Un grupo de miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Guatemala se reunieron para empacar canastas de alimentos que fueron donados a 500 familias en extrema pobreza con niños o adolescentes con discapacidades físicas, intelectuales, sensoriales o auditivas.
“Estos alimentos serán como maná de los cielos para nuestros hermanos”, declaró el élder Brian K. Taylor, presidente del Área de Centroamérica mientras empacaba los alimentos junto a los otros Santos de los Últimos Días.
A esta actividad de servicio asistió la Licenciada Sabrina Granados, directora de la Dirección de Atención a Niños, Niñas y Adolescentes con Discapacidad de la Presidencia de la República de Guatemala. Ella expresó su gratitud por esta gran ayuda y declaró:
“La donación de alimentos será de mucha ayuda para las familias, que podrán solventar parte de sus necesidades”.
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