Se retiró del golf, pero gracias al templo volvió y clasificó a un aclamado torneo

golf; Cecilie Lundgreen

Aunque en el 2017 había puesto fin a su carrera en el golf por una serie de malos resultados y cansancio, el Padre Celestial le tenía reservada una bendición especial.

Esta es la historia de Cecilie Lundgreen, exgolfista profesional de Noruega y miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, quien volvió a disfrutar de su deporte favorito 7 años después, gracias a su perseverancia en el evangelio.

El evangelio, su título más valioso

Cecilie Lundgreen

La perspectiva de su carrera cambió tras descubrir la Iglesia. Imagen: Norsk Golf

Cecilie demostró desde temprana edad su talento innato en el golf al conquistar campeonatos noruegos junior y nacionales.

Así que no tardaría, en 1998, en convertirse en profesional, disputando varios tours, incluido el Ladies European Tour, el Swedish Golf Tour y el South African Women’s Masters. 

Pero, a lo largo de su brillante trayectoria superior a los 40 años, ningún acontecimiento marcaría su vida tanto como conocer el evangelio de Jesucristo.

“Todo cambió”, explicó sobre su conversión, en el año 2002, a Deseret News. “Nunca volví a luchar por ser la número uno del mundo, como quería. Obtuve una perspectiva totalmente diferente sobre jugar al golf y cómo hacerlo”.

El nuevo enfoque de Lundgreen sería aceptar la voluntad del Señor:

“Él tomó a una niña de un pequeño pueblo en Sarpsborg y logró hacer algo conmigo. Él usa a todos. Mientras seamos dignos, Él nos tomará y nos usará para Su bien”.

Entrar y salir del retiro

Cecilie Lundgreen

Lundgreen decidió dedicarse al servicio al prójimo tras su retiro. Imagen: Norsk Golf

Los resultados dejaron de acompañarle y el desgaste físico era cada vez más demandante. Aunque el reconocimiento del mundo ya no era importante para ella, también sintió que, tras más de 4 décadas, era el momento del adiós.

Durante los casi 7 años alejada de las competiciones profesionales, se entregó al servicio completo a su prójimo. Fue nombrada administradora del Borrregaard Golf Club en Noruega, ayudando a las mujeres jóvenes de su país en forjar una carrera en este deporte, y también inició su camino como codirectora de una organización sin fines de lucro que ayuda a brindar asistencia médica a personas en Zimbabwe.

Era feliz ofreciendo sus dones en favor de los demás, pero —así como sintió en el 2017 que debía culminar su carrera como golfista profesional— también llegó a ella una nueva impresión de que podía sumar un nuevo hito en su deporte favorito.

Pero sabía que necesitaba la guía del Padre Celestial si estaba destinada a volver.

Cecilie Lundgreen

Cecilie ha representado internacionalmente a su país. Imagen: Norsk Golf

Primero, oró para saber si debía o no comenzar a jugar competitivamente otra vez.

Porque Lundgreen tampoco pensaba abandonar sus nuevas responsabilidades fuera de la cancha. Así que no sabía cómo podría encontrar tiempo para practicar y prepararse para una competencia tan importante como el Open.

Así que se arrodilló y pidió al Señor que magnificara el tiempo que podía dedicar al golf.

“Le dije: ‘Sabes que no soy perezosa, sabes que trabajo. Estoy exhausta todas las semanas. Entonces, si esto [su regreso a las canchas] puede suceder, necesito Tu ayuda’”.

Y el Padre Celestial, relata Cecilie, mostró Su amor por ella al responder aquellas oraciones que necesitaba:

“Sé que Él nunca está lejos. Él hará que las cosas sean mucho mejores de lo que creías posible”.

