Para muchos, Walker Lyons, de Folsom, California, es considerado un deportista con un futuro brillante en el fútbol americano.
Desde la escuela secundaria, Lyons recibió 35 invitaciones con becas deportivas a las diferentes universidades de Estados Unidos debido a su increíble talento.
A pesar de lo que todo esto representa para su carrera profesional en el fútbol americano, Walker Lyons tomó la decisión de seguir primero al Señor al servir una misión de tiempo completo para La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Walker fue asignado a servir en Noruega y, después de completar su capacitación misional remota, junto a su familia viajó casi 1,200 kilómetros para ingresar al Centro de Capacitación Misional de Provo el 8 de febrero.
Su padre, Tim Lyons, expresó para Church News:
“Él fue escogido como un de los mejores deportistas en el país; es famoso en la localidad donde vivimos, pero en Noruega, no será así. Lo llenará de humildad y tendrá que depender del Espíritu Santo y del Padre Celestial para salir adelante; él necesita eso”.
Walker Lyons pudo resumir con la letra de su himno favorito la razón por la que eligió el servicio misional:
“Tú me has dado muchas bendiciones, Dios; por eso quiero dar también”.
Él compartió para Church News lo que eso significaba:
“Lo cierto es que se he me ha dado mucho y poder retribuir aunque sea un poco es algo que siempre quise hacer… [La misión] es una forma diferente de dar, mostrar gratitud y agradecimiento a mi Padre Celestial y a Jesucristo, [Ellos] son la razón principal de todo”.
Lyons, al igual que muchos hombres y mujeres Santos de los Últimos Días, voluntariamente decidió dejar atrás las oportunidades académicas y atléticas para compartir el Evangelio con aquellos que desean acercarse a Dios y a Su Hijo.
“Se presentaron muchas oportunidades diferentes, estando en este entorno aún puedes difundir el Evangelio sin ir a la misión. Sin embargo, todo se redujo a la decisión que tomé cuando era niño y quise adherirme a ello”.
A pesar de lo que podría pasar en el futuro con las becas e invitaciones de las universidades, Lyons nunca vaciló en su deseo de servir en una misión.
“Tengo plena fe en que Dios hará que todo salga de la manera en que debería si lo pongo a Él y a Su Hijo primero, y eso es exactamente lo que voy a hacer”.
Fuente: Church News