo equilibra su misión religiosa con las demandas de la educación médica moderna.
La institución tiene el potencial de convertirse en un ejemplo líder de cómo la fe puede enriquecer la formación de los futuros profesionales en la medicina.
Fuente: Deseret News