Su clasificación al US Senior’s Open 

Cecilie Lundgreen

Lundgreen posa junto al certificado de clasificación al US Senior Women’s Open. Imagen: Church News

Tras decidir que debía regresar al golf profesional, oró para saber dónde debía de prepararse para clasificar al competitivo US Senior Women’s Open, sintiendo firmemente que el lugar escogido era un campo de Virginia, una de las opciones que había en Estados Unidos para clasificarse. 

Esto requeriría un largo vuelo desde Noruega hasta Estados Unidos, a miles de kilómetros de su casa, con apenas unos días libres en el trabajo antes y después de la clasificación, lo que limitaba el tiempo de preparación.

“Estaba orando sobre cuál [camino] sería mejor para mí, y el Señor me dijo que este era el lugar, contó Lundgreen.

Fue así que, en un día de más de 100 grados, Cecilie Lundgreen obtuvo la tan ansiada clasificación. Un logro nunca antes alcanzado por ninguna de sus compatriotas. Sería la primera vez que Noruega tendría representación en el prestigioso certamen.

Un hito para el cual también, durante ese mismo instante, clamó por la fortaleza del Señor:

“Dije: ‘Por favor, ayúdame a tener fuerza y ​​energía’”.

Y esa oración fue respondida cuando Lundgreen salió al Meadowbrook Country Club y se dio cuenta de que no solo había clasificado, sino que había ganado por 7 golpes, muy por delante de las 2 competidoras más cercanas, que terminaron cada una con 78.

El poder e influencia del templo

Cecilie Lundgreen

Lundgreen en su viaje al centro de conferencias con las mujeres jóvenes de su país. Imagen: Church Newsroom

Además de sus constantes oraciones previas a la clasificación para el US Senior Women’s Open, Cecilie cuenta que priorizó santificar el día de reposo y asistir al templo.

En lugar de pasar tiempo en el campo el domingo antes de la clasificación, fue al Templo de Washington DC y caminó por los jardines. Y luego fue al Templo de Richmond, unos días después, junto con la presidenta de la Universidad del Sur de Virginia, Bonnie H. Cordon, quien sirvió como presidenta general de las Mujeres Jóvenes, como una forma de mostrar su gratitud al Señor.

“Ella es muy buena extrayendo poder de sus convenios, destacó la hermana Cordon sobre Lundgreen.

Además, mientras Cecilie estuvo en Virginia, la hermana Cordon también organizó una reunión con algunos de los atletas de golf de la universidad que preside para que pasaran tiempo con ella y recibieran algunos consejos de golf:

“Volvieron eufóricos de estar cerca de ella. Y pensé, sí, esa es la capacidad de Cecilie para validar y animar a los demás… Tiene una manera increíble de transmitir su fe dondequiera que va”.

Cecilie Lundgreen

Cecilie hizo historia al clasificar al torneo de mujeres mayores del US Open. Imagen: Norsk Golf

Una de las cualidades que la hermana Cordon admira de Lundgreen es su habilidad de estar agradecida por el trayecto, antes que por los resultados.

“Creo que hay mucho poder que surge al aceptar el viaje”, explicó la hermana Cordon sobre la fidelidad y confianza de Lundgreen en el Señor.

Ese amor sincero de Cecilie lo reflejan sus más de 16 años de servicio en la organización de Mujeres Jóvenes de la Estaca Oslo, Noruega, llevando a mujeres jóvenes de su país a las conferencias generales en Salt Lake City. 

Siempre intenta utilizar su experiencia e, incluso, su título de atleta profesional para influir positivamente en los jóvenes, especialmente porque atribuye gran parte de su buena salud actual a la observancia de la Palabra de Sabiduría.

Lundgreen declara con firmeza que nuestro Padre Celestial permite que cada persona haga su parte y, luego, Él compensa la diferencia. Y quiere que los jóvenes de la Iglesia también comprendan eso:

“Tenemos que dedicarle horas, tenemos que practicar, tenemos que estudiar, tenemos que dedicarle tiempo. Y cuando lo hagamos, entonces Él vendrá y compensará la diferencia”.

Fuente: Church News

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