El año pasado se estrenó en Netflix la serie documental titulada “Sé dócil: reza y obedece” (Keep Sweet: Pray and Obey) que causó polémica entre los Santos de los Últimos Días.
Existe una gran desconcierto pues las personas han estado confundiendo a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días con la secta fundada por Rulon Jeffs, la cual fue liderada posteriormente por su hijo, Warren Jeffs.
Warren se volvió sumamente conocido en la esfera estadounidense por los diversos crímenes y atrocidades que cometió, en los cuales se vieron envueltas muchas mujeres y menores de edad.
Ahora, tal vez te preguntes: ¿por qué la confusión?
Esto se debe a que el nombre de la secta es bastante parecido con el nombre de la Iglesia y sus miembros también son conocidos y llamados por el apodo “mormones”.
Warren Jeffs se casó con aproximadamente 78 mujeres, entre las cuales había menores de edad. Imagen: Netflix
La secta se llama “La Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”.
Mientras que el nombre de la verdadera Iglesia que restauró José Smith es: “La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”.
¿Muy parecidos verdad?
¿Cómo surgió la secta?
Rulon Jeffs y su hijo, Warren. Imagen: Netflix
La secta liderada por Warren Jeffs, la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, es una organización que se creó hace muchos años, cuando La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días prohibió la práctica del matrimonio plural en el siglo XIX.
De esta manera, la Iglesia de Jesucristo decidió excomulgar a los miembros que continuaban practicándola.
La secta fundamentalista se fundó con su padre, Rulon Jeffs, y, luego de su muerte, Warren asumió el liderazgo.
Funeral de Rulon Jeffs junto a sus esposas. Imagen: Netflix
A diferencia de su padre, Warren ejerció un control y dominio mucho más rígido sobre sus seguidores, siendo conocido principalmente por promover la práctica de la poligamia y los matrimonios forzados.
En muchos de estos matrimonios, se vieron envueltas menores de edad.
La secta alegaba seguir los principios fundamentales de la Iglesia original, sin embargo, sus acciones y prácticas estaban en discordancia y también se alejaban del evangelio que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días predica.
Una historia controversial
Warren Jeffs siendo arrestado para responder por sus crímenes. Créditos: Ethan Miller
El liderazgo autoritario de Jeffs atrajo muchas críticas y polémicas, debido a que él ejercía un intenso control sobre todos los aspectos de la vida de los miembros de la secta, imponiendo reglas estrictas y castigos para quien desobedeciera.
Esta secta llamó la atención de los medios de comunicación y de las autoridades gubernamentales, iniciando investigaciones y terminando en procesos judiciales.
Su historia es un ejemplo preocupante del abuso de poder y manipulación religiosa, que sirve como recordatorio de los peligros potenciales asociados a líderes carismáticos que ejercen control absoluto sobre sus seguidores.
No confundirse
Los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días no comparten ni acogen alguna práctica de dicha secta. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
La secta fundamentalista es una organización mucho menor y no tiene vínculo alguno con La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Tanto los miembros como las autoridades generales de la Iglesia de Jesucristo no comparten ni acogen las prácticas de dicha secta y rechazan cualquier tipo de enseñanza que se oponga al evangelio del Salvador, que vaya en contra del albedrío de una persona, ejerza injusto dominio y atente contra la vida de alguien.
*Imagen de portada propiedad de Ark Media And Participant
Fuente: evangelho_restaurado.
