Cuando el Élder Bednar me enseñó a tomar notas de la forma correcta

Élder Bednar

En noviembre de 2011, tuve la oportunidad de formar parte de un grupo de apenas 60 misioneros en la Misión Brasil Cuiabá que escuchó al Élder David A. Bednar durante aproximadamente 3 horas.

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Escribí lo siguiente en mi diario:

“Hoy escuché a un apóstol hablar para nosotros (…) Sentí al Espíritu ardiendo en mi corazón durante cada segundo. Anoté muchas cosas así que no voy a colocar aquí todo lo que habló, pero escribiré mis sentimientos”.

La frase clave aquí es “escribir mis sentimientos”.

La forma correcta

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Ese día, cuando el Élder Bednar subió al púlpito habló sobre una tradición incorrecta que tenemos en la Iglesia, principalmente en las conferencias generales y al escuchar a los siervos del Señor.

Por lo general, estamos tan entusiasmados que escribimos cada frase que el discursante dice por temor a perdernos algo. Después, vamos a casa y nunca más leemos lo que anotamos.

El Élder Bednar nos invitó a escribir no lo que estaba hablando, sino lo que el Espíritu Santo nos estaba diciendo a cada uno de nosotros a través de sus palabras.

El resultado

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Al seguir su consejo tuve experiencias que nunca antes tuve en mi vida. Escribí:

“Seguramente puedo decir que enseñó de la forma que necesitamos, según la voluntad de Dios, porque sus palabras despertaron en mí el deseo de cambiar”.

La mejor parte era que, al prestar atención a lo que el Señor hablaba directamente para mí, sabía exactamente qué hacer para ser un misionero más eficaz.

Tal vez eso sea obvio para muchas personas, tal vez no. Quizás ya sepamos cómo tomar notas o escuchar al Espíritu durante un discurso de un siervo ungido del Señor, pero no queremos escuchar en el fondo, sabemos que todo lo que viene del Señor nos invita a cambiar.

Espero que podamos escuchar al Presidente Russell M. Nelson con el corazón abierto a las invitaciones del Señor, quien te hablará directamente a través de sus palabras.

Esta es una traducción del artículo que fue escrito originalmente por Robson Lampert Severo y fue publicado en maisfe.org con el título “Quando o Élder Bednar me ensinou a fazer anotações da maneira correta”.

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