Aunque la pandemia ha paralizado casi todas las actividades en el mundo, los miembros de la Iglesia de Jesucristo no han cesado de realizar servicios por el prójimo, en especial, por los más necesitados. Tal es el caso de los Santos en Paraguay que continuan donando su sangre para los pacientes en los hospitales públicos del país.
A pesar de que las personas temen salir de sus hogares por la actual pandemia generada por el COVID-19, los miembros de la Iglesia de Jesucristo llegaron hasta los centros de reuniones en Ñeemby y Lambare para donar su sangre de manera voluntaria y confiando en que el Señor los cuidaría en su intento por ayudar al prójimo.
Esta actividad de servicio y amor fue gracias a la coordinación del élder Robert Rivarola, líder regional de la Iglesia de Jesucristo y médico al servicio del gobierno en Paraguay, junto con la Dra. Elsi de Salinas, Directora del Centro Nacional de Servicios de Sangre (CENSSA), quien declaró:
“Fue romper con el miedo, porque la gente tiene miedo de salir de sus casas por la contaminación que puede haber. Nosotros tomamos todos los recaudos para que la gente esté segura. Se unieron el liderazgo con las ganas de servir y ayudar de la gente de la Iglesia, esta es una Iglesia muy querida y admirada por nuestra Institución.
Estamos muy agradecidos, se une todo lo que nosotros decimos en donación voluntaria; altruismo, voluntariado y servicio. Porque sin esto, nosotros no podríamos tener la sangre, porque hasta ahora no se pudo fabricar y lo necesitamos porque es esencial para nuestros pacientes. El donante es un héroe, porque dona con altruismo y voluntariado, no sabe para quién donó pero sabe que salvó una vida”
Cabe resaltar que esta donación de sangre siguió todos los protocolos de seguridad que se han establecido frente a la pandemia.