Del creador de las películas Santos a de los Últimos Días más icónicas (“17 Milagros”, “El milagro de Cokeville” y “El predicador luchador”) llega “Escape from Germany”.
Esta nueva película dirigida por T. C. Christensen cuenta la historia de cómo 79 misioneros estadounidenses escaparon milagrosamente de Alemania justo horas antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial.
La película está basada en hechos reales y comparte las experiencias de valentía, dedicación y fe que te dejarán sin aliento.
Desde la creación del libreto hasta la financiación y el rodaje, hacer una película de esta magnitud no fue fácil de lograr. El rodaje incluso requirió un viaje a Budapest, Hungría, donde una gran estación de tren histórica proporcionó el escenario perfecto para el rodaje de la película.
“Escape from Germany” se estrenará el 11 de abril en la sala de cines de Estados Unidos.
En una entrevista para LDS Living, T. C. Christensen explicó los pormenores que sucedieron durante la película.
Un milagro en el set de grabación
Mientras la película se grababa en Budapest, T. C. expresó que trabajó con una compañía de producción en Budapest que les ayudó a obtener acceso a las estaciones de tren y otras necesidades que surgieron al filmar.
Antes del viaje, T. C. les había enviado el pago a la compañía de producción, pero cuando llegó con el elenco y el equipo, el dinero aún no se había recibido y la compañía de producción no procedería sin él.
Aquello causó un retraso en el rodaje que sería problemático y costoso.
“Nos sentíamos frustrados y no sabíamos qué hacer, así que asistimos a la Iglesia el domingo en Budapest. Una de las personas con las que hablamos era un miembro de la Iglesia que no era de Budapest, pero que había servido ahí y estaba de visita.
Él escuchó sobre nuestro problema y se ofreció a ayudarnos. Nos dijo: ‘Tengo una forma de hacer que llegue el dinero al país y solucionar lo que les ha sucedido’. Solo tomó unas horas y ¡listo!, teníamos el dinero y pudimos filmar. Fue un milagro”.
2. Sobre la inversión para la película
Uno de los mayores desafíos de crear “Escape from Germany” fue conseguir el financiamiento necesario para una película tan compleja.
“Cuando caminas por los pasillos de un cine, te encuentras con películas que cuestan, yo diría, entre 30 y 200 millones de dólares. Nuestras películas tienen que hacerse por menos de un millón”.
T.C. comentó que, ocasionalmente, la gente se le acerca y le ofrece invertir en futuras películas. Cuando eso sucede, siempre anota el nombre de la persona y lo archiva cuidadosamente.
Justo cuando estaba a punto de comenzar “Escape from Germany”, T.C. se dio cuenta de que no tenían suficiente dinero. Mientras contemplaba qué hacer, recordó a un hombre que había ofrecido invertir, pero al buscar en sus archivos, T.C. se dio cuenta de que no podía encontrar el nombre.
“Me sentí mal al respecto y decepcionado de mí mismo por no hacer lo mismo de siempre y anotarlo”.
Previamente, T.C. había acordado viajar desde su casa en Utah para discursar en una estaca de Santos de los Últimos Días en Dallas, Texas.
Mientras estaba sentado en el estrado, entró una mujer a quien T.C. reconoció de inmediato: era la esposa del hombre que le había ofrecido invertir en una de sus películas.
T.C. obtuvo la información que necesitaba y finalmente obtuvo el dinero necesario para hacer la película.
“La casualidad de eso es simplemente demasiado sorprendente. Si hubiera ido [a Dallas] un mes después, habría sido demasiado tarde. Todo fue simplemente perfecto”.
3. Los extras especiales
La película incluye muchos actores de fondo, por lo que T.C. buscó personas especiales para esos roles.
“El 85 % de los extras en esta película son descendientes de los misioneros reales a los que realmente les sucedió esto. Me encantó tenerlos en el set, los presentamos cada mañana, me hacían llorar cada mañana porque estaban allí para honrar a su antepasado, y traían un espíritu al set que nos ayudaba a recordar que estamos contando una historia de la vida real”.
“Escape from Germany” es una película apta para toda la familia que inspirará a los futuros misioneros y a todos nosotros a servir en la obra que Dios y que Él proveerá para Sus siervos.
Fuente: LDS Living