“Porque los labios de la mujer extraña destilan miel, y su paladar es más blando que el aceite; mas su fin es amargo como el ajenjo, agudo como espada de dos filos” (Proverbios 5:3–4).
Pregunta
En la actualidad, parece que las relaciones y matrimonios se han vuelto descartables.
Es como si a las personas no les importara herir los sentimientos de quienes dicen amar. Se olvidan de su pareja por “alegrías pasajeras”. Quisiera saber si Dios castiga la infidelidad, ¿Qué dicen las Escrituras al respecto?
Respuesta
La Biblia aborda el adulterio (infidelidad) de manera diferente en el Antiguo y en el Nuevo Testamento.
Antes, en la época del Antiguo Testamento, las personas que cometían adulterio eran castigadas con la muerte:
“Y si un hombre comete adulterio con la esposa de otro, el que cometa adulterio con la esposa de su prójimo, indefectiblemente el adúltero y la adúltera serán muertos” (Levítico 20: 10).
Lo mencionado, se establecía según las leyes que se seguían en Israel en ese entonces. Es importante señalar que el castigo era el mismo para ambas partes implicadas en el acto del adulterio. El hombre y la mujer infieles, debían recibir el castigo de la muerte.
Esto era para mantener a la comunidad de Israel apartada de otras que tenían costumbres morales diferentes, tales como los cananeos que eran conocidos por su libertinaje sexual y más (Levítico 20: 22-24).
Pero, estas leyes aplicaban solo en ese tiempo.
En el Nuevo Testamento, las cosas cambian debido a las enseñanzas de Jesucristo.
Jesús predica sobre el perdón y el amor. De hecho, hay un relato muy conocido en Juan 8 sobre el encuentro de Jesús con una adúltera sorprendida en el acto, que los fariseos arrastran ante Él.
Los fariseos estaban listos y deseosos de imponer un castigo despiadado a la mujer (pero no al hombre), y Jesús los reprende recordándoles que son tan pecadores como ella. Luego, cuando todos se han alejado de la escena, le pregunta:
“Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te ha condenado?
Y ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más” (Juan 8:10-11).
Jesús está lleno de gracia y verdad (Juan 1:14). Le dice a la mujer que deje de cometer adulterio y la perdona. Este es un cuadro maravilloso de Juan 3:17:
“Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él”.
Si bien, hoy en día, no se especifica en la Biblia un castigo para quien cometió adulterio, se sabe que el pecado sexual es una ofensa cometida contra el propio cuerpo:
“Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa está fuera del cuerpo; pero el que fornica, contra su propio cuerpo peca” (1 Corintios 6: 18).
Por lo tanto, trae consigo su propio amargo castigo, cuyas consecuencias espirituales son aún más serias. Sin embargo, gracias a Jesucristo, el pecado del adulterio no está exento de la promesa de perdón. Esto siempre y cuando, la persona que pecó, desee comenzar de nuevo y se arrepienta sinceramente.
“Y el que mirare a una mujer para codiciarla negará la fe, y no tendrá el Espíritu; y si no se arrepiente, será expulsado.
No cometerás adulterio; y el que cometa adulterio y no se arrepienta, será expulsado.
Mas al que haya cometido adulterio, y se arrepienta de todo corazón, y lo deseche, y no lo haga más, lo has de perdonar.
Mas si lo hiciere otra vez, no será perdonado, sino que será expulsado” (Doctrina y Convenios 42: 23 – 26).
Fuente: Gotquestions.org
*Portada: Imagen de Canva
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Casi siempre que se habla de este tema,es como si fuese obvio la representación de una mujer, incluso la imagen de Jesús perdonandola, quien es más adúltero el hombre o la mujer? Jesucristo vi o a redimir a perdonar a cambiar vidas y conductas sin importar el genero. El juicio es de Nuestro padre Celestial no de nosotros.