Lo que comenzó como un divertido campamento de aventuras para un grupo de Hombres Jóvenes, se convirtió en un momento decisivo y único en la vida.
Alrededor de 12 jóvenes entre los 11 y 14 años, de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, acababan de pasar unos días en el desierto de High Uintas, Utah, cuando un hombre se les acercó y les pidió ayuda. Su perro había resultado herido y no podía bajar de la montaña.
Los jóvenes no dudaron en ayudarlo. Recolectaron troncos y una lona que dejó otro campamento e hicieron una camilla improvisada.
Durante más de 6 kilómetros, los jóvenes se turnaron para llevar al perro en la camilla.
Fue un largo viaje mientras trepaban árboles y rocas. Se agotaron e incluso se quedaron sin agua. Sin embargo, nunca se dieron por vencidos, siguieron hasta el final.
Uno de los líderes del viaje, Jeff Eaves, dijo:
“Estos jóvenes ya llevaban su propia carga, sus mochilas. No obstante, estaban dispuestos a llevar la carga de otra persona, aunque el camino era pedregoso, empinado y difícil. No dejaron de ayudar cuando se volvió aún más difícil y agotador”.
Anteriormente, en el campamento, los jóvenes recibieron lecciones sobre el servicio. Así que, estaban listos para ayudar.
Después de toda la experiencia, Spencer Brown, uno de los hombres jóvenes, le dijo a KSLTV:
“Cuando alguien te pide ayuda, ayudas. No se ponen excusas. Va a ser difícil, pero tienes que intentarlo. Tienes que creer que puedes”.
Fue una experiencia que los jóvenes recordarán toda su vida.
Esta es una traducción del artículo que fue escrito originalmente por Kaitlyn Hall y fue publicado en LDS Daily con el título «Selfless Young Men’s Group Rescues Dog, Carries Him to Safety«.
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