Antes de una importante reunión de líderes católicos sobre el futuro de su iglesia, el Papa Francisco ha demostrado una vez más que está lleno de sorpresas.
Según The Washington Post, en una carta publicada a principios de julio, el Papa señaló inesperadamente que está de acuerdo con la posibilidad de que los sacerdotes bendigan las uniones entre personas del mismo sexo.
También indicó que se podría investigar más sobre la ordenación de mujeres sacerdotes.
Con relación a las bendiciones para las parejas del mismo sexo, el Papa escribió:
“No podemos ser jueces que solo niegan, rechazan y excluyen. Por ello, la prudencia pastoral debe discernir adecuadamente si hay formas de dar la bendición, solicitadas por una o varias personas, que no transmitan una idea equivocada de un matrimonio. Puesto que, cuando se pide una bendición, se está solicitando la ayuda de Dios”.
¿Qué ha dicho el Papa sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo?
Los nuevos comentarios del Papa pueden encajar con sus reflexiones pasadas sobre limitarse a juzgar, pues, hablando sobre la idea de condenar a los sacerdotes homosexuales en 2013, dijo: “¿Quién soy yo para juzgar?”
Sin embargo, esto contradice sus recientes críticas a los líderes católicos en Alemania que ya están bendiciendo las uniones del mismo sexo.
The Washington Post informó:
“El Papa Francisco ha reprendido a los líderes católicos de Alemania. Además, bromeó con el jefe de su conferencia episcopal el año pasado diciendo que Alemania ya tenía una iglesia protestante diciendo: ‘No necesitamos dos’”.
Unos meses más tarde, el Papa le dijo a The Associated Press en enero que, aunque la homosexualidad no debe ser criminalizada, sigue siendo pecaminosa a los ojos de la iglesia:
“No es un crimen, pero sí es un pecado”.
Las enseñanzas católicas sobre el matrimonio
The Associated Press informó que, en general, el Papa Francisco ha adoptado una actitud acogedora hacia la comunidad LGBTQ, incluso manteniendo las enseñanzas católicas tradicionales sobre el matrimonio.
Según Catholic News Service, en la carta recientemente publicada, el Papa no le ha pedido a la iglesia que reconsidere su posición sobre el matrimonio, en cambio, afirma que, a ojos de la iglesia, el matrimonio es una:
“Unión exclusiva, estable e indisoluble entre un hombre y una mujer, naturalmente predispuestos a concebir hijos”.
El Papa señaló en su carta lo siguiente:
“La Iglesia evita todo tipo de rituales o sacramentos que puedan contradecir esta convicción e impliquen que se reconozca como matrimonio algo que no lo es”.
En otras palabras, el Papa no está pidiendo que se adopte totalmente el planteamiento alemán de bendecir las uniones entre personas del mismo sexo, en cambio, habla de cómo tales bendiciones pueden ser a veces una expresión apropiada de caridad pastoral.
¿Qué es el Synod on Synodality?
La nueva carta del Papa fue escrita a un grupo de líderes eclesiásticos teológicamente conservadores que le habían pedido que afirmara que la iglesia sigue oponiéndose a la homosexualidad y a las sacerdotisas.
En lugar de hacer lo que le habían pedido, reflexionó sobre la posibilidad de un cambio.
The Associated Press explicó:
“La respuesta de Francisco a los cardenales … marca un cambio de la actual posición oficial del Vaticano.
Los cardenales jubilados, que tienen una relación polémica con el Papa Francisco, probablemente buscaban fomentar el debate y aumentar la angustia ante una reunión de tres semanas en el Vaticano sobre el futuro de la iglesia”.
La reunión, llamada Synod on Synodality, Sínodo sobre la Sinodalidad, en español, comienza hoy.
The Washington Post informó el gran temor, debidamente fundamentado, que los conservadores de la iglesia católica tiene:
“Los conservadores temen que el proceso sinodal abra lo que ellos ven como una caja de Pandora, llevando eventualmente a un cambio sin precedentes en el celibato sacerdotal, la aceptación de la homosexualidad y la ordenación de las mujeres en una iglesia históricamente patriarcal”.
Sin embargo, el Papa Francisco y otros líderes del Vaticano han instado a los detractores a calmarse, señalando que la reunión es una oportunidad para que los católicos de todo el mundo se conozcan entre sí y reflexionen sobre su fe, no para promulgar propuestas controvertidas.
Fuente: Deseret News